El martes 14 de febrero, el presidente Gustavo Petro defendió tres de sus reformas —que presentarán ante el Legislativo— en la Plaza de Armas de la Casa de Nariño. El jefe de Estado habló acerca del proyecto de ley que modifica el sistema de salud, de trabajo y de pensión en Colombia, sobre la cual criticó la actual Ley 100.
“Se vende la idea de que tenemos uno de los mejores modelos pensionales consignados en la Ley 100 y es mentira”, aseveró el primer mandatario ante las personas que se movilizaron apoyando al Gobierno nacional. De acuerdo con Petro, la iniciativa le permitirá “a la mitad de los viejos y viejas del país que hoy no tienen cómo y que tienen que salir a las calles a vender Bonice o papitas”.
El presidente señaló que la Ley 100 generó “dos mundos” en el que unos cotizan en fondos privados de pensiones y otros no lo hacen porque “no logran trabajar formalmente”. En ese segundo panorama, las personas no acceden a salarios, sino al “rebusque”, por lo que no accederán a esa prestación económica.
“Le están diciendo a la mitad de los viejos y viejas de Colombia, que nunca, por más que busquen, (...) no habrá una pensión de parte del Estado”, agregó.
Al respecto, aclaró que la propuesta central de la reforma no consiste en que “el cotizante le pague la pensión al que no tiene siendo viejo, porque eso lo paga el Estado al ser un derecho”; sin embargo, para que esto pueda lograrse “se necesita que no pague lo que el cotizante sí podría pagar en este momento que son los pensionados de Colpensiones”.
La pulla a dos banqueros de Colombia
Gustavo Petro explicó que la Ley 100 establece que “solo los que ganen más de cuatro salarios mínimos y durante el tiempo que se exige cotizar, quizás tengan una pensión”. En ese sentido, aquellos que cotizan en los fondos privados de pensión, al tener un ingreso mensual menor a lo establecido, “nunca tendrán una pensión”.
El jefe de Estado afirmó que “la ley de pensiones le dice a la mayoría del pueblo colombiano que cuando envejezcan (....) no tendrán una pensión”. Ante ese panorama, el líder natural del Pacto Histórico calificó la situación como injusta y destacó que “así no se construye la paz”, pues el mecanismo habría beneficiado históricamente a una minoría.
“Solo enriquece a dos banqueros”, sentenció el presidente, a pesar de que no brindó nombres. “Ha generado que el dinero de los cotizantes, guardado durante 20-30 años, esté bajo el control y uso de los dueños de los bancos y no de los dueños de las cuentas de ahorro”, puntualizó Petro.
El primer mandatario también recordó el momento en el que se aprobó la Ley 100 en 1993, cuando estuvo en el Congreso de la República por primera vez como parlamentario. Desde ese momento, “hemos tenido una enorme masa de cotizantes, 18 millones, entregando el dinero todos los meses a los dos más grandes bancos del país, mientras nadie recibe pensión”.
Para el líder progresista, el sistema actual representa un “negociazo” a costa del trabajo de los colombianos. Durante 30 años, “se han manejado hasta 300 billones de pesos que se han convertido en negocios” destacó Petro y mencionó compras como las acciones en el Grupo de Energía de Bogotá y préstamos al Estado con “una muy bonita tasa de interés”.
El jefe de Estado concluyó su intervención respecto a esa reforma hablando sobre ese negocio actual: “El Estado a través de sus impuestos paga los pensionados del sector privado mientras dos banqueros recogen las cotizaciones de los trabajadores jóvenes que no se van a pensionar”. A su vez, resaltó que su propuesta generó que esos “dos banqueros no me quieren”.