Los proyectos de automóviles de alta performance que llaman la atención por su apariencia espectacular, suelen ser modos que tienen algunas marcas de mostrar su tecnología y potencia en un producto que nunca se lleva a las calles. Lo ha hecho Renault en los años 90 con una versión extrema de la Van Espace que se comercializaba por esos años, pero dotándola de una mecánica de Fórmula 1 por lo que el prototipo se denominó precisamente así, Renault Espace F1 Concept. También fue llamativa una versión de carrera de la rural Volvo 850 Estate, que compitió a comienzos de esa misma década en el Campeonato Británico de Superturismo, más conocido como BTCC.
Y aunque tiene presencia en el Mundial de Rally con su nuevo modelo Puma, un SUV de segmento B que inició el año ganando con Sebastien Loeb en Montecarlo, Ford no está pasando por un momento de grandes desarrollos para competición a nivel mundial como ocurrió en otras épocas. De hecho, actualmente no compiten en Fórmula 1, donde el famoso Ford Cosworth hizo historia como el motor más exitoso y por ser proveedor de la mayoría de los equipos en los años 70 y 80.
Así es que la recientemente presentada Ford Supervan 4, podría considerarse un buen punto de partida para comenzar un nuevo tiempo en la marca que se hizo famosa con el popular Ford T nacido en Detroit a comienzos de siglo pasado. La razón está en la tecnología de este particular prototipo, que es completamente eléctrica.
El vehículo toma la forma de una Van similar a las conocidas Transit, pero en realidad esa es solo una piel, ya que debajo de la carrocería, la SuperVan 4 es una estructura de caños que contiene la mecánica, la batería, las suspensiones y el habitáculo de competición.
Desarrollado por Ford Performance, este particular vehículo que se exhibirá en la famosa trepada a la colina del Festival de la Velocidad de Goodwwod, tienen cuatro motores eléctricos capaces de entregar 2.000 CV de potencia y acelerar de 0 a 100 km/h en 2 segundos, gracias a un impresionante torque de 1.800 Nm. Tiene una batería refrigerada por líquido con una capacidad de 50 kWh, que es más pequeña que el paquete de 68 kWh del E-Transit Custom.
Los motores están ubicados dos en la parte delantera y dos en la trasera, y cada uno tiene su propia transmisión de diferencial y caja de velocidades de una sola marcha adelante y dos marchas en el tren posterior. Gracias a esto, es capaz de combinar la fuerza como el vehículo lo necesite, repartiéndose rueda por rueda para tener un tránsito óptimo.
Naturalmente, la autonomía no es el fuerte, ya que con la carga completa de sus baterías, la Ford SuperVan 4 puede hacer solo unos 37 kilómetros, lo que equivale, por ejemplo, a dar una vuelta y media a la pista de Nürburgring. El último dato de performance que hay que conocer es el de la velocidad máxima, y es “la frutilla del postre”, porque este prototipo con forma de Van puede alcanzar los 360 km/h.
SEGUIR LEYENDO