Se esperaba algo novedoso pero no estaba demasiado claro qué sería. BMW ha anunciado hace un tiempo que la nueva plataforma sobre la que estará basada su próxima generación de autos eléctricos se llamará Neue Klasse, y será revolucionaria mucho más allá de la capacidad de sus baterías. Pero de lo que presentarían en el CES de Las Vegas 2023 no había muchas precisiones. Solo se sabía que era un auto conceptual.
El auto se llama BMW i Vision Dee, cuyo significado es Digital Emotional Experience (Experiencia Emocional Digital), y esa es la esencia del camino que plantea la marca alemana para sus modelos futuros que serán solamente eléctricos, pero fundamentalmente digitales.
Tanto es así, que a diferencia de otros modelos recientes como el concepto de Chrysler Synthesis presentado 24hs antes en Las Vegas, o el propio Theatre Screen que BMW anunció como equipo de serie para las plazas traseras de la nueva versión del Serie 7 y Serie i7, en este auto conceptual la pantalla amplía su superficie y sale del tablero para proyectarse directamente en el parabrisas a través de la tecnología HUD (Head up display).
De este modo, el pasajero que acompaña al conductor tendrá acceso a mucha información proyectada en el cristal delantero, algo que hasta ahora estaba reservado exclusivamente para quién está al volante, y las indicaciones son únicamente las necesarias para conducir sin tener que quitar la vista del camino.
Lo que persigue la casa de Baviera es convertir al auto en un portal hacia el mundo digital que permita combinar la experiencia virtual con la realidad. Y lo más curioso es que la pantalla sale del tablero. El HUD no es una extensión sino el sitio en el que se visualiza la información deseada.
“Quien sobresalga en la integración de los mundos digitales cotidianos del cliente en el vehículo en todos los niveles, tendrá éxito en dominar el futuro de la construcción de automóviles”, declaró Frank Weber, director de desarrollo de BMW, dejando claramente expuesto que más allá del modo de propulsión que tengan, los autos del futuro necesitarán adaptarse a ser un “prestador de servicios digitales” para los usuarios. Algo que en una feria de tecnología como el CES Las Vegas queda reflejado claramente porque todos los lanzamientos de la industria automotriz giran en torno a este nuevo paradigma.
Pero no es solo en el interior del i Vision DEE donde se encuentran las novedades digitales. Este concepto de auto es el segundo paso de la marca luego de presentar en 2021 el BMW iX Flow, un auto que podía cambiar de color entre negro y blanco gracias al sistema de tinta electrónica que con solo presionar un botón “movía las partículas” dejando hacia arriba el color elegido y hacia abajo el restante.
La tecnología lleva el nombre de E ink, y en esta segunda fase de su desarrollo, la paleta se ha ampliado hasta 32 colores que pueden ser programados y combinados con distintos patrones a gusto del consumidor, no solamente a lo largo de los 240 segmentos que tiene la carrocería, sino también en los cristales laterales. Así, el auto puede lucir sus ventanillas decoradas desde el exterior, aunque la visión desde el habitáculo no cambia ni se reduce.
El auto, curiosamente no es un SUV, como lo fue el iX Flow con el que se lanzó esta tecnología. Contrariamente, es más bien un sedán que parece buscar en su identidad, ser el reemplazo natural del clásico Serie 3, lo que encierra también un mensaje en sí mismo, como es el de comunicar que los autos de BMW seguirán siendo perfectamente reconocibles más allá de su parrilla características, sino también por sus formas auténticamente “BeEme”.
El concepto será solo eso, un ensayo de diseño múltiple que no se producirá tal como se ha presentado. Pero a partir de 2025, cuando la Neue Klasse empiece a estar disponible para los clientes, muchas de estas soluciones se encontrarán en los autos de la nueva generación eléctrica de la marca.
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