La Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén realizó en las últimas horas una Asamblea en la Cámara de Productores Agrícolas de
Regina, donde se analizó la difícil situación por la que atraviesa el sector.
En la reunión se decidió realizar un 'Frutazo' en los próximos días en la
Capital Federal, donde los productores regalarán frutas a modo de protesta y para concientizar a la ciudadanía sobre el momento complicado de la fruticultura. En esta oportunidad, a diferencia de la movilización realizada en 2016, convocarán a otras economías regionales para que también participen con sus reclamos.
La movilización aún no tiene fecha, pero sería el mes que viene y se realizaría en Plaza de Mayo al igual que en 2016
Además, en la reunión de productores se decidió mantener encuentros con los gobernadores de Neuquén y Río Negro, diputados, senadores, intendentes y legisladores provinciales, a quienes se les solicitará que se pronuncien sobre la realidad de la producción de frutas del Alto Valle.
Además, el último informe elaborado por Coninagro sobre la situación de las economías regionales refleja que la mayoría de estas economías "atraviesan un momento complicado", por los efectos de una situación económica con baja en el consumo que termina impactando en la producción, además de altos costos, presión impositiva y el productor percibiendo un precio muy bajo por la mercadería que comercializa.
Distorsiones en la cadena de comercialización
Los productores denuncian que el Estado nacional recauda un 45% desde que el productor comienza con los trabajos necesarios para la cosecha hasta que se vende al consumidor, mientras que el productor solo recibe el 7%.
Frente a esta situación, los productores responsabilizan al Estado “de la situación de quebranto en la que nos encontramos”, manifestaron desde la Federación
El área de economías regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) reflejó que durante febrero de este año los consumidores pagaron 5,23 veces más de lo que cobró el productor por sus productos, y con una participación del productor en el precio final de los alimentos que alcanzó en promedio el 22,3%.
Entre los productos donde se generaron mayores distorsiones en la cadena de comercialización aparecen las peras y manzanas. En el caso de la pera, el productor cobró $7 por kilo, mientras que el consumidor abonó $46,80. Y en el caso de la manzana, mientras el productor cobró $9,40 por kilo, el consumidor pagó $69,20.
Los productores agrupados en CAME se mostraron preocupados por la falta de transparencia existente en los mercados, con brechas de precios entre
productores y consumidores que superan el 1.000% en varios alimentos. "Con políticas y medidas eficaces hay que evitar los abusos de posición dominante en la cadena de comercialización para proteger al eslabón más débil que siempre es el productor", reclamaron los dirigentes de economías regionales de la entidad.
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