A pesar que la producción agropecuaria se encuentra exceptuada de la cuarentena obligatoria para prevenir el coronavirus, se atraviesan momentos complicados por las restricciones a la circulación del transporte de cargas y también por los problemas que aparecieron en los puertos cerealeros. Una grave situación en pleno desarrollo de la cosecha gruesa, pero que por otro lado afecta al abastecimiento de alimentos.
Matías Lestani, asesor de Confederaciones Rurales Argentinas, precisó que a toda esta problemática en el transporte de cargas y los puertos, se suma “la incertidumbre reinante y la falta de confianza en los medios de pago tradicionales frente a una situación muy complicada, lo que provoca que los productores en plena cosecha envíen a acopios o a bolsa la mayor parte de la misma. En el resto de las producciones se tiende a ralentizar hasta que se aclare el panorama. Todo esto impacta en la economía, pero principalmente en la cadena de pagos”.
En relación a los problemas en la cadena de pagos, Lestani dijo: “Es un hecho que por lo menos en lo que hace al mercado interno, hoy la cadena de pagos se encuentra frenándose, sumado a las medidas tomadas por el Banco Central. Es factible que a la salida de la cuarentena sanitaria nos encontremos con un festival de cheques sin fondos muchos provocados ciertamente por la situación y otros por los oportunistas de siempre. Este será el primer síntoma rápido de la situación: en economía nada es asintomático”.
Sobre la situación en el transporte de cargas, Valeria Pardo, de la Federación de Transportadores Argentinos, aseguró en diálogo con este medio: “El panorama es complicado. Se están prohibiendo los viajes a puertos, y si en algún caso los permiten, el transportista debe hacer una cuarentena de 14 días al regreso de los viajes, y se transforma en una circunstancia que frena el flujo de trabajo. En otras localidades, en cambio, se llegó a un acuerdo para acopiar y evitar viajes al puerto”.
Esta situación, como informó este medio el viernes pasado, provocó un descenso de casi un 40% en el ingreso de camiones en todos los puertos cerealeros de la Argentina. Al respecto, Pardo dijo, “hay transportistas que deciden no viajar, y se entiende, ya que tienen un modo de vida sedentario y están en riesgo. El 20 por ciento supera los 60 años y hay diabéticos y obesos entre ellos. Pero también sufren padecimientos en las rutas, porque no permiten el ingreso de ellos a las estaciones de servicio para asearse, no los autorizan a bajar del camión. Es por eso que pedimos a los intendentes que generen las condiciones para que se pueda trabajar”.
En aquellos casos donde los camioneros deciden trabajar durante la cuarentena obligatoria y preventiva, “les estamos brindando todas las condiciones que son necesarias en materia de higiene y salubridad. Es una situación muy triste el hecho de que no puedan entrar a los pueblos para abastecer: es la sociedad contra la sociedad”.
Los puertos
El viernes pasado el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos y el Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo en su conjunto, anunciaron que a raíz de la propagación del coronavirus, “no se tomarán cabos ni se realizarán ingresos en ningún puerto del país, a todo buque que no haya cumplido con la cuarentena de 14 días desde el ultimo puerto de zarpada, ya sea en navegación o fondeados y proveniente del exterior”. Ayer el ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por 15 días.
Según explicaron desde los gremios, “esta decisión tenía como propósito colaborar con las medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo Nacional en la lucha contra la pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud. Entendiendo que, como primer eslabón en esta lucha se encuentran los trabajadores expuestos a trabajos esenciales, este es el caso de nuestros representados a los cuales debemos generarles todas las garantías posibles en salvaguarda de su salud, lo que redundará en la salud pública en general”.
Además, se aclaró que todos aquellos buques que transportaban mercaderías y/o combustibles y/o todo tipo de insumos hacia los puertos nacionales, que son necesarios para garantizar las respuestas a la actual crisis sanitaria, como así también al normal funcionamiento de las ciudades, industrias alimenticias, medicas, farmacéuticas, de la comunicación, etc., iban a ser atendidos, aun cuando no hayan cumplido el periodo de cuarentena determinado. Y en ese caso los trabajadores tenían que extremar todos los medios de prevención y protección.
En diálogo con Infobae, el Capitán Mariano Moreno, Secretario adjunto del Centro de Patrones, Oficiales Fluviales y de Pesca, señaló que la situación en los puertos es “preocupante para los trabajadores que están en la trinchera, pero en la vorágine para no paralizar la economía, apostamos a un funcionamiento lo más normal posible”.
La situación de los productores agropecuarios
Es complicado el escenario en Tucumán. Martín Vargas, Integrante de la Mesa Directiva de la Sociedad Rural de la provincia, habló con Infobae sobre la imposibilidad que tienen los productores y transportistas para poder llegar a lugares de Santiago del Estero, Catamarca y Salta, porque los caminos están cortados.
“La situación es angustiante y la posición de los intendentes que obstaculizan el acceso resulta terca y caprichosa, con posturas inflexibles y sin diálogo. En octubre, Tucumán tiene que abastecer de papa a todo el país. Al no poder sacar la semilla, no es posible sembrar”, dijo el productor tucumano.
Y adelantó: “La decisión de ir a la Justicia, como hicieron los productores paperos, está tomada. Veremos dónde y cuándo haremos la presentación. El agro cumple un rol fundamental para que la economía siga funcionando cuando el país está parado”.
Por otro lado, desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) alertaron sobre los problemas que afectan la tarea diaria de pequeños productores de frutas, verduras y cereales. Esto está sucediendo en Buenos Aires, Mendoza, Salta, Formosa, entre otras provincias. Los principales problemas son:
- Imposibilidad de conseguir insumos, por cierre de locales o por falta de stock (bolsas, cajas)
- Dificultad para encontrar transportes, algunos de ellos argumentan no tener cargas para volver,
- Dificultades para encontrar personal para la cosecha y el traslado a los campos,
- Cortes de ruta en distintos municipios y provincias que dificultan el traslado.
- En caso de conseguir transportes, los precios se duplican.
- Proveedores que suspenden las entregas.
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