Arranca la Semana de Mayo. En los oídos de los productores todavía resuena la arenga de la Diputada Nacional, Elisa Carrió, quien a viva voz, en las redes sociales y en la televisión, salía a reclamarle al sector: "Nosotros acompañamos al campo en los momentos difíciles, bajamos las retenciones, la sociedad acompañó… ahora les digo a ellos: No retengan la soja, empiecen a liquidar para que ingresen divisas. ¡Hagan patria!".
Desde el Centro de Exportadores de Cereales (CEC) y la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA), su titular Gustavo Idígoras, salió a aclarar que "es importante entender que en la Argentina el ingreso de divisas por exportaciones es bastante peculiar y diferente a otras actividades, porque la liquidación no se hace al momento de la venta de los granos. Se hace en el momento de la compra de la cosecha, porque termina siendo el exportador el que financia el cierre de la campaña".
En diálogo con Infobae, Idígoras explicó esto situación se dar porque "en el país no hay un mecanismo financiero viable que esté interesado en el agro. En el momento de compromiso de compra es cuando se ingresan los dólares del exterior. Se ingresan con mucha anticipación al momento de la exportación", señaló.
Desde CIARA-CEC aclararon que la anticipación ronda los 30 días en el caso de la exportación de granos y puede alcanzar los 90 días en el caso de la exportación de aceites y harinas proteicas. Esa anticipación depende también del momento de la campaña y del grano de que se trate.
Liquidación en baja
Según informó el tándem que representa al complejo oleaginoso-cerealero, el primer cuatrimestre del año cerró con algo más que USD 6.057 millones de liquidación de exportaciones, un (-8,8%) menos que el mismo período de 2017, que acumuló unos USD 6.644,5 M.
En tanto, de enero a abril del año pasado el ingreso de dólares había bajado un (-7,4%) respecto al mismo lapso de 2016 cuando se habían liquidado USD 8.048,3 M. Esta cifra fue notablemente superior al primer cuatrimestre de 2015 (el último año de gobierno de Cristina Fernández) cuando la cifra de divisas ingresadas por exportación de granos y aceites había sido de USD 5.633 M.
Esa suba del 42,9% entre la liquidación de enero-abril de 2015 y el inicio de la gestión de Mauricio Macri como Presidente, demostró que el sector agroindustrial respondió a varias señales: por un lado, la quita de retenciones a la exportación; el levantamiento del cepo cambiario; una devaluación en torno al 40% que llevó la cotización del dólar de $ 10 a $ 14 por cada billete estadounidense.
Algo similar sucede con la comparación del acumulado anual, siendo que en 2015 se liquidaron USD 19.963,4 M de enero a diciembre; en 2016 el ingreso de divisas aumentó 19,8% hasta los USD 23.910,4 M; mientras que el acumulado del año pasado cayó (-10,5%) alcanzando los USD 21.399 M. ¿Qué pasará este 2018 siendo que arrancó con una baja de casi 9 puntos porcentuales en relación al año anterior?
Perspectivas
Para Idígoras, "la diferencia con respecto a años anteriores se da, en primer lugar, por las consecuencias de la sequía que dejó unas 20 millones de toneladas menos para comercializar. Y en segundo lugar las fuertes lluvias que se vienen presentando desde principios de abril que retrasaron la cosecha, la entrega, la logística y generaron condiciones de merma de calidad", asegura.
El ejecutivo de CIARA-CEC se mostró entusiasta. “Al momento de proyectar el año, hay que sumar el trigo con niveles de exportación similares, y quizás superiores a campañas pasadas”
Al consultar sobre el esquema gradual de reducción del 0,5% mensual a las retenciones a la soja que comenzó a aplicarse el 1º de enero y que se extenderá hasta diciembre de 2019, Idígoras consideró que "no se observa que se haya provocado un efecto de retraso en la decisión de venta por parte de los productores. Por un lado porque la sequía les generó un problema para financiar su capital de trabajo para seguir sembrando".
En este sentido recordó: "Hay que tener en cuenta que la Argentina tiene unos 100.000 productores activos en la agricultura extensiva que cada año requieren unos USD 10.000 millones de capital de trabajo, donde hoy la exportación y las empresas de insumos le prestan más del 60% de ese total, porque todavía hoy el sistema bancario argentino no tiene ni el volumen ni la calidad para prestárselo".
Se descarrió
"En nuestro país se considera al agro como un sector altamente rentable pero poco partícipe de la sociedad; y los políticos son parte de esta sociedad y toman esta visión de cuestionamiento porque pareciera que el sector no es el que genera la riqueza suficiente para la Argentina", aseguró Idígoras, quien puso blanco sobre negro: "La generación de la riqueza y la posibilidad de crecimiento de la Argentina está basada en el agro".
"La especulación es absolutamente ajena al agro", sostuvo. "La especulación tiene orígenes financieros porque somos una economía emergente que tiene muchos problemas para captar financiamiento internacional. Por eso, los capitales que llegan a la Argentina para realizar algún tipo de inversión financiera son muy volátiles, y el resultado de esta situación desembocó en la crisis de las últimas semanas", explicó el hombre de CIARA-CEC.
La entidad que representa al complejo cerealero-oleaginoso asegura que el sector "coloca a la Argentina como el sexto exportador de alimentos del mundo, según la Organización Mundial del Comercio (OMC)". Además, "participó en 2017 con el 44,8% del total de las exportaciones del país. Considerado por el INDEC como el sector exportador más relevante, el complejo oleaginoso aportó en 2017 el 31,7 % (USD 18.500 M) del total vendido al exterior". Algunos motivos para incentivar, más que para reclamar.