Se acabarán los copagos y las cuotas moderadoras con la reforma a la salud, aseguró el presidente de la Adres

En el nuevo sistema, la Adres pasaría a recoger los recursos públicos para girarlos a los prestadores de salud directamente

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Félix León Martínez, director de
Félix León Martínez, director de la ADRES. Foto: ADRES

Fue radicado el proyecto de ley que pretende darle vida a la reforma a la salud propuesta por el gobierno de Gustavo Petro, en el que la Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud (ADRES) recibiría las facturas y pagaría los procesos realizados en los centros de salud sin que haya una intermediación.

Esto le daría un papel clave a esta entidad, pues estaría encargada de recoger todos los recursos públicos para girarlos directamente a hospitales, Instituciones de Salud del Estado (ISE) o incluso las EPS, que en el nuevo sistema podrían construir y administrar Centros de Atención Primaria (CAP).

Por ello, el presidente de la ADRES, Félix León Martínez, reveló detalles de cómo funcionará esta entidad según lo plantea la reforma. Es ese sentido, aseguró que se buscará que los ciudadanos que puedan pagar lo hagan, pero que no tener dinero no será un impedimento para acceder al sistema de salud.

“Respecto a las cuotas moderadoras, partimos de un fallo de la Corte Constitucional que dice que la salud es un derecho fundamental. Es decir, que, si no tiene para la cuota moderadora, no se puede suspender el servicio”, manifestó en una entrevista para la emisora Blu Radio.

Agregó que las cuotas moderadoras, también conocidas como copagos, se acabarían progresivamente, pero que los sistemas de seguridad social son prepago y que, por tanto, tarde o temprano terminarán pagando.

“El Departamento Nacional de Planeación está planteando que todos los ciudadanos declaren sus ingresos y va a agarrar a mucha gente que no está pagando o que está en el régimen subsidiado. De modo que el sistema va a cobrar, pero no en la puerta del hospital. Eso no significa que no le compre después, cuando le tenga que cobrar”, indicó para el medio mencionado.

Cabe mencionar que el articulado plantea que para que la ADRES pueda cumplir la función propuesta se cree un Fondo Único Público de Salud, a través del cual la entidad pueda garantizar el adecuado flujo, administración y control de los recursos.

De igual forma, la ADRES también administraría la Cuenta Única de Recaudo, en la que recibiría todos los aportes en salud. “Esta cuenta contará con un mecanismo de registro de tipo electrónico y con un sistema único de identificación de usuarios, basado en el documento de identificación empresarial y ciudadana, según corresponda”, dice el texto.

La entidad giraría entonces el dinero a los prestadores de salud a través de fondos regionales que funcionarían como sucursales en los diferentes territorios del país.

Se conformarían entonces siete regionales que tendrían una asignación presupuestal para ordenar el pago de servicios de mediana y alta complejidad. Además, habría 33 oficinas departamentales que recibirían y auditarían las cuentas médicas, las incapacidades y las licencias, así como el Soat. Para todo esto, la reforma plantea la descentralización y fortalecimiento de la ADRES.

¿Qué pasará con las EPS?

De aprobarse la reforma a la salud, la figura de las EPS como pagadoras desaparecería paulatinamente, debido a que esta función la obtendría la ADRES. Así lo explicó el presidente de la entidad para la emisora Blu Radio.

“Como pagador sí (desaparecerán), en otras funciones no. Si pueden hacer prestación y tú conoces muchas EPS que tienen grandes clínicas. Está planteado a mediano y largo plazo la sustitución progresiva de ese sistema y que el Adres desarrolle una organización para ser pagador”, le dijo a ese medio.

Explicó que la idea es quitarle esta carga a las EPS para que se concentren en prestar servicios a nivel territorial. “No hay un tiempo decidido, cerrado, el tiempo será el necesario para que no haya traumatismos. El nuevo sistema entrará por territorios apartados, donde la situación es muy complicada”, indicó.

Sobre los costos de la reforma, que incluye recuperar la atención primaria y recuperar los hospitales públicos, indicó que “esas dos cosas juntas nos significan tres décimas del PIB en cuatro años. Eso lo acordamos ya en las negociaciones con el Ministerio de Hacienda. Es un poco menos (de 20 billones) porque esos 20 billones incluyen otros gastos. Todo juntos sí incluyen esos 20 billones”.

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