La selección Colombia es acompañada desde 2016 por un grupo de aficionados que con el propósito de detener la violencia entre aficionados de sus equipos y unificar una pasión por alentar desde las graderías de los estadios crearon la Fiebre Amarilla, una barra futbolera que con cánticos dedicados a la Tricolor contribuye no solo con el equipo, sino que ha generado un cambio en el chip de cientos de hinchas en Bogotá y en el país.
Juan Felipe Garay y Cristian Orozco, hinchas de Millonarios FC e Independiente Santa Fe, respectivamente, tomaron la iniciativa de crear una barra que unificara a las hinchadas con el propósito de alentar al combinado nacional en los estadios de todo el mundo.
La fidelidad a sus camisetas no impidió que pudiesen encontrar puntos de acuerdo para darle forma a un proyecto, que es reciente en Colombia, pero popular en Argentina y Perú.
La Fiebre Amarilla es denominada como la barra oficial de la selección Colombia, nació en Bogotá y se ha extendido por todo el país. En la actualidad cuenta con hinchas de los equipos más populares del fútbol colombiano y también actúa como organización social.
En declaraciones para Infobae, Juan Felipe Garay relató cómo desde la casa de su abuela en Tolima comenzó a enamorarse de su equipo, luego, con ayuda de su tío y su abuelo, empezó a visitar más El Campín y con el paso del tiempo, alentar a Millonarios se convirtió en su estilo de vida. Sin embargo, relató cómo esta misma pasión pudo acabar con su vida.
“Duré un año inactivo después de un incidente con hinchas de Nacional, casi pierdo la vida, desde ahí dije, mi hijo no tiene que vivir esto, le bajé a esto un poco, pero la pasión a veces nos juega malas pasadas en la cabeza, nos volvemos muy territoriales”, señaló.
Por su parte, Cristian Orozco, hincha de Santa Fe, contó cómo se conoció con Juan Felipe y en qué momento se consolidó la idea de crear una barra que apoyara al equipo por el que todos se sienten representados: la selección nacional de fútbol.
“Nos conocimos en el Hexagonal del Olaya (tradicional torneo de fútbol), comenzamos la reunión y por diferentes temas se terminó”, indicó Cristian, que luego explicó que desde el comienzo fue difícil encontrar puntos de acuerdo para darle inicio a esta iniciativa.
Pese a las dificultades, las dos hinchadas lograron ponerse de acuerdo y esta se convirtió en una de las mejores decisiones de su vida, manifestó Cristian. “Con la Fiebre Amarilla hemos viajado por todo el país, estuvimos también en Brasil y Perú, en varios países, desde que estaba con la Guardia viajé mucho y espero hacer lo mismo con la barra de la Selección”, comentó.
Sobre la verdadera casa de la selección Colombia
La ausencia de Colombia en la Copa del Mundo en Qatar 2022 generó un sentimiento de nostalgia e ira de muchos hinchas en el país, algunos inclusive culparon a Barranquilla por la falta de apoyo de los asistentes al Metropolitano. Este debate se ha mantenido desde hace meses y aún hay seguidores de la selección que consideran que el equipo nacional de fútbol debería cambiar de sede.
Los líderes de la Fiebre Amarilla aseguraron que no se trata de la sede y que esta barra se creó precisamente con el propósito de alentar a la selección Colombia desde cualquier lugar del mundo.
“Es una iniciativa que cubre a todo Colombia, en nuestros ideales está unir a un país, conocemos que en el tema ‘barra’ hay gente que le gusta la droga, pero acá tenemos un respeto porque no es solo barras bravas, aquí pueden participar las familias”, aseveró Cristian.
En cuanto a la sede de la selección Colombia, esta es la propuesta de los líderes de la barra de la selección: “debería ser rotativa, Cali fue una buena plaza, Medellín es una sede futbolera que también puede ser una buena casa, allá nos han abierto las puertas al proyecto”, indicó Juan Felipe.
Además, mencionó que en su experiencia como barrista, Bogotá es la mejor plaza en cuanto a las condiciones logísticas. “En Bogotá nos han dado más apoyo, la alcaldía, la secretaria de Gobierno, Goles en Paz, la Policía... en Bogotá recibimos más ayudas logísticas que en otras ciudades”, sentenció.
El sudamericano sub-20 ha vuelto a despertar el interés del público por apoyar a la selección Colombia, pero Cristian y Juan Felipe mencionaron que a pesar de los esfuerzos que se han hecho por crear cánticos y hacer que las familias participen de este proyecto, hay personas que aún son escépticas.
“Intentamos hacer que la gente cantara, la gente tiene un concepto erróneo de las barras, pero nosotros queremos cambiar ese pensamiento. El martes (en el partido de Colombia vs. Uruguay), un señor mayor me dijo que si podía tocar uno de los tambores, de eso se trataba, que las familias se involucren”, señaló con emoción Juan Felipe.
Finalmente, los líderes de la Fiebre Amarilla manifestaron que no es necesario ‘imitar’ a los proyectos de otras selecciones suramericanas, y aunque respetan la pasión de los argentinos, consideran que si se trabaja podrían, inclusive, tener una barra de esa categoría.
“Nosotros podemos sacar canciones adaptadas para nuestra selección y vamos a sacar varias con nuestra música, no tenemos que copiar a los argentinos, podemos ser mejores que ellos”, aseguró Cristian.
Trabajo social
El trabajo de la hinchada no solo pasa por la parte deportiva, también en pro de habitantes necesitados en Bogotá, así lo relata Laura Rojas, integrante de Fiebre Amarilla y una de las hinchas que más participa en el proyecto.
“Nosotros hacemos labor social, actualmente tenemos tres actividades muy marcadas, en Halloween buscamos disfraces o ropa que la gente quiera regalarle a los niños, hacemos un refrigerio y llevamos dulces, en diciembre igualmente un refrigerio, buscamos regalos y hemos trabajado con poblaciones en las que entregamos más de 600 regalos” relató Laura.
“En enero, no es habitual, pero se hace entrega de kits escolares y también trabajamos con habitantes de calle, abuelitos; en pandemia fue un año en el que nos movimos mucho con el tema social, pues no teníamos fútbol”, comentó la integrante de Fiebre Amarilla que aseguró que el trabajo social de la hinchada de la selección Colombia se consolidó en medio de una de las coyunturas más críticas como lo fue la pandemia por covid-19 en 2020.
“En este tiempo salimos a las calles a regalar ropa, hacíamos chocolatadas en las calles, llevamos sándwiches, tamales, hemos estado en el centro, principalmente con los habitantes de calle”, indicó.
La Fiebre Amarilla invitó a los aficionados al fútbol y a la selección Colombia a involucrarse más con este proyecto, a participar en los cánticos que ellos mismos crean sobre canciones colombianas y a darle una nueva oportunidad a las barras futboleras que desde sus lineamientos como organización plantean dinámicas nuevas para vivir esta pasión, pero disfrutándola en paz.