John Poulos: las razones por las que asegura que no debería estar detenido tras el asesinato de Valentina Trespalacios

Desde su detención, la imputación de cargos de John Poulos, acusado por el feminicidio de Valentina Trespalacios, ha tenido demoras debido a varios aspectos que señala el detenido. Uno de ellos tiene que ver con que John Poulos habría solicitado un abogado que hable inglés para que lo representara, en lugar de un defensor público.

Durante la audiencia que se desarrolló el jueves 26 de enero y que duró más de cinco horas, la defensa y la Procuraduría señalaron los problemas de traducción que impedían que Poulos entendiera las informaciones y requerimientos que mencionaban las partes del caso.

Por su parte, Miguel del Río, defensor de víctimas mencionó: “El tema de la traducción reviste cierta complejidad, y lo advierto en aras de una solicitud de nulidad. La Corte establece que se puede establecer una nulidad si el procesado no entiende a cabalidad lo que dice el fiscal, el juez y la traductora”.

A las dificultades de traducción que han truncado el proceso, se suman otros aspectos que señala Poulos. Entre ellos que cuando fue detenido en Panamá, los policías apretaron al máximo las esposas, hecho que perjudicó la circulación de la sangre en sus manos hasta su llegada a Colombia y que tuvo que gritar para que las ajustaran.

También aseguró que le fue negado un abogado en Panamá y ante su solicitud de hablar con la Embajada de Estados Unidos solo tuvo una hora para hablar con un defensor. Así, el abogado de Poulos solicitó la nulidad de la captura afirmando que no hay claridad sobre los tiempos para legalizar la detención y que se le violaron sus derechos procesales.

Sin embargo, el juez 59 Penal Municipal con Función de Control de Garantías, señaló que: “Este despacho considera que se han cumplido con los presupuestos legales y constitucionales en relación con el procedimiento de captura en este caso”.

La suma de reclamos contiene, además, que en la detención se le incautaron una tablet, un computador, un teléfono, un disco duro, una memoria USB, dinero y un pasaje de avión, hecho que se sumó a los malos tratos que recibió constantemente por parte de las autoridades desde su llegada a Bogotá el 26 de enero, según comunicó su abogado.

También aseguró que teme por su integridad física por medio de su representante, quien calificó de “show mediático” la situación, debido a la cantidad de personas que lo esperaban tomándole fotos desde el encuentro para la imputación. Por esta razón, solicitó que se le garantice su seguridad en el caso, debido a la exposición de su identidad y posibles represalias si se le descubre inocente.

De acuerdo con la intervención del abogado, Poulos sufrió un ataque de pánico, hecho que ha afectado su salud, además mencionó que no cuenta con medicamentos que son de vital importancia.

Añadió que el acusado no ha podido ponerse en contacto con sus padres, quienes residen en Estados Unidos.

Por ahora, el abogado solicitó al juez de control de garantías de Bogotá que tome medidas que garanticen la seguridad del detenido en una celda aparte.

El hombre de 33 años, proveniente de Texas, fue señalado por cargos de feminicidio agravado y ocultamiento, alteración o destrucción de material probatorio. Poulos, quien sostenía una relación sentimental con la víctima, tiene en contra una gran cantidad de material probatorio que lo incrimina, como por ejemplo los vídeos de las cámaras de seguridad del edificio en el que rentó un apartamento para pasar allí el fin de semana y que se convertiría en el lugar del crimen.

El contenido del material, en especial del vídeo que lo incrimina directamente, revela el ingreso de John Poulos al edificio el jueves 19 de enero de 2023 y su salida 4 días después en un carro en el que llevaba una maleta, allí se supone que habría ocultado el cuerpo de la joven.

Frente al caso, Poulos dio una versión extraoficial en la que afirmó que a Valentina la asesinó el cartel de Medellín y que, debido a amenazas, huyó del país. Sin embargo, hasta el momento los indicios que tienen las autoridades señalan al hombre como el responsable.