Es muy frecuente encontrar en distintos lugares y ámbitos, a muchas personas que todavía defienden los motores de combustión interna y se resisten a la llegada de la propulsión eléctrica como opción. Y es muy frecuente escuchar como defensa, que antes que mirar a los autos, debería levantarse la vista y cuestionar a los aviones. Ni uno está totalmente en lo cierto, ni el otro está completamente equivocado.
Los motores que funcionan con chispa y explosión deben reemplazar el combustible fósil por uno que no lo sea. Las opciones actuales están en los biocombustibles, todavía en proporciones equilibradas con el derivado del petróleo en la mayoría de los usos, los combustibles sintéticos, y el hidrógeno.
Y los aviones deben bajar sus emisiones también. La alternativa del hidrógeno parece ser la mejor, pero la electricidad sigue generando avances en distintos proyectos en varias partes del mundo.
Uno de los casos es el de la startup norteamericana Eviation Aircraft, que esta semana puso en el aire para su primer vuelo, una aeronave pequeña completamente eléctrica llamada Alice, en un corto trayecto que tuvo una extensión de 8 minutos. El vuelo salió desde el Aeropuerto Internacional del Condado de Grant, en Washington, se elevó a unos 1.000 metros de altitud y regresó al punto de partida, demostrando su completa adaptación a todos los requerimientos básicos que debe tener a nivel dinámico.
Alice es un avión que tiene una capacidad para transportar a 9 pasajeros además de los dos pilotos, ya que tiene una capacidad de carga de 1.100 kilos. Su perfil aerodinámico dista levemente de lo tradicionalmente visto en aeronaves de ese porte, con una forma que mantiene una superficie inferior algo más plana, que no mantiene la curvatura del resto del fuselaje.
A nivel técnico, el avión es impulsado por dos motores eléctricos magni650 de magniX, cuenta con soporte de batería de AVL que contiene 21.500 celdas pequeñas estilo Tesla, y está pensado tanto para los mercados de pasajeros como de carga. Normalmente operará vuelos que van desde 240 a 400 de distancia.
Hasta el momento, y mientras se aguarda la certificación de la Administración Federal de Aviación, ya se han hecho reservas por parte de dos compañías de trasporte local de pasajeros, Cape Air y Global Crossing Airlines, quienes han adquirido entre ambas, 125 aeronaves, mientras que DHL Express ha sido la primera compañía de transporte de cargas que ha reservado los primeros 12 aviones del modelo Alice eCargo.
“Hoy nos embarcamos en la próxima era de la aviación: hemos electrificado con éxito los cielos con el inolvidable primer vuelo de Alice”, declaró Gregory Davis, Director Ejecutivo de Eviation Aircraft. “La gente ahora sabe cómo se ve y suena la aviación asequible, limpia y sostenible por primera vez en un avión totalmente eléctrico de ala fija. Este hito liderará la innovación en los viajes aéreos sostenibles y dará forma a los viajes de pasajeros y carga en el futuro”, remarcó luego del aterrizaje del avión eléctrico tras su primer vuelo.
A este primer trayecto en el aire, seguirán más vuelos de prueba y validación, que forman parte del desarrollo de la aeronave, durante los cuales se buscarán los límites y se evaluará su desempeño bajo una gran variedad de condiciones.
Todavía quedan un par de años hasta que se comience a producir el avión en serie. Los responsables de Eviation Aircraft estiman que no será hasta 2025 que comiencen las entregas a las empresas que han reservado unidades. La aviación es mucho más compleja para validar y homologar vehículos, teniendo en cuenta la seguridad, base de la actividad, y el alto costo de fabricación de un avión.
Lo interesante es que estos desarrollos aparecen como una alternativa que podría acelerar la decisión que tienen en estudio varios gobiernos, que pretenden eliminar las rutas aéreas de menos de 500 km para territorios en los que exista el ferrocarril eléctrico como medio alternativo de transporte. Si los aviones eléctricos pueden unir esas distancias en una hora o menos, y sin emitir gases de efecto invernadero, se habrá dado un paso importante en descarbonizar el transporte de aeronavegación.
SEGUIR LEYENDO