Como si faltaran razones para tener sus hoteles llenos gracias al turismo y el juego, desde 1967, cada año la ciudad de Las Vegas tiene otro motivo para ser un polo de atracción más allá de sus casinos, ya que durante algunos días se convierte también en el epicentro de la tecnología.
El evento es conocido como el CES (Customer Electronic Show), que no es nada más ni nada menos que la feria más grande e importante del mundo de innovaciones tecnológicas. Pero por esas cosas del cambio de paradigma de la movilidad, dentro de poco en el CES empezarán a aparecer periodistas que frecuentemente realizaban coberturas de los salones internacionales del automóvil, y el siguiente paso será anexar un pabellón específico para autos y todo tipo de vehículos, que más allá de tener ruedas y transportar personas, serán computadoras de última generación.
La empresa suiza WayRay, que habitualmente presentaba en Las Vegas todo tipo de innovaciones tecnológicas, ha sido una de esas compañías que tomaron la decisión de incursionar en la fabricación de un auto integral. Así nació el WayRay Holograktor, un vehículo 100% eléctrico que además está lleno de tecnologías de avanzada hasta el nivel de conducción autónoma total.
El diseño de sus líneas se destaca por ángulos marcados por nervaduras y líneas de tensión, los famosos tendones de los que se habla en la arquitectura de los autos. Pero más allá de sus formas, lo verdaderamente interesante está en sus soluciones.
El WayRay Holograktor tiene, por ejemplo, un curioso sistema de apertura de puertas. Las delanteras lo hacen como una tijera y las traseras exactamente opuestas, se abren hacia atrás y hacia abajo.
La holografía y la realidad aumentada son tecnologías que están presentes en muchos dispositivos del Holograktor, por la propia naturaleza de WayRay. Entre sus herramientas, se puede hablar especialmente del Deep Reality Display, que es capaz de proyectar imágenes virtuales a diferentes profundidades en el parabrisas y en las ventanillas laterales, de modo tal que los ocupantes pueden disfrutar de una experiencia única, autónoma y segura. La tecnología que lo hace posible fue bautizada como True AR, y se basa en una película de fotopropileno trasparente que puede proyectar imágenes 3D cuando recibe luz Láser.
Pero este sistema no solo cumple la función de asistir al conductor respecto al tránsito y el entorno del auto, sino que también puede tener aplicaciones de entretenimiento, desde juegos hasta redes sociales, todo en los cristales del auto. El concepto está pensado para aplicarse en conducción autónoma total y viajes compartidos, aunque si el conductor desea tomar el volante y manejar el automóvil, automáticamente esa proyección de imágenes se desactiva del lado del conductor cuando el vehículo está en movimiento.
A nivel de propulsión, los motores eléctricos y el sistema de baterías del WayRay permitirán una autonomía de 600 km, con solo un par de valores oficiales entregados por la marca: aceleración de 0 a 100 km/h en 3,9 segundos, y velocidad máxima de 198 km/h.
Probablemente el WayRay Holograktor no termine siendo un auto que se pueda comprar para circular por las calles tal como se lo ha mostrado, pero el diseño y la tecnología se muestran para marcar un territorio, donde después nacerá el automóvil real.
SEGUIR LEYENDO