Uno de los hechos que más ha dado de qué hablar de la visita del presidente Gustavo Petro a Argentina fue su reunión con la vicepresidenta de esa nación, Cristina Fernández de Kirchner. Aunque se desconocían detalles del encuentro, porque fue privado, recientemente se conocieron algunos pormenores de lo que hablaron los líderes izquierdistas.
Antes de que Petro llegara al despacho de la también dos veces presidenta de la nación sudamericana, esta publicó un video en su cuenta oficial de Twitter en el que se mostró emocionada por reunirse, por vez primera, con el mandatario colombiano y calificó su triunfo en el país cafetero como “histórico”.
“Realmente tengo muchas ganas de conocerlo, porque es un poco el producto, el resultado de la historia reciente de Colombia. Me gustó mucho su discurso de Naciones Unidas”, expresó la mano derecha del presidente argentino Alberto Fernández.
En la filmación, Kirchner aparece posando junto a una bandera colombiana y aseguró que siempre era “bueno” conocer a personajes de la tierra que parió al Nobel de Literatura Gabriel García Márquez. Luego de que Petro entró a la oficina vicepresidencial, la exmandataria argentina lo saludó con dos besos en cada mejilla y le dijo que era “un gusto conocerlo”.
Posteriormente, se sentaron en una mesa -cada uno en un extremo- y el presidente miró con asombro varios de los cuadros y decoraciones del despacho de la también viuda de Néstor Kirchner, presidente de Argentina entre 2003 y 2007.
Acto seguido, la exmandataria le describió varios de los protagonistas de las fotografías en sus paredes. Allí estaba su exmarido, el también astro fallecido del fútbol Diego Armando Maradona y otras personalidades de su país como Eva Perón, Juana Azurduy, Macacha Güemes, Martín Miguel de Güemes, Mariano Moreno y Juan José Castelli. Allí, Kirchner lanzó una frase bastante particular para referirse al espacio: “Es medio una kermés esto”, dijo.
La relación entre Petro y Kirchner es de vieja data, aunque no se conocían. De hecho, cuando el mandatario colombiano ganó las elecciones de su país, la vicepresidenta argentina fue de las primeras en pronunciarse. Es más, cuando la justicia de la nación sudamericana la condenó a a seis años de prisión por el delito de administración fraudulenta, en lo que ella cataloga como lawfare, Petro fue de los primeros en defenderla.
A través de una carta que Alberto Fernández difundió en su perfil de Twitter, se aseguró que los firmantes, jefes de Estado, rechazan el proceso judicial que enfrenta la vicepresidenta argentina por presunta corrupción.
“Dicha acusación tiene como objetivo apartar a Cristina Fernández de Kirchner de la vida pública, política y electoral, así como sepultar los valores e ideales que representa, con el objetivo final de implantar un modelo neoliberal”, expresa el comunicado difundido por redes sociales y que está firmado por Petro y otros presidentes latinos como Luis Arce de Bolivia y Andrés López Obrador de México.
En la misiva se aseguró que la jefa del kirchnerismo en Argentina enfrenta arremetimientos desde diferentes sectores en su país:
“El acoso a la vicepresidenta argentina se lleva a cabo a golpe de señalamiento de sus adversarios políticos, titulares periodísticos e irregularidades judiciales que vulneran el debido proceso y las garantías legales. En los últimos años el Poder Judicial ha abierto numerosas causas en su contra, muchas de las cuales han debido archivarse ante la ausencia de cualquier tipo de indicio sólido”, afirmaron los mandatarios.
Inclusive, aseguraron que los citados sectores buscan un solo fin: “eliminar a Fernández de Kirchner de la vida política” mediante lo que llamaron “malas prácticas procesales”. Es más, mencionan que las autoridades argentinas negaron que la vicepresidenta rindiera declaraciones para defenderse.
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