Taxistas aceptaron nueva reunión con el Ministerio de Transporte: “No tenemos garantías”

Manuel Gil aseguró que en la capital colombiana están “inmovilizando y rompiendo los carros”

Manuel Gil, líder de taxistas de Bogotá, anunció que se levanta la protesta en la ciudad por "falta de garantías". Foto: captura de pantalla.

Desde antes de las 5 de la mañana del 22 de febrero, taxistas en diferentes ciudades del país salieron a protestar al no llegar a un acuerdo con el Gobierno nacional frente a la regulación de plataformas digitales para el transporte y el aumento en el precio de la gasolina.

Sin embargo, unas tres horas más tarde, el líder de los taxistas de Bogotá, Manuel Gil, apareció en un video en redes sociales dirigido a lo “compañeros del gremio” anunciando que en la ciudad las protestas se levantan por “falta de garantías”.

“Desafortunadamente, no tenemos las garantías para salir a protestar, para mostrar nuestro inconformismo en contra de este Gobierno. Vemos cómo en los distintos puntos de la ciudad de Bogotá nos están inmovilizando los carros, los están rompiendo. Por falta de garantías hemos decidido no seguir en la protesta, retirarnos”, dijo el líder gremial en el corto.

Gil añadió que se sostendrá una reunión virtual en horas de la tarde con los distintos líderes de cada zona para tomar una decisión en cuanto a las próximas acciones a realizar.

Otro de los líderes taxistas que aparece en el video, asevera que “responsabilizamos al Gobierno nacional de la sanguinaria forma en que trató hoy al gremio de los taxis. Estábamos organizados, estábamos pacíficos y llegaron a rompernos, a inmovilizarnos, a llevarse la gente presa, porque él quiere legalizar las plataformas. Esto es responsabilidad del Gobierno nacional”.

Manuel Gil, el líder de taxistas de Bogotá, denunció "falta de garantías" para protestar y el consecuente levantamiento de la protesta en la ciudad.

Como respuesta a este video, el presidente Gustavo Petro aseguró en su cuenta de Twitter que “en mi gobierno no hay falta de garantías. El taxista es un trabajador, muchas veces una mujer, cabeza de familia y el Estado debe ayudar a dignificar su trabajo. Las puertas del diálogo están abiertas”, escribió.

El presidente Gustavo Petro dijo en respuesta al video de Manuel Gil, líder de los taxistas de Bogotá, que en su gobierno "no hay falta de garantías".

De todas formas, el representante de los taxistas indicó en diálogo para la emisora Blu Radio que el paro continuará. “No lo hemos levantado. Levantamos la protesta en horas de la mañana, pero el paro continúa. Vamos a reunirnos con el comité para ver qué se decide en horas de la tarde”, dijo.

Mientras tanto, en otras ciudades las manifestaciones de taxistas continúan. En Ibagué, al rededor de 150 taxistas están reunidos en cuatro diferentes puntos y ya se han reportado algunas tensiones con las autoridades. En Medellín se registra una alta afluencia de taxistas en el sector de La Alpujarra, lo cual tiene completamente taponado el tráfico en ese punto de la capital antioqueña.

En Cali, los taxistas se han concentrado en todas las vías de acceso a la ciudad, aunque sin bloqueos. Solamente se reportó que la salida a Jumbo está cerrada por unos diez taxistas. En Cartagena, los taxistas mantienen taponada la transversal 59 y 54, así como el sector de Crespo vía al aeropuerto. Acá los taxistas anunciaron que se dirigirán y concentrarán en el centro de la ciudad y la Torre del Reloj.

También en Santa Marta hay bloqueos de taxistas en varios puntos. “Las vías de acceso al distrito serán bloqueadas desde las cinco de la mañana, y solo habrá un levantamiento de la protesta cuando el poder ejecutivo responda al pliego de peticiones que fue radicado. Entre las solicitudes del gremio está la de tramitar con urgencia el proyecto de Ley del Régimen de Sanciones, que estipula castigos para quienes pongan al servicio de los APPS como InDriver, Uber y otros, sus vehículos”, señaló Abel Martínez, presidente de la Asociación de Taxistas Unidos de Santa Marta (Agremitax), para Colprensa.

Cabe mencionar que las manifestaciones en Bogotá no tuvieron el éxito que se esperaba y no se causaron las afectaciones a la movilidad que habían estado especulando los capitalinos.