Los programas de Responsabilidad Social de las grandes empresas son una nueva manera de interacción con las comunidades en todo el mundo. Todo tipo de compañías generan acciones para contribuir con sus comunidades como un modo de devolver a las personas algo de todo lo que ganan gracias al consumo general de productos de las sociedades.
Toyota Argentina tiene una variedad de este tipo de programas, uno de los cuales ha tenido gran repercusión en los últimos años, ya que a través de su política de economía circular, la empresa ha recuperado material de desecho y lo ha convertido en materia prima reciclada para que varios talleres de costura encuadrados en actividades de economía popular, confeccionen distintos productos aprovechando desde los recortes de alfombras y telas de los tapizados de los vehículos hasta las propias bolsas de aire, los airbags, que no se utilizan en la producción de los vehículos en la Planta Zárate.
Hay otro programa muy interesante que comenzó a ponerse en práctica en el año 2008, y que persigue como objetivo principal una capacitación en la atención mecánica de automóviles. Se llama META, y el nombre no es caprichoso sino un juego de palabras entre la intención de proponerse un objetivo a cumplir y la sigla que resulta de las palabras “Mejora de la Educación Técnica Automotriz”.
El programa nacido en el área de Customer Service de Toyota Argentina, y forma parte de las iniciativas de la compañía que tienen por objetivo contribuir con la educación de las comunidades donde opera y de vincular a los más jóvenes con el entorno laboral.
Inserción laboral
La iniciativa está orientada a alumnos de las escuelas técnicas para promover su inserción laboral a través de un programa de prácticas profesionalizantes en los concesionarios Toyota a lo largo de todo el país. La metodología que se lleva a cabo para su puesta en funcionamiento es una acción que promueve Toyota Argentina SA con esa red de concesionarios. Cada interesado en participar de la acción se contacta con la escuela técnica de su localidad o región y juntos seleccionan a cuatro alumnos para participar de las capacitaciones y prácticas.
Una vez elegidos los alumnos, entre el concesionario y la dirección de cada centro educativo se acuerdan los horarios para participar del programa, dependiendo del turno de la cursada del alumno y el espacio laboral del concesionario, contemplando que no pueden estar más cuatro horas por jornada. Esta suma de días y horas tienen que cubrir lo que cada sistema educativo requiere; en general son 200 horas de prácticas totales. Se trata de prácticas profesionalizantes que no reciben remuneración, tal como establece la ley 26.058. Es la gran distinción entre un programa como este y las pasantías, que se dan en un espacio de nivel terciario y/o universitario y son rentadas.
Este año, el programa META tuvo la participación de 75 alumnos que se encuentran cursando el último año del colegio y provienen de 25 escuelas de diferentes localidades del interior del país. Por seis meses, los alumnos realizarán prácticas profesionales en las áreas de Repuestos, Atención al Cliente y Taller en concesionarios de la red oficial de Toyota en todo el país.
Durante todo el proceso contarán con el acompañamiento de un instructor que se encargará de transmitirles los conocimientos sobre los procesos y métodos de trabajo del sector. Finalizadas las prácticas, tendrán la posibilidad de incorporarse al equipo de trabajo.
Durante esos seis meses, tanto el concesionario como las escuelas tienen instancias de evaluación. A nivel escolar, esas evaluaciones tienen impacto en el desempeño como alumno. Para los concesionarios esas evaluaciones sirven como referencia para postulaciones futuras, pero no implican que se vaya a generar vínculo laboral a partir del resultado. En esa instancia futura, se trata de una relación de dos partes y depende de las necesidades o vacantes dentro del concesionario, por un lado, y del interés de los alumnos de formar parte del equipo de la red, por el otro.
Los programas se pueden realizar en dos distintas épocas del año, hay un turno inicial que va de abril a agosto, y otro que comienza en agosto y termina en el mes de diciembre con el fin del ciclo lectivo.
“Este es un paso más que damos en pro del desarrollo y la formación de los más jóvenes. Desde que comenzamos en 2008, formamos a más de 600 estudiantes de los cuales el 15% ya se incorporaron en distintas áreas de nuestra red. A través de esta iniciativa logramos fortalecer los colegios técnicos del país, las comunidades donde operamos y nuestros concesionarios”, dijo Eduardo Kronberg, gerente general de ESG de Toyota Argentina.