Asesinan al conductor de un mototaxi por negarse a realizar una carrera en Santander

Tres personas perdieron la vida en el área metropolitana de Bucaramanga, por casos de intolerancia, durante el tercer fin de semana de febrero. El último de ellos, el de un conductor de moto taxi que se negó a prestar un servicio, encendió las alarmas en la capital del departamento de Santander.

La víctima, identificada como Oscar Alejandro Torres, se habría rehusado a llevar al homicida, que intentaba llegar al barrio Villas de Girardot, en la comuna 4 occidental. Fue entonces que Junior Alfonso Escorsia, de 23 años, sacó un arma cortopunzante que cargaba entre su ropa y apuñaló a Oscar, hasta causarle la muerte.

Los demás visitantes del parque principal de Floridablanca observaron lo que sucedía y, en un acto de justicia por mano propia, atacaron a Alfonso Escorcia, causándole múltiples traumatismos, antes de que la Policía lograra intervenir.

Gracias a la denuncia oportuna de quienes presenciaron el crimen las autoridades lograron capturar al atacante quien, luego de la golpiza, fue trasladado al Hospital Internacional de Colombia, en donde se recupera hasta poder ser trasladado a la estación de Policía.

Con Oscar Alejandro Torres, ya son tres las personas asesinadas en hechos de intolerancia registrados durante el tercer fin de semana de febrero (2023), según el reporte oficial de las autoridades:

Al respecto, el coronel Misael Quiroga comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, declaró: “Lamentablemente, ocurren los incidentes de afectación a la vida de estos seres humanos que pueden ocupar cualquier rol en el núcleo familiar: padres, hijos, hermanos, sobrinos. Algo que todos lamentamos, sin importar los móviles utilizados, indiferente de la perfilación o los orígenes de sus muertes”, según referencia Blu Radio.

Los bumangueses, no están dispuestos a aceptar más muertes por actos de intolerancia en la ciudad, la turba es solo la punta del iceberg, de una comunidad harta de los abusos de quienes ayudan a perpetuar los índices de violencia e inseguridad, en la capital de Santander.

El primer hecho de intolerancia registrado durante el tercer fin de semana de febrero en Bucaramanga nos conduce al sector de Semiboscoso en el barrio Mutis.

Allí, en medio de una riña, un habitante de calle fue herido con arma blanca y perdió la vida en enfrentamientos con otra persona sin hogar.

Versiones preliminares apuntan a que la riña habría iniciado por un intento de robo, en inmediaciones del puente de ‘La Novena’, pero esta información aún no ha sido corroborada por las autoridades.

Antes del asesinato de Oscar Alejandro Torres, a manos del homicida de 23 años, Alfonso Escorsia, se registró otra víctima mortal por actos de intolerancia en la zona metropolitana de la ciudad de Bucaramanga.

En este, el segundo gran crimen de los últimos días, dos personas que ingresaron a un establecimiento comercial en el sector de Trinidad (Floridablanca), en la vía que lleva hacía ‘La Cumbre’, tuvieron un altercado, que terminó de la peor manera.

Testigos afirman que empezaron a discutir, por motivos que, hasta la fecha, se desconocen y, de un momento a otro, uno de los implicados abandonó el lugar.

Sin embargo, al poco tiempo, volvió a ingresar al establecimiento, esta vez con un arma de fuego en la mano, para dispararle al hombre con el que mantenía una discusión acalorada apenas unos segundos atrás.

Se desconoce si contaba con un permiso especial de porte de armas y quebrantó sus facultades o si, de plano, el arma en posesión fue adquirida de manera ilegal, por lo que no contaría con un registro.