Pasar de Italia a Suiza por el lago di Como, permite a los turistas apreciar algunas de las postales más bellas de Europa. Desde siempre asociado con la elegancia, tranquilidad, suntuosidad y clase, esta zona es escenario desde 1929, de uno de los eventos más exclusivos de autos del todo el mundo: el Concorso d’Eleganza Villa d’Este.
El evento se desarrolla en Cernobbio, un pequeño municipio que está a solo 5 km al norte del pueblo de Como, en el que se pueden contemplar grandes mansiones del siglo XIX con enromes jardines que terminan en el mismísimo lago. Entre esas magestuosas propiedades, se destaca el que para muchos es el mejor hotel del mundo, el Hotel Villa d’Este.
A lo largo de su historia, este concurso tuvo dos etapas. La primera fue de absoluto esplendor hasta la entrada de Italia en la Segunda Guerra Mundial, que paralizó la industria automotriz y eventos como el concurso también. Sin embargo el regreso no fue lo esperado. Se hizo una edición en 1947 y se decidió transformarla en una muestra bienal, con lo que la siguiente edición fue recién en 1949. El resultado de la elección del auto ganador del concurso fue escandalosa porque el jurado premió a un diseño de Ghia llamado Alfa Romeo 6C 1750 GS, dejando de lado el auto que más sensación había causado, otro de la misma marca, el Alfa Romeo 6C 2500 SS. La industria y los carroceros padecían una fuerte crisis, y el desprestigio de 1949 hicieron que la edición de 1951 no se realizara, y el concurso quedara en el olvido por más de 40 años.
En 1986 se intentó revivir pero sólo fue una edición de autos clásicos, y entre 1995 y 1997, se volvió a realizar, sin demasiada convocatoria. Recién en 1999 se relanzó el concurso gracias al interés y el patrocinio de la casa alemana BMW para su propia marca y la nueva adquisición, Rolls-Royce, y desde 2002, volvió a ser convocante de coleccionistas y nuevos proyectos estilísticos o innovadores, aunque siempre, teniendo la elegancia como lema, no solo por el entorno, sino por las piezas que participan.
El de 2019 fue el último evento realizado en la semana final de mayo, como siempre había ocurrido, y recién este año, 2021, y luego de postergar la fecha de mayo para octubre, el Concorso d’Eleganza Villa d’Este ha regresado con todo su brillo y esplendor.
La joya de la fiesta ha sido el Lancia Dilambda Serie I Drop Head Coupé, ganador de la Coppa d’Oro Villa d’Este, un premio que es a perpetuidad, y por supuesto el más codiciado por los participantes. El auto fue elegido por el público de Cernobbio que tiene mucha injerencia en el resultado del premio mayor. Es el séptimo auto italiano consecutivo en ganar el premio, y la intervención de los locales, quizás tenga algo que ver, aunque la belleza de los automóviles premiados no se puede negar. El último auto “no italiano” en llevarse el premio fue el Bugatti 57SC Atlantic de 1938, en la edición de 2013.
Pero la elegancia no solo es para autos clásicos o antiguos. En el concurso de 2021, hubo premios para el Pininfarina Battista, el hypercar eléctrico de 1.900 CV y 2.300 Nm de toque, que se adjudicó el Design Award Concept Cars & Prototypes.
El premio que otorgan los organizadores, llamado BMW Group Trophy, fue para el Ferrari 250 GT TDF Coupé de Pininfarina de 1956. Un auto diseñado también por Pininfarina del que solo se fabricaron 45 unidades entre ese año y 1959. Estaba dotado de un motor V12 de 240 CV y era sumamente liviano, tan solo 1.050 kg.
Un Ferrari F40 de 1989 se llevó el Trofeo Vranken Pommery, un Fiat 508 CS Balilla Aerodinamica de 1935 el Trofeo BMW Group Classic, el Rolls-Royce Silver Ghost 40/50 ganó el Trofeo Fiva, para los modelos de posguerra mejor conservados, un Aston Martin DB5 Convertible de 1965 fue el dueño del Trofeo Automobile Club Como, por ser el coche que llegó al evento desde más lejos, y el Howmet TX 1968 ganó el Trofeo ASI (Asociazione Sportive Italiana) al automóvil mejor conservado después de la Segunda Guerra Mundial, aunque con una especial característica. Era un auto impulsado por una turbina y no por un motor a combustión.
Por supuesto, además de la exhibición que dura tres días y termina con el concurso, también hay subastas de autos que muy pocas personas en el mundo pueden comprar, pero esa noticia sale del romanticismo y la elegancia que el evento ha vuelto a tener. Después de un año de inactividad, no solo han regresado los Salones Internacionales del automóvil, como se pudo ver en Múnich y actualmente está aconteciendo en Barcelona. Los eventos suntuosos en lugares de ensueño también han regresado para que todos puedan sentir que después del covid-19, la vida vuelve de a poco a la normalidad.
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