Entre los autos híbridos autorecargables, los micro-híbridos, los híbridos enchufables y los eléctricos, es bastante razonable que para las personas comunes, que no están inmersas en el mundo del automóvil, haya algo de confusión o dificultad para diferenciar un modo u otro de movilidad sustentable. Si a eso le sumamos los Fuel Cell que Toyota utiliza en su modelo Mirai y que ahora Hyundai ha decidido fabricar en serie para una línea de camiones pesados, hace falta una explicación más extensa.
Los experimentos empezaron mucho antes, aunque fueron más difundidos entre los años 70 y 80. A falta de la actual tecnología de almacenamiento de energía, hubo intentos por hacer autos eléctricos que cargaban enormes baterías de plomo ácido en el baúl, hubo extraños autos solares, que eran casi una gran celda de captura de energía fotovoltaica con ruedas con un mínimo espacio para un único pasajero; y también hubo autos a los que se les inyectaba hidrógeno gaseoso en la cámara de combustión de un motor convencional. Todos fueron parte de la evolución, pero se topaban con problemas de tecnología que eran barreras infranqueables.
Pero con el desarrollo de las conocidas y sofisticadas baterías Li-ion modernas, que equipan tanto a las computadoras portátiles como a los teléfonos celulares y a los cada día más populares autos eléctricos, se ha conseguido desarrollar nuevas formas de propulsión, y la de pila de combustible de hidrógeno (Fuel Cell) es una de ellas. El principio de funcionamiento es el de separar la molécula del agua, liberar el oxígeno y quedarse con el hidrógeno. Esa separación se hace por un método conocido como electrólisis, y en la medida que ese consumo eléctrico que es parte del proceso se obtiene de fuentes renovables como los molinos de energía eólica, el hidrógeno se considera verde.
Una vez obtenido y almacenado, el hidrógeno se conserva a una presión de 700 atmósferas debido a su bajísima densidad, lo que requiere estaciones especiales para el envasado y el despacho posterior. El proceso por el cual el hidrógeno se convierte en electricidad se llama electrólisis inversa, y es ese el modo en que puede alimentar un motor eléctrico para un vehículo.
La coreana Hyundai es, junto a Toyota y BMW, una de las tres grandes compañías automotrices que confiaron en este sistema de propulsión limpio, que no requiere que los vehículos se tengan que conectar con un cable a una red eléctrica para cargar sus baterías. Mientras Toyota ya comercializa el Mirai desde hace 4 años en varios países de Europa además de su propia tierra japonesa, y BMW ha decidido recién este año comenzar con la fabricación en serie de una versión de su SUV iX5 Hydrogen, para Hyundai el uso del hidrógeno fue en dos caminos paralelos.
Por un lado, con la SUV Nexo, y por el otro la línea de camiones pesados Xcient Fuel Cell, que desde el año 2020 están recorriendo distintos caminos y países de Europa en fase de experimentación, y que hoy ya son una realidad porque comienzan a fabricarse en serie el año próximo.
Así lo comunicaron las autoridades de Hyundai Motor Company el pasado miércoles, durante la Advanced Clean Transportation (ACT) Expo 2023, en Anaheim, California. El tractor de celda de combustible Clase 8 es un 6x4 y ofrece hasta 720 kilómetros de autonomía aun cuando esté completamente cargado, gracias a 10 tanques que almacenan 68 kg de hidrógeno a 700 bar de presión. El proceso de recarga del hidrógeno es de aproximadamente 30 minutos.
El Hyundai Xcient Fuel Cell 6x4 está equipado con dos sistemas de celdas de combustible de 90 kW construidos por Hyundai que proporcionan energía para un motor de 350 kW o 476 CV de potencia que producen hasta 2.237 Nm de torque, y el exceso de energía generada por las celdas de combustible se almacena en una batería de 72kW.
Este lanzamiento es la culminación de tres años de desarrollo y ensayos. En octubre pasado, Hyundai anunció que los camiones Xcient habían alcanzado los 6 millones de kilómetros de pruebas en Suiza, utilizándose para aplicaciones logística y distribución. Otros países donde los vehículos de celda de combustible Xcient ya están rodando son Alemania, Israel y Nueva Zelanda.
“Hyundai lleva más de 20 años centrándose en el hidrógeno”, dijo en la presentación Martin Zeilinger, vicepresidente ejecutivo y director de desarrollo de Vehículos Comerciales de Hyundai Motor. “Nuestra avanzada tecnología de pila de combustible ya está en uso en diversas aplicaciones, especialmente en el sector de los vehículos comerciales, demostrando su potente rendimiento y su fiabilidad”, concluyó.
Para la marca coreana, el hidrógeno es considerado por Hyundai como la solución más conveniente de energía limpia para los vehículos comerciales, desde furgones y camiones livianos hasta camiones pesados de alto consumo energético, debido a sus ventajas en la producción, el transporte, la distribución y el almacenamiento.
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