Una nueva modalidad de ingreso de armas a los estadios de Colombia fue detectada por la Policía Metropolitana de Bucaramanga el domingo 19 de febrero, luego de que 14 barristas del club Atlético Bucaramanga fueran capturados portando cuchillos en una de las tribunas del estadio Alfonso López Pumarejo de la capital santandereana.
Todo sucedió durante el desarrollo del partido entre el club leopardo y Atlético Nacional en el marco de la quinta fecha de la Liga BetPlay I 2023. La complicidad del delito de porte ilegal de armas blancas se cometió con ayuda de personas que no ingresaron al estadio, sino que se quedaron rodeando en exteriores la tribuna sur del recinto deportivo para comenzar a lanzar objetos.
Desde lo alto, los asistentes al evento deportivo así como la fuerza pública constataron varios lanzamientos de objetos, que finalmente fueron decomisados por las autoridades, pero que pudieron causar una tragedia o batalla campal con simpatizantes de Atlético Nacional y miembros de la barra Los Del Sur, una de las más grandes del país y que alienta al club Verdolaga.
Si bien el encuentro solamente contó con la presencia de aficionados locales, muchos de los asistentes y barristas de la Fortaleza Leoparda Sur optaron por ingresar desarmados, pero recibir las herramientas cortopunzantes estando situados en las tribunas del máximo recinto deportivo santandereano.
De acuerdo con el informe policial entregado por el general José Jaimes Roa, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, el interés de los asistentes no sería otro más que generar riñas dentro del estadio en los eventos futbolísticos:
Fueron 14 capturas que se realizaron por porte de arma blanca. Preocupa muchísimo que la población llega a estos eventos armada con cuchillos, armas blancas, porque muy seguramente es generar riñas o lesiones al interior
Los sujetos aprehendidos quedaron en control de las autoridades para recibir las medidas respectivas, entre las que están la detención, las multas y las sanciones por parte de la secretaría del Interior de Bucaramanga para no volver a ingresar al escenario deportivo.
Cabe resaltar que sobre las 8:00 p. m. del martes 24 de enero, Bucaramanga debutó como local contra Envigado FC por la Liga BetPlay I 2023 y en aquella oportunidad el llamado de las autoridades fue a celebrar el retorno de la fiesta del fútbol en paz con las siguientes medidas anunciadas por el comandante Jaimes:
Se tiene dispuesto por parte de la Alcaldía de Bucaramanga, la Gobernación de Santander y la Policía Metropolitana un dispositivo especial de tres anillos de seguridad, 400 uniformados y el acompañamiento de gestores de convivencia con el fin de brindar la seguridad necesaria a los asistentes del estadio
En aquella oportunidad fue habilitado el ingreso a los menores de cinco años en adelante en las barras oriental y occidental; mientras que en las barras norte y sur, solo pudieron ingresar mayores de edad. Así habló Jaimes Roa de la planeación en materia de seguridad para aquel evento:
Esperamos que haya un buen comportamiento por parte de la ciudadanía y de los hinchas del equipo de Envigado, tenemos que ser claros que no vamos a permitir mal comportamiento por parte de los hinchas, este es un llamado de atención a todas las personas que quieren alterar la convivencia. Tenemos un dispositivo, vamos a estar con las Caravanas por la vida, con el equipo de gestores de convivencia mietras se prohíbe el ingreso de alimentos, ya que habrá servicio de cafeterías. También el ingreso de correas con chapas grandes o elementos considerados como contundentes
Este fallo en el control del ingreso de barristas violentos a los estadios de Colombia se da luego de una semana de la agresión del fanático Alejandro Montenegro contra el futbolista Daniel Cataño, que derivó en una larga gresca y en el aplazamiento del juego entre Deportes Tolima y Millonarios FC por la Liga BetPlay I 2023 en el estadio Manuel Murillo Toro de Ibagué, lugar en donde se determinó por las autoridades deportivas que no habían garantías de seguridad para jugar el partido.