Cuando en mayo de este año Infobae contó la historia de los autos que tiene en su garage personal el exfutbolista profesional Pedro Massacessi en Orlando, además de ver su Ferrari F8 Spider, su Lamborghini Huracán y su Porsche 911 Carrera, la gran novedad era que antes de fin de año recibiría uno de los modelos más codiciados de Ferrari en la actualidad: el SF90 Stradale.
Este modelo es el primero de la casa de Maranello en fabricarse en serie con tecnología híbrida, su antecesor fue una serie limitada muy exclusiva de un modelo llamado LaFerrari, que por esa razón tienen un valor superior a los cuatro millones de dólares en el mercado.
Pero el SF90 Stradale es el automóvil que representa el primer paso hacia la propulsión sustentable de la famosa marca de autos deportivos italianos, que tendrá su momento culminante en 2025, cuando el mundo conozca la primera Ferrari 100% eléctrica.
Massacessi recibió su modelo hace pocos días, el pasado 3 de octubre, y como es habitual cuando se compra una Ferrari 0km en un concesionario oficial en cualquier parte del mundo, la ceremonia es muy cuidada y sorprendente.
“La pedí hace casi tres años, después de la F8 Spider, que es la que estuve usando hasta ahora y que fue mi primera Ferrari. Yo quería que la SF90 fuera también Spider, pero ya estaban todas vendidas. De todos modos, el concesionario de Ferrari me aconsejó que comprara la de techo rígido. Hace unos seis meses me empezaron a mandar algunas fotos para compartir el proceso de fabricación del auto, mientras tanto, ellos van haciendo un libro con la historia del auto, en el que hay fotos de todo el proceso, y el detalle de cada pieza que tiene el auto. Si cuando terminan el auto querés el libro, te lo venden en 12.000 dólares. Pero si no lo querés, el libro queda guardado por si algún día lo pedís o vendés el auto y querés ofrecerlo con ese libro como garantía. Es un mundo maravilloso e increíble entrar al mundo de los clientes Ferrari”, le contó Massacessi a Infobae apenas unas horas después de recibir su nuevo súperauto.
Comprar una Ferrari es un proceso único al que pocos tienen oportunidad de acceder. Una vez que se elige el modelo, empiezan las preguntas y se abre un abanico de opcionales que pueden llegar a duplicar el precio original del automóvil. El SF90 Stradale está impulsado por un motor V8 de 3.9 litros con doble turbocompresor, que entrega 770 CV, al que se suman tres motores eléctricos que elevan la potencia hasta unos impresionantes 986 CV de potencia combinada. Tiene una caja de velocidades de 8 marchas con doble embrague y tracción en las cuatro ruedas. La batería de litio de 7.9 kWh alimenta la propulsión eléctrica por regeneración pero además se puede enchufar a la red eléctrica, es decir que el auto es un híbrido enchufable (PHEV).
Pero Massacessi, además de elegir el color Blu Tour de France 70, decidió agregar 15 opcionales, que llevaron el precio del auto unos 60.000 dólares por sobre el precio original. Los accesorios que eligió colocar fueron el Radar trasero, los cálipers de frenos de color amarillo, el splitter delantero de fibra de carbono, un tratamiento anti picaduras de piedras para la pintura, volante con luces LED y Driver Zone, detalles del interior de color azul, insertos de fibra de carbono en el habitáculo, el cavallino rampante de Ferrari cosido en los apoyacabeza de las butacas, salida de escape de titanio, los escudos de Scudería Ferrari en los laterales (que cuestan 925 dólares cada uno), espejo retrovisor electrocrómico, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, llantas pintadas de color negro, butacas de fibra de carbono y otros detalles.
“El volante tiene las luces como el volante de Fórmula 1, que se van encendiendo a medida que suben las RPM del motor. Las butacas de fibra de carbono le cambian el aspecto, y el caño de escape con salidas de titanio le cambian completamente el sonido. Eso me lo recomendaron en la concesionaria y tenían razón. Es un sonido mucho más lindo. Son algunos lujitos que uno si puede es lindo poder dárselos”, contó el exfutbolista de Independiente, que supo brillar junto a Ricardo Bochini a fines de los años 80.
La SF90 Stradale de Massacessi tenía fecha para julio pero se retrasó algunas semanas. El seguimiento al día que hace la fábrica con los clientes, permitió ir viendo cómo iba la construcción de su unidad. Cuando estuvo lista y embarcada, la cuenta regresiva comenzó hasta que llegara al Concesionario Ferrari Central Florida, donde la encargó.
“La ceremonia es muy linda, entrás a una habitación impecable y ves un auto tapado con una funda de seda de color rojo con el cavallino de Ferrari en la trompa. Te ponen música, hacen la cuenta regresiva y destapan el auto tirando de esa funda hacia atrás. Te quedás mudo. Ahí está tu auto, que no es un auto cualquiera, porque lo encargaste personalizado. Te hacen un brindis con champagne Ferrari como el de Fórmula 1. Después arrancás y salís de ese lugar manejando el auto. Es un momento muy lindo para vivir, que pude compartir con toda mi familia”, contó entusiasmado Massacessi.
Quién se compra un auto de 1.000 CV de potencia está preparado para sentir sensaciones fuertes al pisar el acelerador, pero este auto superó completamente la expectativa de su dueño.
“Al manejarla por primera vez lo primero que sentí fue miedo. Me asusté yo y se asustó mi hijo al manejarla también. Impresiona, realmente, porque además tiene tracción en las cuatro ruedas. Vas en 7ma, acelerás y sale como si hubieras bajado dos cambios. Realmente es un auto impresionante, que dobla con una seguridad asombrosa. Es cuestión de costumbre”, relató el dueño del auto.
¿Cómo se compra una Ferrari y cómo se paga?
Este modelo cuesta unos 600.000 dólares con impuestos y costos adicionales.
“Al precio del auto con los opcionales que uno elige, hay que sumarle el impuesto de Estados Unidos, que es el 6,5%, y el costo de traslado, que es el único que cambió desde el día que encargué el auto hasta hoy, y es porque los fletes aumentaron en todo el mundo. Después, respecto al modo de pagar el auto, podés hacerlo cash, podés llevar a tu banco o podés elegir la financiación de Ferrari. Con ese sistema compré la F8 Spider, mitad en efectivo y mitad con su financiación. Pero para la SF90 decidí llevar a mi banco porque me daban una mejor tasa del financiaban a una tasa del 6.54% anual y era mejor que la de Ferrari. Así que pagué la mitad al contado y la mitad a 60 cuotas, que puedo ir adelantando cuando yo quiera”, detalló Massacessi.
La SF90 Stradale no será la última Ferrari que quiere tener el exfutbolista en su garage. Al menos quiere una más para entrar al círculo selecto de Maranello.
“Ahora voy a esperar a la otra, la Ferrari 296, que también es híbrida, porque después de la tercera Ferrari, entras a un grupo de clientes exclusivos, a los que eligen cuando hacen algún auto especial, o un modelo de pocas unidades. Te llaman y te ofrecen esos autos únicos. Entonces quiero al menos una más para estar ahí. Es interesante, porque esos son autos que si los comprás, al días siguiente cuestan un millón más, porque no hay otros. Eso pasó con LaFerrari o con los Monza, autos increíbles”.