En la tarde del lunes 6 de febrero, el Gobierno de Brasil anunció que también participará en los diálogos de paz entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional —ELN— en condición de país garante.
A través de un pronunciamiento oficial, la cancillería brasileña resaltó que ese proceso, cuyo segundo ciclo de conversaciones se realizará en México, es “fundamental para la consolidación de la paz en Colombia y de una gran importancia, en consecuencia, para la región y para el mundo”.
De paso, recordó que ese país había participado de los diálogos adelantados con la misma guerrilla durante el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos, los cuales fueron suspendidos por Iván Duque en 2019 luego del atentado con carro bomba en la Escuela Militar de Cadetes General José María Córdoba, el 17 de enero de ese año.
Vale mencionar que este proceso, que hace parte de la política estatal de Paz Total planteada en primera instancia por el presidente Gustavo Petro, ya tiene como garantes a Cuba, Noruega, Venezuela, México y Chile. Estas dos últimas decidieron hacer parte de los diálogos en septiembre del año pasado, respectivamente.
En noviembre de 2022, el Gobierno nacional propuso que México, Chile y Brasil también fueran garantes en los diálogos. En respuesta, Gabriel Boric, mandatario de la nación austral, firmó el 1 de diciembre una carta dirigida a las delegaciones de Colombia y el ELN y en la cual aceptó la invitación hecha para ser garante.
“Tengo el agrado de acusar recibo de vuestra atenta carta en que se invita a Chile a participar en calidad de país garante en la Mesa de Diálogos y el Proceso de Paz que se adelanta por estos días en Caracas, Venezuela”, precisó la misiva. A su vez, Boric Front reiteró la voluntad de ese país en contribuir a la construcción de paz “y nos disponemos a asumir el rol de garante que tan generosamente se nos ofrece en esta importante etapa”.
El comunicado emitido por la Cancillería de Brasil ratificó su “satisfacción” por volver a contribuir en la pacificación de Colombia y el resto de América Latina. De hecho, ese fue uno de los temas dialogados en la cumbre que se adelantó entre los presidentes Petro y Lula da Silva el 2 de enero de este año: la Paz Total.
Al respecto, ambos mandatarios hablaron en esa reunión sobre la importancia que tendrá Brasil en la consolidación de esa política de Estado en Colombia. En ese sentido, el mandatario nacional le volvió a proponer a su homólogo ser garante no solo en los diálogos con el ELN, sino en otros procesos de paz que se puedan llevar a cabo hasta que culmine su periodo presidencial.
Otro tema relacionado con la consolidación de la paz en el país fue el eventual cambio en la política de drogas tanto de Colombia como del país vecino. Vale recordar que ante diferentes escenarios internacionales, Petro Urrego ha calificado dichas medidas como un “fracaso”, especialmente en la Asamblea General de Naciones Unidas celebrada en septiembre de 2022.
También, también ha advertido en reiteradas ocasiones sobre la necesidad de transformar los actuales lineamientos para la erradicación de cultivos ilícitos y el negocio del narcotráfico.
“Rehacer una política antidrogas a partir de la prevención de la salud pública y no de la criminalización, casi que podría llevar a Colombia a la paz en cuestión de meses. Eso depende de los Estados Unidos”, había mencionado el presidente Petro en noviembre del año pasado desde Francia.
Así las cosas, Petro aseguró después de la cumbre con Lula que Brasil será “garante de la paz y del estudio de la interconexión eléctrica de las Américas con fuentes de energías limpias.”
*Con información de EFE.