Ser famoso y mantener en reserva buena parte de la vida privada puede ser algo bastante difícil de lograr. Entonces hay quienes deciden relajarse y dejar que su vida sea normal y si algo se ve, que así sea, y del otro lado, quienes sucumben a la tentación, especialmente en tiempos de Instagram y otras redes sociales, y exhiben cada minuto de su vida públicamente.
Lionel Messi podría decirse que es parte de los primeros. No es tan sencillo saber algo más de lo que él y su esposa, Antonella Rocuzzo, habilitan, por lo que no es tan sencillo conocer el inventario de uno de los garages que más curiosidad despierta. Sin ir muy lejos, el año pasado, ya jugando en el PSG y haciendo su nueva vida francesa, un posteo de su mujer a bordo de un Mini eléctrico, permitió que el mundo supiera que la pareja tenía ya un vehículo sustentable en su colección.
Pero Messi ama los autos, y como muchos futbolistas de élite, ha decidido gastar buena parte de sus millonarias ganancias en darse gustos muy especiales. En sus casi 20 años de jugador profesional, ha tenido autos muy especiales, algunos comprados, otros cedidos o como parte de convenios de publicidad personales o de su club de toda la vida, el Barcelona FC.
A comienzos de 2016, Incluso se lo vinculó con un vehículo muy especial, que salió a subasta y en ese momento fue el segundo auto más caro que se vendió a traves de remates en el mundo. Se trataba de un Ferrari 335 Sport Spider Scaglietti de 1957.
Detrás de esa operación se había creado una historia muy particular, que involucraba a Messi y también a Cristiano Ronaldo, su archirrival en los campos futbolísticos, quienes supuestamente habían estado interesados en quedarse con el auto como un buen modo de invertir parte de sus descomunales ganancias. Técnicamente, el vehículo tiene un motor V12 de 405 CV y es capaz de alcanzar los 300 km/h, pero la cifra más escalofriante es su valor, ya quién haya sido quién lo compró, invirtió nada menos que 32 millones de euros. Messi no lo negó rotunamente, pero se rió de la noticia al poco tiempo, mostrando un auto de juguete como su nueva adquisición. Donde sí el astro argentino ha hecho inversiones es su propia cadena de hoteles MIM Hotels (Magestic i Messi Hotels), como modo de hacer rentables parte de sus millonarios ingresos.
Pero como no todo se trata de invertir, algunos millones se han desviado a darse gustos. Ese parece ser el caso de su colección de autos, que tiene una lista de varias piezas destacadas en la que curiosamente vuelven a entrar Ronaldo y otros futbolistas famosos, aunque no por haber pujado por comprar el mismo auto que Messi en una subasta, sino por tener un modelo similar en algunos casos.
El primer ejemplo es el de un lujoso Cadillac Escalade, el mismo que la esposa de Ronaldo le regaló para su cumpleaños en 2021. Se trata de un SUV de gran tamaño, ideal para uso familiar por sus dimensiones y equipamiento, y por poder llevar a siete pasajeros muy cómodamente instalados en las plazas traseras y centrales. Messi tiene uno de ellos que se impulsa por un potente motor V8 de 6,2 litros que entrega unos dignos 420 CV de potencia.
Otro de los autos que tuvo Messi y que también son parte del garage de otros futbolistas es el Maserati GranTurismo MC Stradale, una cupé clásica de la marca italiana cuyo embajador internacional es nada menos que David Beckham, quién el año pasado mostró públicamente su propio MC20 personalizado. El auto de Messi no es un fuera de serie sino la versión impulsada por un motor V8 de 4,7 litros y 460 CV de potencia por el que pagó cerca de 200.000 euros. Se cree que ese auto fue parte de la vida de los Messi hasta hace unos cuatro años, cuando lo vendió con apenas 45.000 kilómetros en el odómetro.
En cambio, uno de los vehículos en los que más se ha visto al argentino es en un Range Rover Vogue, un modelo que también ha tenido oportunamente el Kun Agüero en Inglaterra. El auto de Messi es negro, tiene una carrocería personalizada a su gusto con accesorios especiales como las llantas, está impulsada por un impulsor capaz de lograr 550 CV y acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 5 segundos, aunque no es el auto con el que Messi disfrutará más la conducción deportiva.
Si hay un auto que sí vale la pena acelerar ese es un Ferrari. Messi tuvo uno, se trataba de un F430 Spider, propulsado por un motor V8 atmosférico de 4.3 litros capaz de alcanzar los 503 CV y tal como su nombre lo dice, es un auto sin techo, para muchos, el mejor modo de sentir la velocidad en un superdeportivo.
Gracias a los convenios de patrocinio que tuvo durante sus años en el Barcelona FC, Messi tuvo varios modelos de Audi, aunque se destacan dos de ellos especialmente: un Audi RS 6 Avant Quattro con un motor biturbo V8 de 4.0 litros que desarrollaba 605 CV de potencia, y un Audi R8 Spyder V10 de 620 CV.
Que tenga convenio su equipo de futbol con una marca alemana, no imposibilitó a Messi tener uno o varios Mercedes. Las versiones que fueron de su propiedad son un Mercedes SLS AMG equipado con un motor V8 de 6.2 litros capaz de alcanzar una velocidad máxima de 315 km/h. También tuvo un Mercedes GLE 43 AMG, un SUV deportivo de 585 CV de potencia.
Aunque pocas veces se lo ha visto al volante, hay quienes aseguran que en Miami, Messi parece tener un departamento en las Porsche Design Tower, un complejo de lujo en el que los autos tienen tanto confort como sus dueños. Y allí también hay un modelo de la casa alemana para su uso cuando viaja a EE.UU. Se trata de un Porsche Panamera Turbo S de 550 CV, el más equipado de la casa de Stuttgart.
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