El lunes 30 de enero, la Sección 16 de la Audiencia de Madrid juzgó a diez integrantes del Clan de los Yiyos, una banda de sicarios que estaba al servicio de narcotraficantes en Cali desde la década de los 90. El tribunal español condenó a dos de los criminales a siete años y tres meses de cárcel por poner en marcha un entramado que blanqueaba dinero procedente de la venta de droga y de los asesinatos a sueldo.
De acuerdo con la Agencia EFE, entre los implicados estaba uno de los cabecillas del grupo criminal, Jaime Londoño García, que sería el responsable de circular hasta 2′644.985 euros gracias al blanqueo de dinero procedente de las actividades ilegales entre 2013 y 2020. Para la Fiscalía, el líder es “un destacado dirigente del colombiano Clan de los Yiyos, organización involucrada desde los años 90 en actividades delictivas vinculadas al narcotráfico y operaciones violentas”.
Esas acciones fueron posibles gracias a la ayuda de los demás integrantes, incluyendo a su lugarteniente, Albert Mauricio M.L. Ambos se acogieron a un acuerdo firmado con la Fiscalía en el que reconocieron su responsabilidad para acceder a una rebaja de pena. Inicialmente, el ente acusador había solicitado una pena de 17 y 13 años, respectivamente; sin embargo, tras aceptar su culpabilidad, la condena final fue de 7 años y 3 meses.
Los integrantes del Clan de los Yiyos fueron imputados por los delitos de blanqueo, pertenencia a organización criminal y tenencia ilícita de armas. Entre los condenados también estaban las parejas tanto de Londoño García como de M.L., quienes asumirán una pena de dos años de cárcel y unas multas de 500.000 euros y 200.000 euros, respectivamente.
Los demás implicados afrontaron una pena de tres años de cárcel y seis meses, junto con multas entre los 10.000 y 500.000 euros; sin embargo, a diferencia del cabecilla y del lugarteniente, los ocho condenados podrían eludir la prisión después de haberse comprometido a no delinquir nuevamente.
Ese acuerdo podría cambiar solo si la Sala dirigida por el magistrado David Cubero lo considera necesario. En ese sentido, si el juzgado identifica alguna circunstancia relevante, empezará a revisar los antecedentes de cada uno. De hecho, actualmente el tribunal está estudiando a uno de los procesados, Darlyn L.M., y determinará si es posible evitar el tiempo en prisión o deberá cumplirlo como Jaime Londoño García y Albert Mauricio M.L.
Los detalles de la investigación de la Fiscalía
Agencia EFE conoció el escrito del Ministerio Público de cara al juicio. Según el documento, los hechos ocurrieron “desde fecha no determinada, constando en todo caso actividades desde el año 2013 y realizadas sin solución de continuidad hasta octubre de 2020″.
Esa información fue respaldada por un informe de la Guardia Civil española en el que cuantificaron más de dos millones de euros por las actividades ilícitas. “Ocultaron e introdujeron en el tráfico y circuito legal mediante la operativa referida de compraventa y actuación como testaferros de vehículos y mediante incrementos no justificados y reintegros e imposiciones con dinero en efectivo o transferencias”, se lee en el documento.
La Fiscalía de España detalló que Jaime Londoño García ya había cumplido una pena en Estados Unidos por delitos similares. “Encabezó desde España, aunque con ramificaciones y actividades en aquel país y en otros terceros Estados, un entramado de medios y conjunto de personas” que estaban dedicadas a conseguir numerosos ingresos gracias al tráfico de drogas, la extorsión o el cobro violento de deudas, según la Agencia EFE.
A esas acciones se le suman las agresiones físicas y los asesinatos que realizó el grupo de sicarios. Para el ente acusador, el cabecilla “se valió de un conjunto de personas subordinadas —los otros procesados—, bien directamente bajo su cargo o bien indirectamente, a fin de recibir el dinero, custodiarlo y realizar pagos y transferencias a terceros”.
Con información de Agencia EFE.