Un informe preliminar de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) refleja que las inundaciones en el norte de Santa Fe dejarían pérdidas en cultivos por 237,7 millones de dólares.
Los Departamentos evaluados fueron 9 de Julio, Vera, San Javier y General Obligado, y los cultivos que se tuvieron en cuenta para realizar la proyección son soja, maíz, sorgo, girasol y algodón.
En el análisis, realizado al 17 de enero pasado, se han computado las pérdidas de ingresos brutos por no sembrar determinados cultivos, además lo que no se pudo cosechar y la caída de rendimientos.
El informe aclara que no se sumaron las pérdidas que se presentarán por una menor calidad al momento de comercializar la producción y los costos adicionales para realizar la resiembra de algunos cultivos.
Los especialistas de la Bolsa comentaron que además habrá que tener en cuenta "los temores de los productores ante un evento climático como el actual, donde muchos si no tienen cierta certidumbre del clima futuro posiblemente no arriesguen a nuevas siembras o resiembras. Esto podría aumentar la estimación de pérdidas".
A todo esto hay que agregar que debido a las altas tasas de financiamiento, las pérdidas de capital de trabajo de los productores serán muy grave y seguramente va a desalentar las futuras siembras e inversiones.
Maíz
Las proyecciones de siembra eran de 218.500 hectáreas del cereal. Hasta el 10 de enero la siembra alcanzó 68.000 hectáreas, y el resto habría tiempo hasta los primeros días del próximo mes para sembrar y todo va a depender del estado de los lotes. Las estimaciones de la bolsa rosarina indican que el 70% de esa área no será sembrada, lo cual provocaría una pérdida de ingresos brutos para los productores de aproximadamente 87,7 millones de dólares.
Por otro lado, se perdería el 20% de las 68.000 hectáreas sembradas hasta el 10 de enero. Se proyecta un rendimiento de 58 quintales por hectárea, y lo que derivaría en una pérdida para el productor de 11,3 millones de dólares. Además. El 80% de las 68.000 hectáreas sembradas registrarían una pérdida de rendimiento de 7 quintales por hectárea y esto se transformará en una pérdida para el sector de la producción de 5,4 millones de dólares.
Sumado todo esto, las pérdidas en maíz llegarían a 104,4 millones de dólares.
Soja de primera
La oleaginosa de primera tenía una intención de siembra de 148.700 hectáreas. De esa cifra, el 42% ya se sembró antes de diciembre pasado y otro 44% se sembró entre el 6 de diciembre y el 10 de enero de este año. Las siembras realizadas a comienzo de diciembre tendrán mejores rendimientos, que se proyectan en 24 quintales por hectárea, pero igualmente habrá que tener en cuenta la evolución de las condiciones climáticas.
Aquellas siembras que se realizaron entre el 6 de diciembre y el 10 de enero son las más complicadas, donde se podría perder el 50% del área, de acuerdo a la información que proporcionaron los productores a los técnicos de la BCR. Los lotes que podrían cosecharse obtendrían rendimientos promedio de 20 quintales por hectárea. Y si el tiempo lo permite la resiembra llegaría a 25.300 hectáreas con un rinde promedio de 17 quintales por hectárea.
Las proyecciones de la Bolsa de Rosario son de 258.000 toneladas de soja de primera que podría aportar el norte de Santa Fe, cuando las proyecciones en los inicios de la siembra eran de 477.000 toneladas. En consecuencia las pérdidas de soja de primera llegarían a 219.000 toneladas, lo que significaría una pérdida para el productor de 52.300.000 dólares.
Soja de segunda
La intención de siembra alcanzaba las 105.000 hectáreas, de las cuales el 50% se sembró entre el 13 de diciembre de 2018 y el 10 de enero de este año. Hay proyecciones de pérdidas por inundaciones de 26.200 hectáreas, y el área que podría hacer frente al fenómeno climático obtendría rendimientos de 18 quintales por hectárea, muy por debajo de lo esperado por los productores. Hay estimaciones que unas 39.000 hectáreas se podrían sumar como resiembra o nueva área, lo que podría moderar las pérdidas. "Es un escenario muy difícil de concreción e imposible en ciertas zonas", advirtieron desde la BCR y agregaron que se podrían perder 200.000 toneladas de soja de segunda en relación a lo que se proyectaba en la previa de la campaña, y las pérdidas al productor llegarían a 47.700.000 de dólares.
Girasol
Las estimaciones presentadas en el informe de la bolsa de Rosario, muestran que la siembra alcanzó 139.000 hectáreas, de las cuales se cosecharon hasta el pasado 17 de enero 63.000 hectáreas y habría unas 76.000 hectáreas afectadas por las inundaciones. Se estima una pérdida de rendimientos de 5 quintales por hectárea y el final de la campaña significaría una cosecha total de 155.000 toneladas. Si la campaña hubiera transitado sin problemas climáticos la producción total sería de 234.000 toneladas. Esas 79.000 toneladas menos de cosecha, representarían pérdidas para el productor de 17.400.000 de dólares.
Algodón
Hasta el pasado 10 de enero había entre 6.000 y 10.000 hectáreas de algodón muy comprometidas, con afectación de diferente grado, y con riesgo de perderse.
Los cálculos de la BCR, reflejan que las pérdidas totales alcanzarían las 11.000 hectáreas, transformándose en 5.900.000 de dólares de pérdida para el productor.
Sorgo
De una proyección de siembra de 60.000 hectáreas, hasta el 10 de enero pasado se sembraron 36.750 hectáreas. Hay tiempo para sembrar el sorgo de segunda, con lo cual podrían cosecharse 40.200 hectáreas en toda la campaña. Se perderían 28.000 toneladas de sorgo y para el productor significarán pérdidas de 3 millones de dólares.
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