Los “Bonos Sostenibles”, o también llamados “Bonos Verdes”, permiten recaudar recursos económicos que buscan financiar proyectos relacionados con la sostenibilidad ambiental y/o social. Esta estrategia será empleada por el Metro de Medellín, empresa que desde la pandemia entró en una crisis monetaria. La entidad espera solventar temas referentes a la eficiencia energética, adecuación de estaciones, entre otros.
El anuncio fue hecho por el gerente de la empresa, Tomás Elejalde, quien explicó que la decisión también servirá como mecanismo para acceder a créditos con mejores condiciones de tasas y plazos. Cabe resaltar que, desde septiembre del año 2022, la firma de riesgos Fitch ranqueó esta emisión con calificación AAA, lo que es un soporte para el negocio.
“Como una estrategia para garantizar la sostenibilidad financiera y luego de 2 años de desarrollo y ajustes de sus procesos internos y de gobierno corporativo, el Metro de Medellín logró culminar con éxito los trámites necesarios para, por primera vez en su historia, emitir bonos sostenibles por $350.000 millones (o su equivalente en UVR en la fecha de emisión). Esos recursos servirán para financiar importantes proyectos estratégicos que requiere la Empresa en el corto y mediano plazo” reveló la entidad.
Esto sería un salvavidas, pues la compañía tiene una grave afectación a sus finanzas. Con corte a 2022, se estimó que el Metro de Medellín tiene un déficit de 154 mil millones de pesos, deuda que en el último año se redujo con el pago de algunas acreencias, pero que sigue sin darle una solución total a los concesionarios y la empresa como tal. El margen se incrementó durante la pandemia, pues recordemos que la alcaldía de la capital antioqueña asumió el 100% de los costos, en medio de la contingencia sanitaria.
Metro de Medellín en búsqueda de recursos para salvar la compañía
Esta emisión de bonos le permite a la compañía mantener su estatus accionario, pues lo que buscaría ingresando al mercado de valores, es un préstamo, a cambio de unos intereses para el acreedor, sin que este privatice o se apropie la empresa.
“La emisión de bonos representa un gran hito para la Empresa pues la posiciona en los más altos estándares nacionales e internacionales de gestión y administración, permitiéndole acceder al mercado de valores donde se encuentran mayor cantidad de recursos con costos de financiación más bajos y plazos de pago más largos que en el mercado financiero tradicional. Esto se traduce en cuotas para pago de la deuda más convenientes y acordes al flujo de caja de la Empresa”, detalló Metro de Medellín.
Mas o menos serían 350 mil millones de pesos los que se buscan recaudar, los cuales se destinarían para la financiación de labores como: modernización de trenes de primera generación, la accesibilidad universal en las líneas A y B (cabe resaltar que estas terminales se instalaron hace casi 3 décadas, y en ese momento no se contemplaban mecanismos de ingreso inclusivos), e impulsar los desarrollos de eficiencia energética que contribuirían a reducir el consumo de recursos.
La empresa Metro también le había solicitado al Gobierno un aplazamiento en el pago de sus deudas, medida que solicitó por tercer año consecutivo, y que espera su aprobación por parte de la administración de Gustavo Petro.
Además, se adelantó una demanda contra la administración municipal, para que el distrito les desembolse los recursos correspondientes del Fondo de Estabilización de Tarifa:
“Las pretensiones que tiene el Metro frente a la Alcaldía es que se paguen 161.000 millones de pesos que se adeudan, que se entreguen los patios requeridos para la operación de las cuencas 3 y 6 y el pago de los intereses”.