Muchas veces se ha cuestionado que en muchas flotas de autos de la policía de distintos países, los autos con los que se hace el trabajo de vigilancia y prevención del orden público no son los suficientemente rápidos como para poder perseguir a eventuales delincuentes o infractores que tengan vehículos de altas prestaciones. En algunos casos, los patrulleros son camionetas o pickups de mediano y gran porte, los que suelen tener, además de una potencia razonable, una fortaleza estructural que permite incluso resistir mejor a impactos que se pueden dar en su accionar.
Pero esas no son las únicas utilidades que se le pueden dar a un auto veloz en manos de las fuerzas policiales, y el ejemplo más acabado de ello proviene de Italia, donde la Polizia di Stato tiene un Lamborghini Huracán para utilizar en caso de extrema necesidad.
Y la necesidad realmente era altísima, porque se trataba de trasladar dos riñones para trasplante, desde Padua a Módena y a Roma. La noticia la publicó la propia policía en sus redes sociales, acompañando al texto con algunas fotos y un video, en el que se muestra parte del recorrido.
El automóvil es un Lamborghini Huracán LP 610-4, que donó la marca italiana cuya fábrica está en Sant’Agata Bolognese, en las cercanías de Bologna, a la Polizia di Stato en el año 2017, cuando Stefano Domenicalli, actual Presidente de Liberty Media, la empresa que tiene los derechos comerciales de la Fómula 1, era su CEO.
El auto estuvo en tres ciudades diferentes a lo largo de un día que quedará en el recuerdo de todos como una jornada mágica, donde el amor por el prójimo fue el móvil para un largo recorrido en las autopistas de buena parte del país trasalpino. Según publica el medio italiano Tag 24, el Huracan de la policía inició el día recogiendo los órganos en el Hospital Civil de Padua. De allí, los dos agentes que lo tienen a su cargo la conducción del superauto, se dirigieron al Policlínico de Módena para la primera entrega, y apenas dejaron el primer riñón, emprendieron rumbo al Hospital Tor Vergata de Roma para la segunda entrega.
Así, el Lamborghini Huracán LP 610-4 realizó 580 km en el mismo día, distancia que no sorprende por la cantidad de kilómetros en sí, sino por la velocidad a la que recorrieron los caminos cuando el tránsito se los permitía. Si bien no hay cifras oficiales suministradas por la policía italiana, algunas publicaciones aseguran que en varios tramos de autopista, el “auto sanitario” alcanzó los 300 km/h.
Esta no es la primera vez que el auto logra una misión humanitaria de esta índole. En 2020, el mismo Huracan trasladó también un riñón a más de 450 kilómetros de distancia en menos de dos horas. En ese momento, la policía agradeció los servicios del “Lambo” con un tweet en el que se hacía una interesante reflexión: “Gracias a nuestro Huracan, transportamos un riñón donado a tiempo para un trasplante a una persona. No necesitas superpoderes para salvar una vida. La solidaridad, la tecnología y la eficiencia también ayudan”.
Este modelo de Lamborghini está equipado con un motor V10 atmosférico de 5.2 litros y 610 CV y tracción integral, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3,2 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 325 km/h.
Más allá de estar dotados de todo el equipamiento habitual de los patrulleros como balizas y sirenas, e incluso una computadora conectada a la red oficial de la policía nacional, pero además, aprovechando que tiene el motor en la parte posterior al habitáculo, el maletero delantero es completamente refrigerado y está preparado especialmente para el transporte de órganos humanos y para mantener frescos los productos médicos sensibles a la temperatura.
Italia no es el único país europeo que tiene una superpatrulla destinada a estas misiones sociales, ya que en Portugal, por ejemplo, la policía cuenta con los servicios de un Nissan GTR a disposición de este tipo de traslados humanitarios.
Seguir leyendo: