Finalmente, el mercado de hacienda de Liniers se trasladaría a Ezeiza

El intendente del municipio ofreció un lugar de 150 hectáreas, cercano al predio de la AFA. De esta manera no se efectuaría el traspaso a La Matanza como se había anunciado meses atrás

El Mercado de Hacienda de Liniers se trasladaría al municipio de Ezeiza. Su intendente ofreció un espacio de 150 hectáreas

El mercado concentrador de hacienda vacuna de Liniers podría trasladarse a un predio de 150 hectáreas ubicado en el municipio de Ezeiza, según confirmaron a Infobae fuentes del sector cárnico.

Alfonso Monasterio, consignatario de la firma Monasterio Tattersal, en diálogo con este medio informó que el predio fue propuesto el intendente Alejandro Granados luego de que quedara descartada la posibilidad de mudar el mercado al partido de La Matanza, donde se presentaron recursos de amparos ante la Justicia para frenar la iniciativa.

"La Matanza quedó trunco y nos dimos cuenta que a esos terrenos no se podía mover el mercado ganadero. Luego apareció Ezeiza, donde su intendente nos manifestó que era posible ceder unos terrenos, unas 150 hectáreas, cercanas al predio de AFA", explicó Monasterio.

El tema deberá ser debatido durante los próximos días por los consignatarios, ya que también se deberían encarar aquí análisis de los suelos y tratamiento de los efluentes, algo que debería ser definido el próximo martes durante un encuentro programado en Liniers por parte del sector privado.

El traslado del Mercado de Liniers fue planteado por el propio presidente Mauricio Macri en la sexta y última reunión de la Mesa de las Carnes, que tuvo lugar en la Casa Rosada, donde asistieron funcionarios, ruralistas, consignatarios y exportadores, entre otros.

Al respecto, Víctor Tonelli, coordinador de la Mesa de las Carnes, quien también asistió al encuentro con el Jefe de Estado, consideró: "Hay grandes chances de instalar un nuevo mercado concentrador de ganado en Ezeiza".

Todos en el mercado cárnico, especialmente los consignatarios que operan en los corrales de Liniers, están de acuerdo en dejar el predio donde ya el 21 de marzo de 1900 fue faenado el primer  vacuno y se formalizó el comienzo de la actividad ganadera

Proyecto

Si bien urge dejar estos terrenos para que sean así utilizados por la Ciudad de Buenos Aires, tal cual fue convenido con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, desde el Mercado de Liniers se reconoce que la construcción de un nuevo predio demoraría cerca de dos años y medio, cuya ubicación debería definirse antes de fin de año.

De acuerdo a lo expresado por Alfonso Monasterio, si bien fue dado de baja la posibilidad de una instalación en La Matanza y cobra fuerza la opción de Ezeiza, también surge otra alternativa: para que no suceda lo que ocurrió con los planes ya cancelados de trasladar el mercado a San Vicente, surge la necesidad del sector de analizar su reubicación a una distancia de unos 50 kilómetros de Buenos Aires.

De acuerdo a lo expresado por Monasterio, desde el municipio de Ezeiza propusieron desarrollar un polo agroindustrial para utilizar las reservas de biogás con el estiércol de los animales y promover así un "Mercado Verde": "Estamos frente a un proyecto privado y sobre el cual se han mantenido reuniones con funcionarios nacionales", dijo el consignatario.

La idea original del Mercado de Liniers era concretar su traslado definitivo a unos campos originalmente adquiridos en el partido de San Vicente. Sin embargo, la demora en el traslado hizo que los campos elegidos se vieran rodeados por una creciente urbanización que ahora impide la instalación del ente concentrador.

El mercado ganadero –por el que pasan cerca de unos 27 mil vacunos por semana- ocupa casi 32 hectáreas en el barrio porteño de Mataderos y allí la concesión del predio para la actividad que desempeña desde 1884 caducó en el 2001, año desde el cual el traslado de estas instalaciones de compra-venta de hacienda en pie resulta una asignatura pendiente para la Ciudad de Buenos Aires.

Los motivos que siempre expresó el gobierno de la Ciudad fueron cuestiones de salud y de contaminación de los afluentes que desembocan en el Riachuelo.