Desde que arrancaron los procesos de paz y se firmaron acuerdos, en Colombia se ha notado un decrecimiento en los casos de afectaciones por minas antipersona. A pesar del desescalamiento en el conflicto, o que los actuales grupos delincuenciales no empleen estos artefactos en sus arsenales, aun se presentan eventos de víctimas por estos dispositivos, bien sea porque son plantadas recientemente, o son de las que quedaron de incursiones anteriores. La ONU aseguró que el Gobierno nacional pedirá una extensión en el plazo para la erradicación de esto, que inicialmente se había pactado para el 2025.
Las cifras que maneja el Centro Nacional de Memoria Histórica dan cuenta que Colombia era uno de los países con más víctimas por minas antipersonales del mundo. Actualmente es el sexto, siendo los integrantes de la fuerza pública los que más resultan afectados. De hecho, aseguran que las guerrillas y grupos armados de la nación son los únicos del continente que emplearon estos artefactos dentro de sus actividades, considerándose una violación al Derecho Internacional Humanitario.
A pesar que se avanzan con los diálogos de la Paz Total, el jefe del Servicio de la ONU en Colombia contra las Minas Antipersona (UNMAS), Pablo Parra, asegura que el país no podrá cumplir con las fechas del plan de desminado, uno de los problemas es que actualmente no se sabe cuántos artefactos hay instalados, ni en qué puntos específicos se encuentran.
Lo más preocupante, según el funcionario, es que los cálculos de la ONU estiman que habrá más personas en riesgo de ser víctima de una mina antipersonal en el 2023, frente a las que había en los años pasados, al menos un 8%:
“Las minas antipersonales continúan siendo una amenaza. Hemos visto que en los últimos meses hay cada vez más grupos armados que están utilizando las minas antipersonales en el país, esto nos lleva a pensar que si bien estamos mucho mejor que hace algunos años, en comparación con el año pasado tenemos un indicador qué nos dice que podría haber un 8% de aumento en la población que está en riesgo a sufrir un accidente”, señaló Parra en W Radio.
Con este indicador sería claro que el Gobierno no podría erradicar del territorio estos artefactos. El balance que hace la ONU dice que en 122 municipios hay contaminación por estos dispositivos. Lo que quiere decir que al menos medio millón de colombianos está en riesgo de resultar herido por una mina.
En diálogo con la emisora anteriormente citada, el jefe de la UNMAS espera que el próximo año el Estado solicite una prórroga para el cumplimiento del plan de desminado:
“Habría que ver el año entrante más o menos cómo están los avances de la paz total, este año, pero más o menos tendría que presentarse una solicitud de prórroga a los plazos de la convención de Ottawa el año entrante antes de finalizar el 2024 para que esto sea aprobado en 2025″.
Desescalamiento de la violencia será fundamental para acabar con las minas antipersonal
A pesar que las extintas FARC-EP salieron de la ecuación como aportantes de minas, los grupos activos siguen sembrando explosivos, que en la gran mayoría de casos no son desactivados. Uno de los actores principales de esto sería el Ejército de Liberación Nacional, ELN, considera el senador de la Alianza Verde, Ariel Ávila, uno de los expertos en temas del conflicto armado.
Desde el Instituto de Estudios para el Desarrollo de la Paz (Indepaz), en el último año se redujo la cifra de violaciones al derecho internacional humanitario:
“En cuanto a indicadores de minas antipersona, muertes en combate, en secuestros, desaparición forzada y otros del derecho internacional humanitario, continúa una tendencia decreciente”.
Un año después de la firma de los Acuerdos de Paz entre el Estado colombiano y las FARC - EP, el Centro Nacional de Memoria Histórica reveló que hasta el 2017 se registraban 11.481 víctimas, siendo el periodo comprendido entre el 2002 y el 2010 el que más casos presentó:
“Desde 1990 y hasta el 31 de marzo de 2017 la DAICMA (Dirección para la Acción Integral Contra Minas Antipersonal) registró un total de 11.481 víctimas de MAP y REG, de las cuales 7.028 son de la Fuerza Pública y 4.453, civiles (...) El 98% de los atentados suceden en zonas rurales. No toda Colombia está minada. En 25 municipios se concentra aproximadamente el 50% de la afectación. Vista Hermosa (Meta) es el municipio más afectado por Minas Antipersonal en Colombia”.
Seguir leyendo: