Hace apenas unos días, durante la disputa del Grand Prix de Miami de Fórmula 1, entre muchos otros personajes que se vieron desfilar por los boxes estuvo Elon Musk. El CEO de Tesla visitó varios equipos, y en algún momento deslizó la idea de hacer un auto de Fórmula 1 eléctrico para competir contra los actuales monopostos que, como es sabido, tienen tecnología híbrida.
Pues del otro lado del mundo, apenas unos días antes, un desafío similar pero con autos de calle de alta performance, ha tenido el primer resultado para cotejar ambas tecnologías, y ha sido a favor del auto eléctrico.
Fue a fines de abril en Alemania, en la pista del Automotive Testing Papenburg (ATP), a mitad de camino entre Bremen y la frontera con Países Bajos, una locación especial para hacer ensayos de autos de producción y prototipos, ya que tiene un súper óvalo de 12,3 kilómetros de extensión, con dos rectas de 4 kilómetros cada una y ambos extremos con un impresionante peralte de 49,7°.
El duelo no era mano a mano, sino auto contra récord anterior. La marca que debía intentar quebrarse era de 31s 49/100 para acelerar de 0 a 400 km/h y regresar a cero nuevamente. Ese tiempo lo había marcado un Koenigsegg Regera, dotado de un poderoso motor 5.0 litros en arquitectura V8, asistido por dos turbocompresores y tres motores eléctricos, que totaliza 1.509 CV de potencia con 2.000 Nm de torque. El auto pesa solamente 1.470 kg, lo que permite una relación peso / potencia casi de 1:1, pero además está dotado de un sistema de transmisión muy particular.
Se llama “Koenigsegg Direct Drive” y reemplaza el sistema de transmisión convencional de una caja de velocidades. Su funcionamiento es hidráulico, ya que alberga todos los engranajes necesarios pero los controla automáticamente de un modo diferente al conocido.
Al presionar la leva izquierda para cambios descendentes, el sistema de acoplamiento conecta el frenado regenerativo, y cuando se presiona la leva derecha, las de subir marchas, provoca un deslizamiento en el acoplamiento hidráulico mientras aumentan las revoluciones, con lo que se aumenta la potencia.
El retador, como no podía ser de otro modo siendo un auto eléctrico de alta performance, era el Rimac Nevera, el hypercar croata creado por Mate Rimac, que tiene 1.920 CV de potencia únicamente eléctrica y 2.300 Nm de torque pero 2.150 Kg de peso. En este mismo circuito, el Nevera ya había marcado la velocidad máxima para un automóvil eléctrico al registrar en noviembre de 2022 nada menos que 412 km/h. Ahora tenía otras metas. El menor tiempo en alcanzar los 400 km/h era la máxima, pero durante y después de hacerlo, había muchos otros retos que debía intentar obtener para su palmarés.
Y no sólo logró romper el récord del Koenigsegg, sino mejorarlo por más de un segundo, lo que, en estos valores de velocidad, es bastante más de lo que puede parecer. El Rimac Nevera aceleró de 0 a 400 km/h en 21s 32/100, y una vez que tocó esa velocidad, consiguió frenar a cero nuevamente en tan sólo 8s 62/100, demoró en total apenas 29s 93/100, algo que tiene el doble mérito que significa pesar casi 700 kg más que el Regera.
“Al crecer, siempre miré los autos que hicieron historia moviendo el listón del desempeño”, declaró Mate Rimac luego de alcanzar este récord, pero su sorpresa y asombro está también en el hecho de saber que “el auto que hemos creado puede alcanzar los 400 km/h y volver a cero en menos tiempo del que tardó el McLaren F1 en acelerar hasta los 350 km/h. Y no solo eso, sino que puede hacerlo una y otra vez, rompiendo todos los demás récords de rendimiento en el proceso. Si tuvieras una Nevera y acceso a una pista, también podrías hacerlo”, finalizó.
Como anécdota, el Rimac Nevera con el que se establecieron estas nuevas marcas, que fueron certificadas por dos compañías especializadas como Dewesoft y RaceLogic, tenía una decoración que trae cierta nostalgia al constructor croata, ya que la combinación de colores entre negro y verde, tenía por finalidad homenajear aquel BMW 323i de 1984, con el Mate Rimac que comenzó la aventura de experimentar la movilidad eléctrica en el año 2006.
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