Las compañías de seguros, su servicio y el costo para las pólizas de automotores, vuelven a ser un tema de polémica una vez más. El próximo 24 de julio era la fecha límite a partir de la cual las compañías de seguros tenían pensado dejar de ofrecer el servicio de grúa por desperfectos mecánicos. La resolución de la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) había sido publicada en el Boletín oficial con fecha del 24 de abril, dándoles hasta 90 días de plazo para adecuar el servicio a la nueva condición.
Sin embargo, un rechazo generalizado de los usuarios y algunas acciones judiciales conjuntas de consumidores, consiguieron que el gobierno dejara todo sin efecto y dejara el servicio como uno de los posibles que las compañías pueden ofrecer a sus clientes.
“Yo sigo pensando lo mismo que dije en aquella oportunidad. Salvo algunas excepciones, los prestadores de servicios de grúa sólo piensan en ganar dinero, generando un costo altísimo para las aseguradoras. Nosotros, por ejemplo, no vamos a seguir dándolo como antes, será para una parte de nuestra cartera y en otras condiciones, porque hoy más que nunca una compañía de seguros se sostiene por su rendimiento técnico y hay que estar muy finos con los costos”, dijo Gabriel Bussola, Presidente de Libra Seguros a Infobae.
El de las grúas no es un tema cerrado. Mientras algunas aseguradoras están tomando la decisión de cobrar aparte el servicio cuando no es por un siniestro como los que cubren las pólizas, otros volvieron al esquema anterior y siguen brindando esa asistencia con las demoras habituales.
Las empresas de acarreo, mientras tanto, están intentando cambiar las condiciones de contratación porque el servicio que ofrecen tiene un costo más alto de la suma que perciben de las aseguradoras. “Lamentablemente seguimos igual que antes. Estamos trabajando en algunos cambios, alguna reformulación del servicio, fundamentalmente para que haya menos quejas. Habría que separar entre resolver el traslado del auto y de las personas que lo ocupan. No es lo mismo trasladar un auto descompuesto en medio de la ruta que ocuparse de solucionar el problema a los ocupantes. Es un tema largo y profundo que se debe resolver para que el servicio sea mejor para las personas afectadas”, se defendieron desde una empresa de acarreos y servicios mecánicos.
Sin embargo, lo que está sucediendo en la calle, es que los seguros siguen aumentando, incluso más que los autos, algo que ha llamado la atención porque hoy, intentando recuperar las ventas, las terminales automotrices están hace al menos tres meses aplicando actualizaciones mínimas de los precios de los 0 km, lo que ha hecho que muchos modelos tengan el mismo valor y otros aumenten entre un 3% y un 5% de un mes a otro.
Estos aumentos no son generales, pero si mayoritario. En algunas compañías las pólizas han aumentado más de un 100% en lo que va del año, y pagar un seguro contra terceros completo, puede tener un costo que varía desde los 60.000 a los 80.000 pesos por mes para un auto usado de pocos años de segmento medio. El mismo seguro, con cobertura de Todo Riesgo, tiene un valor que va desde los 160.000 a los 190.000 pesos por mes según la aseguradora.
“Hay algo que está sucediendo cada vez más y que yo he tomado como un tema personal para mover en la justicia que es el fraude. Para ejemplificarlo y que las personas lo entiendan bien, el “autorobo” de una rueda de un auto es uno de esos casos, o el sobreprecio de un repuesto. Va a parecer increíble, pero un 47% de los siniestros que se denuncian a las compañías, tienen características compatibles con un fraude. Para muchos es ‘una viveza criolla’, pero es un delito, y hay que modificar las penas para las defraudaciones en la industria del seguro para que nos proteja de eso. Y en esta época, lamentablemente, se han incrementado muchísimo, afectando el resultado de las empresas”, dijo Bussola.
Más allá del fraude, Bussola hizo hincapié también en cómo cambió el mercado del seguro. “Antes tenías un resultado financiero que sostenía parte de un resultado técnico que podía no ser completamente superavitario. Ahora eso ya no ocurre. Las aseguradoras tenemos que cuidar el dinero que entra por las pólizas y no podemos invertirlo en cualquier herramienta financiera porque no podemos arriesgarlo. Es dinero de terceros que custodiamos de algún modo. Entonces eso nos obliga a revisar cada inversión. Si una compañía de seguros pierde plata, termina dando una mala cobertura de siniestros”, explicó el empresario.
En esa matriz de costos que generan el rendimiento de un servicio de seguros, está por supuesto la inflación y el valor del dólar, y esto parece ser el otro motivo por el que se están incrementando las pólizas de seguro automotor.
“Los autos no aumentaron pero los repuestos sí, y esos se mueven con el dólar como siempre. Entonces los costos de reparaciones y siniestros sí aumentaron todo este tiempo, especialmente el último mes y medio, cuando el dólar paralelo se volvió a mover para arriba. Los repuestos subieron hasta un 150% este año. Y además está el aumento de las indemnizaciones judiciales. Todo ha subido”, argumentaron desde la otra compañía de seguros.
Lo que está sucediendo con los consumidores es que empiezan a migrar en busca de mejores ofertas. Hay muchas compañías en el mercado, casi 200, pero no todas tienen el respaldo que requiere un seguro, donde no sólo está en riesgo un automóvil sino personas, que eventualmente pueden resultar lesionadas en un siniestro vial.
“Pero ese es un juego peligroso. La gente tiene que saber que el seguro lo debe cubrir ante un siniestro. Bajar la calidad de una compañía, puede significar que ante un problema no exista la respuesta. Y si no hay respuesta de una aseguradora, el problema será un conflicto en la justicia civil para el propietario del vehículo”, advirtieron fuentes del sector.
Así, lo que está sucediendo con mucha frecuencia es que se generen cambios de cobertura dentro de la misma compañía aseguradora. Quiénes tienen seguros contra Todo Riesgo con franquicias, buscan que la franquicia sea más alta para bajar la cuota, asumiendo el riesgo de tener que pagar más dinero en caso de un accidente. Otros, directamente bajan ese plan y se pasan a un seguro contra Terceros Completo.