Más de 160 indígenas habrían desaparecido durante el conflicto armado en la Sierra Nevada de Santa Marta

Bajo el Plan Operativo Indígena, la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas iniciará la búsqueda de indígenas desaparecidos entre los años 2000 y 2007

Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas iniciará la búsqueda. Procuraduría General de la Nación.

Un comunicado que fue emitido por parte de la Confederación Indígena Tayrona y las autoridades tradicionales de la Sierra Nevada de Santa Marta, declaró que se iniciará la búsqueda de cerca de 160 indígenas que desaparecieron en el marco del conflicto armado en el país.

La labor estará a cargo de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas, que realizará la actividad en búsqueda de indígenas de los pueblos Kankuamo, Arhuaco, Kogui y Wiwa, ubicados en la Sierra Nevada. Para ello, se construyó una mesa de trabajo en la que se construyó lo que denominaron: Plan Operativo Indígena.

De acuerdo con la información, no hay rastro de los indígenas desaparecidos, hechos que habrían ocurrido entre los años 2000 y 2007, según los datos, por culpa de grupos armados al margen de la ley que ingresaron al territorio y que ejecutaban operaciones en la zona.

En palabras del Cabildo Gobernador Kankuamo, Jaime Luis Arias: “En principio buscamos, establecer los mecanismos y las acciones que permitan el saneamiento cultural y espiritual por esas afectaciones al territorio y que sentimos cuando nuestros mamos, mayores y autoridades buscan relacionarse con la naturaleza”.

El Cabildo también aseguró que el proceso de búsqueda estará acompañado de ceremonias y ejercicios orientados a encontrar a todos los indígenas que desaparecieron durante el conflicto armado. Mencionó que esto permitirá no solo iniciar un seguimiento formal de las desapariciones, sino también establecer medidas que contribuyan a la reparación cultural y espiritual tanto a las comunidades, como al territorio.

Además, según Arias, en varias ocasiones han señalado la importancia de iniciar con esta labor y que se asigne una prioridad inmediata debido a que llevan mucho tiempo sin saber de estas personas. En particular, destacó: “En este caso los familiares y sobre todo nosotros como autoridades consideramos vital poder avanzar en el tiempo”.

Destacó que se ha establecido un tiempo determinado en el que se espera que en los próximos meses el plan empiece a operar, pues señaló que ya se tienen los medios institucionales para iniciar y las autoridades indígenas están listas para aportar al proceso con toda la información que se requiera.

Nukak y jiw, otros pueblos indígenas olvidados y su crisis

Una vez más la crisis en la que han vivido en los últimos años las comunidades indígenas del país vuelve a agudizarse. Este es el caso de los pueblos indígenas del Guaviare, en particular de los nukak y jiw, quienes en los últimos 40 años han sobrevivido bajo condiciones graves de salud y alimentación en los territorios.

La investigación que adelantó El Espectador ha señalado que, si bien la Corte Constitucional reconoció al pueblo nukak como sujeto de especial protección constitucional, frente a lo cual también emitió obligaciones determinadas para las autoridades, en la actualidad el Auto 004 de 2009 declaró que es un pueblo en riesgo de extinción cultural y física.

Incluso, el Auto 173 emitido en 2012 declaró que los dos pueblos debían estar sujetos a medidas urgentes de protección. Sin embargo, los casos y el endurecimiento de la crisis no ha secado.

A esto se suman situaciones problemáticas como la drogadicción, donde el consumo de pegante bóxer, “perica” y marihuana, inició dentro de los pueblos. Parte de este consumo les ha permitido soportar el hambre que padecen. De hecho, algunos jóvenes de los pueblos han sido llevados a programas de rehabilitación.

Por ahora, Gustavo Petro se ha pronunciado al respecto declarando como “etnocidio” la situación que están viviendo los indígenas en el Guaviare, razón por la que ordenó que una comisión especial del ICBF en compañía una comisión enviada por la Presidencia, hicieran presencia en el lugar. Como parte del proceso, la Defensoría del Pueblo también habría enviado un equipo de funcionarios para realizar una verificación de lo que sucede en los pueblos.