Los dirigentes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) se mostraron a favor de la decisión del gobierno de eliminar las retenciones a diferentes productos agroindustriales, pero reiteraron el reclamo de extender el beneficio a todas las producciones regionales.
Hay que recordar que la semana pasada, el Gobierno implementó el Decreto 1060/20, mediante el cual se modificaron más de 4.500 posiciones arancelarias. “Si bien en algunos productos se bajaron los derechos de exportación, en otros el impuesto registró un aumento, poniendo en jaque la rentabilidad de la producción primaria en los diferentes complejos”, dijeron desde Came.
Sobre la medida oficial, el Director Ejecutivo de la entidad, Pablo Vernengo, dijo: “No entendemos el criterio que se adoptó para bajar las retenciones en unos productos y subirlas en otros”. Todo esto en alusión, por ejemplo, a la eliminación de la alícuota en el caso del jugo de manzana y, al mismo tiempo, una suba al 4,5% para el jugo de pera. Lo mismo sucede con la eliminación de las retenciones a las exportaciones de semilla de arroz y el mantener las mismas al arroz elaborado.
Los integrantes de CAME advirtieron que en la actualidad la rentabilidad de los productores atraviesa momentos muy complejos por el impacto de la elevada carga impositiva y la suba de costos. De acuerdo a los datos aportados por la entidad, el precio de los combustibles se incrementó un 15% entre agosto y diciembre del año pasado, los insumos subieron por encima de la inflación, y la brecha cambiaria, en torno al 90%, afecta el desarrollo productivo de mediano y largo plazo.
“Para que las economías regionales puedan desplegar todo su potencial, generando divisas y empleo genuino en el interior del país, es imprescindible que el Gobierno nacional tome la decisión de eliminar las retenciones a las exportaciones”, comentó Pablo Vernengo.
Y agregó: “Los productores necesitan rentabilidad para poder dar un salto cualitativo y transformar materias primas en productos finales. Para esto es imprescindible reducir la carga impositiva y eliminar los costos de intermediación que encarecen los precios de los alimentos tanto en el mercado doméstico como el externo”.
Por otro lado, aseguró que “las economías regionales necesitan un enfoque integral adaptado a la realidad de cada complejo. Hay producciones que deben afrontar mayores costos (logísticos, salariales, producción y protocolos COVID-19) y las retenciones sólo sirven para quitarle incentivos a los productores”.
Informe
Mediante un trabajo realizado por la Confederación, denominado el Monitor de Exportaciones de Economías Regionales, se determinó que las producciones regionales tienen un potencial para poder duplicar en el mediano y largo plazo el valor de sus exportaciones, pasando de los actuales 7.200 millones de dólares por año a más de 14.000 millones de dólares.
De acuerdo a la información proporcionada por la entidad, entre los diversos complejos productivos que se destacan por tener un gran potencial de crecimiento en exportaciones se encuentran, entre otros, legumbres, cítricos, olivícola, apícola, maní, arroz, peras, manzanas, uvas, lácteos, yerba, carnes, madera y vinos.
“Aumentar las exportaciones es importante para el país ya que posibilita el ingreso de divisas, inyectando dinamismos en todos los actores de la cadena de valor, haciendo crecer el empleo genuino y el poder adquisitivo de los trabajadores”, sostuvo Pablo Vernengo.
El Director Ejecutivo de Came, también señaló: “Una de las mayores tendencias mundiales del consumidor es la demanda de productos listos para consumir. Pero agregar valor en origen a la producción primaria supone el desafío de tener una mirada integradora y un rol protagónico por parte del Estado”.
Seguí leyendo: