En la mañana del jueves 9 de febrero, monseñor Luis Manuel Alí anunció que la Iglesia católica colombiana estaría dispuesta a pedir perdón a víctimas de casos de pederastia perpetrados por sacerdotes en el país.
En su pronunciamiento, mencionó la necesidad de realizar ese gesto de perdón teniendo en cuenta cada uno de los casos de abuso sexual contra menores de edad. En ese sentido, explicó también que “estamos muy conscientes de que esto es importante para las víctimas en el proceso de reparación integral”.
De igual manera, aclaró que cuando se conocen denuncias contra sacerdotes por casos de pederastia, las medidas que se toman son la expulsión de sus cargos y una orden para que se aleje de la comunidad; es decir, las medidas cautelares canónicas, según explicó monseñor. Incluso, aseguró que si la justicia ordinaria determina que esos curas deben ir a la cárcel, hay que acatar ese mandato.
“En esto tenemos claro, pues, que un sacerdote es un ciudadano y les recuerdo que el artículo 20 del Concordato es inexequible, porque precisamente versa sobre la inmunidad del clero. Es decir, van a la cárcel”, enfatizó Alí. También dijo sobre la expulsión de los sacerdotes involucrados en casos de abuso contra menores que a los culpables “no los mandamos a paseo” sino que se establecen las condiciones para que acudan a un ‘centro de arrepentimiento’ y de acompañamiento por el delito cometido.
Bajo ese panorama, monseñor especificó que están buscando un día ideal para realizar este acto de perdón. Sobre esto, planteó que podría ser en cuaresma, o en el día que se conmemora el viacrucis, o en el Día de las Víctimas, el 18 de noviembre.
En Colombia, los abusos sexuales por parte de miembros de la iglesia siguen siendo un tabú y la persecución es limitada, a pesar de que en 2019 reconoció más de un centenar de casos cometidos por sacerdotes.
El periodista Juan Pablo Barrientos, que ha estudiado profundamente este tipo de casos, calcula que, a pesar de que solo se podría saber si los archivos secretos de la iglesia se hicieran públicos, entre el 20 y el 30 % de los sacerdotes en Colombia tienen denuncias por abusos sexuales de niños, niñas y adolescentes.
Vale mencionar que el miércoles 8, la Iglesia católica, en cabeza de monseñor Juan Carlos Cárdenas, rechazó el uso de vientres subrogados. Al respecto, expresó que esta práctica es “poco ética”.
Sobre esto, mencionó en diálogo con Blu Radio que “nosotros no aceptamos ese camino como un camino éticamente válido, por lo cual siempre invitamos también a quienes de alguna manera por las condiciones naturales no están en la posibilidad de tener hijos a abrirse también con generosidad a la adopción”.
Dicho pronunciamiento lo hizo luego que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) informara que, si bien es cierto que 800 adopciones al año no es una cifra del todo baja, la realidad es que hay más de 4.000 niños en Colombia esperando encontrar una familia.
La entidad también mostró su preocupación porque de esta cifra, 3.690 son menores en condiciones especiales de adopción, lo que quiere decir, que o son mayores de ocho años, o tienen alguna condición difícil de tratar.
Sin embargo, el ministro de Justicia, Néstor Osuna dio a conocer que ya está listo el proyecto de ley correspondiente a esta práctica y que fue radicado por el representante a la Cámara Alejandro Ocampo, del Pacto Histórico. El objetivo es que se frene la trata de menores que se hace pasar por maternidad subrogada.
*Con información de EFE.