Una de las claves del comercio es generar deseo por el consumo del bien que se quiere vender. Para eso se inventó el marketing, que muchas veces se centra completamente en acciones indirectas que posicionan un producto de modo de ser deseable por lo que representa. Pasa con la marca de relojes, la de autos o la de computadoras o teléfonos celulares más caros y elegantes del mundo.
Pero para Elon Musk hay otros modos de hacer marketing, por cierto muy personales, que parecen dar resultado también. Desde hace dos años, el mundo del automóvil está esperando que llegue a producción la pick-up más excéntrica que se haya visto en la historia, y por supuesto es eléctrica, que se destaca por su diseño completamente radical a lo visto: la Tesla Cybertruck.
Las postergaciones de la fecha de inicio de la fabricación han sido reiteradas, y por causas distintas. La última, por la falta de microchips que aqueja a la industria, y de la que Tesla no puede estar exenta. Pero a esta altura de los acontecimientos, podría ser que esas hayan sido solo excusas, y mientras la industria esperaba a comprobar si era Tesla, Rivian, Ford (F-150 Lightning) o GM (Hummer EV), la primera fábrica en lanzar al mercado una pick-up 100% eléctrica, Musk fue cambiando especificaciones del Cybertruck para adaptar su oferta a un mercado que quiere liderar, a medida que conocía detalles de la competencia.
Así, de las tres versiones iniciales de la Cybertruck con 1, 2 o 3 motores eléctricos que incrementaban la potencia, capacidad de arrastre, autonomía y, por supuesto, precio hasta los 70.000 dólares para la versión Plaid, se pasa ahora a la Cybertruck de 4 motores, uno por rueda, que según ha anunciado el propio Musk, será la primera que saldrá a la venta.
“La producción inicial será una variante de cuatro motores, con control de torque ultrarrápido e independiente de cada rueda”, ha anunciado Elon Musk, quién dio a entender que esta serpa la especificación de la versión Plaid, que ya se sabía, sería la primera en llegar.
Este cambio parece responder al gran rival que Tesla tiene como productor original y específico de vehículos eléctricos, Rivian, que ya lanzó y está vendiendo y entregando su pick-up Rivian R1T, la cual tiene precisamente uno motor por rueda, y que había superado en prestaciones al más altamente equipado modelo de la Cybertruck.
Pero no es la única solución que adopta Tesla a la nueva configuración de su pick-up, porque también parece haber tomado del Hummer EV otra característica técnica, al anunciar que el vehículo tendrá ruedas traseras directrices en ambos sentidos. Esto significa que podrán girar en la dirección opuesta a las delanteras para girar en un radio mucho más cerrado, o en el mismo sentido, y desplazar el vehículo en diagonal, con el famoso “modo cangrejo”.
Y por si esto no alcanzaba, la Cyberturck incorporará de ambos modelos otra característica, que es la de girar sobre un eje vertical, al dar marcha hacia adelante a la dos ruedas derechas y marcha atrás a las dos ruedas izquierdas. Un modo para cambiar de dirección en muy poco espacio, proveniente de los tanques de guerra con sus orugas independientes una de la otra.
¿Habrán sido retrasos reales los que demoraron casi dos años la aparición del Cybertruck o hubo un doble juego de generar deseo y a la vez dejar que los competidores muestren sus cartas para responder mejor? Sólo Elon lo sabe…
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