Tras el acuerdo salarial que realizaron la semana pasada lo gremios aceiteros y la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA), entidad que preside Gustavo Idígoras, sigue siendo lenta la normalización de la carga de los buques con granos y subproductos en los puertos exportadores del país. “En general se está normalizando de a poco por los feriados. Hay todavía muchos barcos por cargar y llevará tiempo normalizar la actividad luego de 21 días sin carga”, comentaron desde el sector privado.
Pese a la protesta, el mes pasado la liquidación de divisas por las exportaciones por parte de las empresas agroindustriales aumentó casi un 5% intermensual, como consecuencia de los mayores precios internacionales. Según detalló CIARA y el Centro Exportador de Cereales durante el último fin de semana, el monto liquidado en el acumulado anual fue de 20.274,3 millones de dólares. Son unos 3.445,5 millones menos en relación a lo liquidado en 2019.
En la menor liquidación influyeron factores como medidas de fuerza de los sindicatos, las oscilaciones en los precios de los commodities, harinas, aceites y sus derivados industrializados causado por la pandemia mundial del Covid-19; la menor molienda de productos derivados de la soja; las dificultades operativas por la bajante del río Paraná; la aplicación de los estrictos protocolos sanitarios por el coronavirus en el proceso de exportación, y las demoras logísticas en el tránsito hacia los puertos y plantas procesadoras a comienzos del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio.
Pero la normalización de la actividad sigue siendo lenta porque además continúa la protesta de los recibidores de granos, con excepción de aquellos puertos a cargo de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Sitio 0 de Quequén, Molinos Cañuelas y ADM Argentina, donde hubo un acuerdo por los salarios de los trabajadores. Por otro lado, se extendió el paro del Centro de Jefes y Oficiales maquinistas navales, el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales de Pesca y Cabotaje Marítimo, el Sindicato de Conductores Navales y el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos.
En relación al paro de los recibidores de granos, que ya lleva casi 30 días de duración, hoy se está realizando una nueva reunión con los integrantes de la Cámara Privada de Puertos Comerciales (CPPC). “Esperamos en la reunión poder alcanzar un acuerdo que satisfaga las necesidades de los trabajadores y trabajadoras que pusieron el hombro durante toda la pandemia para garantizar el ingreso de divisas y el crecimiento económico del país”, manifestaron desde la Unión de Recibidores de Granos (Urgara) en un comunicado.
En lo que respecta a la segunda protesta, los integrantes de la Federación de Empresas Navieras Argentinas (FENA) aseguraron que presentaron “propuestas superadoras ratificando su voluntad de acordar una solución a este conflicto, ya que su mayor preocupación radica en el futuro de la actividad, la cual está reduciéndose a su más mínima expresión”.
“La mayoría de los gremios estaban en orden con la recomposición salarial ofrecida. Sin embargo llegado el momento de la firma del Acta, el Sindicato de Patrones decidió no suscribir el Acuerdo, porque consideran desde su perspectiva, que la situación actual trasciende la remuneración, sino que abarca un proceso de recategorización”, señalaron desde el sector privado, sobre la reunión con los representantes de los trabajadores.
Llamado para revertir la crisis
Es por eso que desde FENA realizaron un llamado a todos los actores del sector para revertir la crisis y buscar soluciones para el desarrollo de la actividad. Además, en un comunicado, aclararon que el cambio que pretenden los gremios “implica una equiparación salarial de los embarcados en el remolque respecto de aquellos que tripulan buques de transporte de carga fluvial y marítima. Teniendo en cuenta que son actividades diferentes (servicio de remolque de maniobra portuaria y servicio de transporte de cargas), se asume que cualquier modificación que se practique, instantáneamente será peticionada por la otra actividad. generando un sinfín de reclamos gremiales espiralados, de equiparación y diferenciación”.
Por otro lado, manifestaron que “la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) sujeta a aportes al Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) que perciben los trabajadores que se encuentran bajo relación de dependencia es de $ 64.756,23, según el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social a Octubre de 2020, donde un tripulante de remolcadores mínimamente percibe más del doble y, en algunos casos, hasta cinco veces más que el salario mencionado y además desde agosto de 2019 son ajustados por el Índice de Precios al Consumidor (INDEC)”.
“Las condiciones laborales de los tripulantes de remolcadores establecen que por cada día embarcado, generen 0,60 de franco. Y el pago cuando el tripulante está de franco y cuando permanece a la espera para embarcar es al 100 % del salario embarcado. Consecuencia de esto tienen el beneficio de trabajar seis meses y de percibir el salario el año completo. Y a diferencia de los tripulantes embarcados en buques de transporte de carga fluvial y marítima, quienes normalmente realizan travesías por períodos mayores a treinta días, los trabajadores de remolcadores permanecen en los buques 12 hs y luego van a sus domicilios”, aclararon desde FENA.
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