La construcción de las etapas 5, 6, 7 y 8 del megaproyecto de Hidroituango podrían entrar en un proceso de incertidumbre frente a la adjudicación del contrato de esas obras. Empresas Públicas de Medellín (EPM) reveló que rechazó la oferta del consorcio chino Ituango PC-SC; sin embargo, el domingo 19 de febrero aclaró que la entidad todavía puede acreditar la experiencia necesaria.
De acuerdo con un informe conocido por El Colombiano, la oferta fue rechaza debido a que uno de los integrantes del consorcio “no cumplió con los requisitos de experiencia plasmados en los pliegos”. Se trata de la empresa colombiana Schrader Camargo S.A.S., que compone Ituango PC-SC junto con las firmas Yellow River y Power China Internacional.
A pesar de la negativa, EPM aclaró que el proceso todavía no se ha cerrado y la compañía tiene plazo hasta el miércoles 22 de febrero para sustentar nuevamente la experiencia presentada o entregar una nueva. De hecho, la firma mencionada indicó en un comunicado que sí cumplen con todos los requisitos de contratación y solucionarán los detalles del papeleo.
“Algunos de los certificados entregados, a criterio del contratante, requieren mayores detalles”, precisó Schrader Camargo, según El Colombiano.
Se espera que la empresa nacional entregue la documentación requerida para poder adjudicar el contrato que permitirá el desarrollo de las unidades 5, 6, 7 y 8, que brindaría el 17% de la energía al Sistema Interconectado Nacional (SIN) en Antioquia. En caso de que EPM le dé luz verde, el proceso de contratación iniciaría en marzo, de acuerdo con el último cronograma publicado.
No obstante, si determinan que definitivamente Schrader Camargo no cumple con los requisitos de experiencia necesaria para la fase final del megaproyecto, el panorama sería incierto. La empresa tendría que empezar el proceso desde cero, teniendo en cuenta que el 7 de diciembre de 2022 se cerró definitivamente la puerta para presentar las ofertas.
En ese momento, el consorcio chino entregó una oferta de 991.043 millones de pesos y fue el único que se presentó a la licitación. Desde ese momento, EPM empezó el proceso de evaluación y “se estima que el inicio de obras comience en el segundo semestre de 2023″.
Problemas con los requisitos en los pliegos
Desde julio de 2022, una de las empresas del consorcio puso sobre la mesa los problemas con la experiencia de las firmas colombianas. “La búsqueda intensa del socio local que hemos realizado por más de tres meses no ha sido exitosa”, destacó Yellow River y le solicitó a EPM modificar los requisitos en los pliegos.
De acuerdo con el diario antioqueño, la compañía manifestó que “muchas de las firmas locales que exploramos nos indican no tener interés en participar en este proyecto” o no cumplían los requisitos. La única entidad que sí representaba una alternativa para asociarse era Schrader Camargo S.A.S.: “cuenta con amplia experiencia en este tipo de trabajos”.
EPM sí accedió a modificar algunos de sus parámetros; sin embargo, no fueron suficientes para que considerar que la empresa cumpliera con la experiencia necesaria.
Los tropiezos con el proceso del megaproyecto
De acuerdo con la Alcaldía de Medellín, el objetivo de Hidroituango es generar energía para todo el país. Para lograrlo, los ingenieros tuvieron que desviar el río Cauca —el segundo más importante del país— y se proyecta tener una central subterránea de 2400 MW de capacidad instalada y 13 930 GW hora de energía media anual.
El Colombiano resaltó que el proceso de licitación de la hidroeléctrica tuvo varios tropiezos. EPM decidió en marzo de 2022 buscar un nuevo constructor para terminar el megaproyecto, a pesar de que le recomendaron no hacerlo.
Pese a que desde abril había casi 10 empresas interesadas en comprar los derechos para participar, el siniestro de 2018 y los riesgos en las unidades 5, 6, 7 y 8 han hecho dudar a más de un consorcio. Ese fue el caso de CCC Ituango —según el medio de comunicación mencionado— que estuvo al frente de la hidroeléctrica, se abstuvo de pujar por la licitación.