Desde hace un tiempo, los vehículos eVTOL están presentes cada vez con más frecuencia en diversos proyectos de movilidad sustentable del futuro. La sigla significa Electric Vertical Take-off and Landing, que para entenderlo en español significa vehículo eléctrico de despegue y aterrizaje vertical.
La diferencia con un helicóptero es que tiene al menos ocho hélices y que está propulsado un motor eléctrico y no de combustión interna. Si a esta cualidad se le suma que pueda tener ruedas y un formato tal que le permite transitar por una calle como un automóvil, se llega a la sencilla descripción de un auto volador o un dron con ruedas.
Varios intentos y estudios se han llevado adelante explorando estas opciones. De hecho, hace pocas semanas se conoció que la Policía aérea de España ha comprado un dron para acceder con dos oficiales a bordo a lugares de difícil acceso por tierra, aunque en ese caso no es un eVTOL sino un dron de gran capacidad.
En 2021, Honda también diseñó un ecosistema de transporte que incluía un eVTOL coordinado con autos eléctricos autónomos, y tiempo antes incluso Audi lo había estudiado, aunque después terminó dejando el proyecto a un lado, al menos por el momento.
Sin embargo hay quienes mantienen el interés por desarrollar este tipo de movilidad en otras partes del mundo. Es el caso de una empresa china de movilidad llamada Xpeng, que acaba de publicar los resultados e imágenes del primer vuelo de su propio eVTOL: el Xpeng AeroHT.
Se trata de un auto de unos 2.000 kg de peso, que en apariencia solo se diferencia de uno convencional porque tiene dos grandes elementos sobre el techo. Y es que es ahí donde se guardan sus 8 rotores, que deben ser desplegados para poder convertir el auto en un auto volador.
Esta primera prueba del eVTOL de Xpeng transcurrió con total normalidad, tanto en despegue como aterrizaje, pero además sirvió para hacer ensayos como los de apagar uno o más rotores en pleno vuelo y comprobar cómo reaccionaba la nave en general con menos propulsión.
Lo novedoso de este desarrollo es que tanto en tierra como en el aire, se usa el volante para conducirlo, algo que fue buscado por sus creadores, quiénes tienen la idea de lograr que la experiencia de guiarlo por en el aire no sea muy diferente a la de conducir un automóvil. Además del volante, el conductor también necesita usar una palanca derecha para hacer que el vehículo se mueva hacia adelante, hacia atrás o quedar suspendido en el aire, como así también las funciones de subir o bajar la altura de vuelo.
De todos modos, este no parece ser un vehículo que tenga destino de producción en serie. La propia compañía ha admitido que es bastante complejo hacer volar un peso de dos toneladas más allá de unos 30 kilómetros, y que buena parte del problema está en el alto consumo de la batería para conseguirlo.
Si bien las pruebas técnicamente fueron positivas y se obtuvieron los resultados esperados, claramente este parece ser apenas un primer paso en la experimentación referida a este tipo de vehículos. Y así como ocurre frecuentemente con todo auto experimental, el eVTOL Xpeng AeroHT se ha mostrado completamente camuflado para que no se pueda distinguir su diseño en detalles, por lo que más allá de las pocas fotografías que se han publicado oficialmente, hay que apelar a la presentación virtual que la propia marca ha hecho, para conocer la forma que pretenden darle al automóvil que alojará la tecnología que lo convierte en un auto capaz de volar.
Después vendrá el estudio de factibilidades de uso de esta tecnología. Circular por las calles es muy distinto a hacerlo por el aire. Alturas, cruces, momentos para despegar y aterrizar, tránsito en general, son cuestiones que aun nadie imagina y que no se pueden comparar siquiera con el tráfico aéreo. ¿Poder conducir un eVTOL requerirá de una licencia para vehículos aéreos o solo será posible cuando todos sean autónomos? Empezando por esa pregunta, la lista de incógnitas es demasiado extensa para obtener respuestas en la actualidad.
Seguir leyendo