Mientras en EE.UU. el avance parece más lento, la tecnología desarrollada para el funcionamiento del servicio de taxis sin conductor en China se acelera a otra velocidad. O al menos eso parece. Es cierto que el gigante asiático empezó antes y posiblemente en esa anticipación radique la ventaja, aunque también hay que considerar que, quizás debido a las conocidas restricciones de comunicación, se conocen más problemas con esta tecnología en California, de los que se conocen provenientes del país gobernado por Xi Jinping.
En las últimas semanas se han abierto algunas investigaciones a causa de accidentes ocurridos con autos de la empresa Cruise, los socios estratégicos de General Motors en el desarrollo de taxis autónomos que ya funcionan en San Francisco, para entender si hubo alguna falla en el sistema en sí mismo, o si se trató de colisiones que tuvieron que ver con errores de conductores de los otros autos involucrados.
Al mismo tiempo, del otro lado del mundo, Baidu, el equivalente a Google en China, acaba de presentar un nuevo vehículo específicamente desarrollado para esta función que ha sorprendido a todos porque ofrece la posibilidad de prescindir también del volante.
El auto se llama Apolo RT6 y estará listo para entrar en producción en la segunda mitad de 2023, con la finalidad de presentar un producto que potencie a Baidu como proveedor de servicio de taxis sin conductor en todo el país, ya que la velocidad a la que se está expandiendo la red es asombrosa.
A diferencia de los modelos anteriores presentados por Apolo, este es el primero concebido para la conducción autónoma, por esa razón, su morfología es distinta, y pone a los pasajeros en una posición y distribución diferente dentro del habitáculo. El volante es una opción, y en caso de desear utilizarlo, simplemente con un botón, el sistema estará disponible, y el asiento correspondiente tomará la posición del conductor. Esto se debe a que la legislación no contempla actualmente los autos sin volante, entonces, tenerlo o no tenerlo a la vista, permite que se cumpla con las normas.
El Apollo RT 6 está equipado con 38 sensores, entre los que se encuentran ocho radares LIDAR, 12 sensores ultrasónicos, un radar de onda de 6 mm y 12 cámaras para conseguir un mapeado del entorno de precisión y largo alcance en todos los ángulos. La mayoría de estas cámaras se encuentran en el techo del auto, que a su vez es casi completamente vidriado.
El auto, que tendrá un costo equivalente a unos 40.000 dólares, comenzará a ensayarse a pequeña escala con algunos modelos en la segunda mitad de 2023. Estos estarán disponibles en la plataforma de transporte autónomo de Baidu, Apollo Go, en 10 ciudades de China, entre ellas Shenzhen, Shanghái y Beijing, donde ya se han realizado más de un millón de viajes desde el lanzamiento de su servicio en el año 2020.
Actualmente, la flota de autos sin chofer que produce Baidu es de unas 10.000 unidades y la empresa planea extenderla a 100.000 por año para el año 2030, cuando esperan poder brindar el servicio en 100 ciudades de China.
SEGUIR LEYENDO