Después de reunirse con Mauricio Macri en Olivos y hablar en un acto frente al Palacio San Martín, el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, a quien el Gobierno reconoce como presidente, mantuvo un encuentro con funcionarios y legisladores.
La cena, organizada por el canciller Jorge Faurie, contaron algunos de los participantes, fue "muy amena" y "emotiva", entre otras cuestiones porque Guaidó, acompañado por su esposa Fabiana Rosales, agradeció la ayuda argentina.
Al cruzarse con la diputada Cornelia Schmidt-Liermann, presidenta de la Comisión de Relaciones Internacionales, la reconoció y le dijo: "Ey, qué bueno verte de nuevo" ya que recordó que estuvieron juntos en Alemania. Ella le transmitió el resultado de una reunión previa en la que diputados argentinos charlaron sobre estrategias para colaborar más.
Otros de los que participaron fuero Felipe Miguel, jefe de gabinete de la Ciudad, y Fabián Perechodnick, secretario general de la provincia de Buenos Aires. "Muy movilizador y emocionante escuchar la lucha por la libertad y la democracia en primera persona", opinó el bonaerense.
La mayoría de los presentes reiteró el compromiso de la gestión macrista por ayudar "en lo que necesiten" para una salida pacífica, incluso en la distribución de ayuda humanitaria en la frontera venezolana.
Guaidó les expresó su preocupación por su regreso a Venezuela y sus temores aunque se mostró emocionado por la ayuda internacional.
¿De qué más hablaron? Dicen que de historia, de San Martín, de Bolívar entre otras cosas.