Tras la presentación de la reforma a la salud por parte del Gobierno nacional al Congreso de la República son varios los puntos de vista que se han originado por parte de expertos en la materia y por la comunidad en general.
Ante esta problemática algunos convocantes organizaron dos movilizaciones con sentidos diferentes, uno de estos en apoyo a la gestión que está llevando a cabo el Gobierno nacional y el otro, por parte de la línea opositora; que durante las marchas solicitaron a su vez la renuncia de Gustavo Petro.
El tema de partida para las movilizaciones fue la reforma a la salud, que si bien los expertos en el área coinciden en que los lineamientos abordados por el Gobierno han sido menos radicales de lo que se había pensado, lo cierto es que aún genera bastantes dudas y resistencias entre una parte de la ciudadanía.
De hecho, Change.or (plataforma de activismo social) informó que más de 32.700 bogotanos están apoyando una “firmatón” en la que manifiestan su inconformismo y preocupación por lo que está proponiendo el proyecto de ley.
“Consideran que el documento, y sobre todo la ministra Carolina Corcho, lo que busca es hacer un revolcón al sistema de salud que, según su opinión, afectaría el servicio y generaría mayores problemas en la atención”, resaltó Change.or.
Quiénes están en contra
La plataforma resaltó que uno de los líderes de la petición es Jorge García, odontólogo de profesión, que solicitó al presidente Gustavo Petro que mejore, proteja y fortaleza el sistema de la salud colombiano y no lo acabe con un proyecto de ley que podría debilitarlo y deteriorarlo.
Esta iniciativa ha sido apoyada por más de 32.000 personas que han firmado digitalmente esta petición. García añadió que esta reforma “no tiene ni pies ni cabeza”, y que no se trata de un tema político, sino de calidad en el servicio a la ciudadanía.
“El estar diagnosticado con diabetes tipo 1, ser insulinodependiente, sufrir de tensión alta, tener además insuficiencia renal crónica terminal y haber recibido un trasplante de riñón, me autoriza para hablar de la salud en nuestro país y de los beneficios que hoy tenemos prácticamente todos los colombianos y que no podemos perder como consecuencia de un proyecto de ley que no tiene mayor sentido”, afirmó García.
Según el odontólogo, hoy el 99% de los colombianos está cubierto por servicios como consultas, procedimientos, medicamentos y cirugías, entre otros de mayor complejidad. El líder de la petición comentó que Colombia cuenta con un moderno sistema calificado de salud.
“Pasamos de tener un sistema muy limitado en sus recursos, talento humano, cobertura y presupuesto, a uno moderno, con talento humano idóneo y calificado, que cuenta con altos estándares y que es reconocido en todo el mundo. Pero esta reforma a la salud quiere cambiar lo que está bien hecho”, enfatizó García.
Señaló que el sistema actual de salud, aun con sus debilidades, funciona y está cubriendo las necesidades de la salud de los colombianos, que en palabras del ciudadano se efectúa sin discriminaciones y sin comprometer el patrimonio familiar, a diferencia de otras naciones.
Por último, García reiteró que es el momento perfecto para que todos alcen sus voces y exijan compromisos claros, francos y directos con el propósito de fortalecer y proteger el sistema de salud colombiano y no cambiarlo con una reforma que está generando división.
Quiénes están a favor
En contraste, se abrió una nueva petición en la que 11.200 ciudadanos están respaldando el proyecto de ley del Gobierno nacional. La solicitud fue gestada por Rocío Rojas, docente de profesión, que pese a pertenecer a un régimen especial, apoya la mencionada reforma.
La docente exigió un verdadero cambio en el sistema de la salud, y agregó que se le debería quitar el poder a las Entidades Prestadoras de Salud (EPS), para que estas no sigan despilfarrando los recursos de los ciudadanos.
Según niveles de interactividad analizadas por Change. org, esta bogotana se volvió viral en redes sociales y ha conseguido el apoyo de más de 11.200 personas que respondieron el #LaSaludNoEsNegocio firmando digitalmente esta iniciativa.
“La ley 100 creó a las EPS, que no son más que intermediarias que se quedan con más de la mitad del presupuesto destinado para la salud en Colombia, ocasionando la crisis más grande que afecta el sistema: la iliquidez. En el momento la mayor parte de hospitales públicos están en total quiebra y abandono, los empleados siguen subcontratados y se encuentran en condiciones laborales caóticas, ni hablar del servicio prestado a los usuarios”, explicó Rojas.
La docente añadió que este tipo de entidades carecen de los implementos básicos y los recursos necesarios para brindar una adecuada atención, reciben pocos recursos para la adecuación y dotación de los equipos de alta tecnología, sumado a que los hospitales municipales no cuentan con los recursos esenciales para prestar un adecuado servicio.
Para Rojas, la salud se convirtió en un sistema curativo en vez de ser preventivo, a lo que sumó que “las personas esperan meses para ser atendidos y son negados distintos tratamientos que son obligatorios y a los que solo es posible acceder a través de tutelas”.
Qué papel juega Change.org en esta discusión
La directora de Change.org Colombia, Diana Durán, explicó que se juegan dos papeles fundamentales para establecer una neutralidad y generar una intervención transparente en la participación ciudadana, a través de la plataforma.
- El primero de estos es un termómetro: ya que por medio de esta plataforma la ciudadanía puede acceder a la creación de una petición en cuanto a temas de coyuntura nacional y local.
- El segundo es el canal de veeduría: a partir de la creación de las peticiones, firmas y de comunidades la ciudadanía exige a las autoridades competentes respuestas sobre un tema en específico.
“Las autoridades contestan en muchos casos las iniciativas ciudadanas y la persona que crea su petición tiene a través de la plataforma una forma para contarle a los firmantes lo que está pasando.”, aclaró la directora.
Durán expresó que si después de un tiempo la persona que generó la petición no tiene respuesta por parte de la autoridad responsable, el ciudadano podrá solicitar a la plataforma herramientas de divulgación para generar un contacto inmediato con las autoridades correspondientes.
“A través de un tuit, a través de una movilización en las redes sociales, en Instagram, en Twitter, en TikTok, se insta a que esta autoridad nos responda sobre lo que está sucediendo”.
Finalmente, Durán resaltó que el rol de Change.org en momentos cruciales, como el actual, es el de ser un canal de participación ciudadana y el contribuir con la respuesta o atención por parte de las autoridades o entidades responsables.