El audio se viralizó en Río Negro y Neuquén. Era la voz de una mujer contando lo que vio mientras esperaba para hacer un trámite el viernes 17 de agosto. De tan perfecto el relato no parecía real pero la información la confirmó el director de Licencias de Conducir de la municipalidad de Neuquén Capital, Mauro Espinosa: el ex secretario general de la Presidencia, hombre de máxima confianza de Cristina Kirchner, fue a renovar su registro de conducir en su provincia pero no se lo permitieron.
¿Qué pasó? El ex funcionario K, investigado en el marco de la causa de los cuadernos, tenía un domicilio en su carnet de conductor y otro distinto en su documento. La empleada de la delegación municipal de Alta Barda, en Neuquén, le explicó que deben coincidir. Pero además de no ser el mismo domicilio, ni siquiera corresponden a direcciones de la misma ciudad ya que la licencia de conducir había sido tramitada en una localidad vecina, Centenario, donde fue intendente Javier Bertoldi, ahora diputado provincial por la Unidad Ciudadana de Cristina Kirchner.
La cuestión es que, según informaron desde la municipalidad a Círculo Rojo, Parrilli no puede manejar hasta que cumpla con todos los trámites como si sacara por primera vez la licencia: ver un video instructivo, dar un examen, chequeo médico, etc, lo que le toma por lo menos un par de días si es que se queda en Neuquén para resolverlo.
El audio con voz de mujer terminaba contando que la gente que esperaba para hacer el trámite se rió frente a la situación pero que nadie insultó ni a Parrilli ni a la empleada y que el ex jefe de la Secretaría de Inteligencia se retiró sin discutir y aceptó la indicación de dirigirse a otra oficina para regularizar su situación.
Entonces, según el relato de esa testigo, una de las ocho personas que esperaban, varios felicitaron a la empleada, que hasta recibió algún aplauso.