Popular y deportivo: 45 años del nacimiento del Volkswagen Golf GTI

Si hay algo que no tiene en su historia Volkswagen es una tradición afianzada en vehículos deportivos. Pero siempre hay un modelo que rompe con esa costumbre y, por esa característica, se transforma en una leyenda de la marca. Ese ejemplar es el Golf GTI que, desde que llegó al mercado mundial hace 45 años, es el emblema de la automotriz en su línea deportiva.

Todo comenzó en 1976. Después de muchas horas de trabajo, en el más absoluto secretismo, se mostraba el primer Golf GTI, el MK I. Pese a que, exteriormente, solo unos pocos detalles permitían distinguirlo al modelo convencional, pronto se convirtió en un automóvil completamente único y novedoso.

Uno de los emblemas de esa línea era que bajo el capó se escondía una verdadera joya mecánica con un motor de 100 CV que, para esa época, era totalmente innovador. Sus argumentos eran claros y contundentes: impulsor ágil, dirección directa, chasis específico, peso ligero, caja de cambios con el característico pomo en forma de pelota de golf, franjas rojas en la parrilla del radiador y asientos deportivos.

En 1984, con solo ocho años de vida, el GTI ya era un ícono en el mundo automovilístico. Ese mismo año, Volkswagen daba la bienvenida al Golf GTI Mk II, con unas modificaciones estéticas en la parte trasera, neumáticos deportivos y un motor de 1.8 litros 8 válvulas con inyección mecánica que rendía 112 CV. El modelo contaba con la ya famosa insignia GTI en la parrilla, contorneada en su característico color rojo y con las también emblemáticas líneas rojas a lo largo de sus paragolpes negros.

Siete años más tarde, en 1991, llegaba la tercera generación: el Mk III. De mayor potencia que su antecesor, vivió su momento cumbre con el lanzamiento de la versión conmemorativa de los 20 años en 1996, con la que el GTI celebraba dos décadas de éxitos.

En 1998 se lanzó la cuarta entrega del GTI, que contaba con una imagen más conservadora pero con un rendimiento superior. Ese atributo llegaba de la mano del motor 1.8 turbo de 4 cilindros que alcanzaba los 150 CV. Esta generación culminó en 2001 con la edición “25 aniversario” que equipaba un 1.8 turbo de 180 CV.

La quinta generación no tardó en llegar, y con su debut en 2004, la marca alemana quiso mejorar los aspectos estéticos de la versión anterior. Lo consiguió gracias a unas líneas más atractivas y nítidas y con detalles que recordaban a la primera generación. Gracias al potente motor turbo TFSI de 200 CV y al cambio automático de doble embrague DSG que incorporaba por primera vez, el Mk V fue un éxito de ventas. Coincidiendo con los 30 años de su nacimiento, VW lanzó el modelo especial Edition 30, de 230 CV.

A su llegada al mercado, la sexta generación siguió aumentando sus prestaciones y alcanzaba una velocidad máxima de 240 km/h. El Mk VI estrenó un diferencial electrónico de desplazamiento limitado (XDS) que supuso toda una revolución en términos de estabilidad y que permitía el máximo agarre.

Esta versión encandilaba con el sonido de su motor de 210 CV conseguido gracias a un nuevo sistema de escapes que mejoraba notablemente el sonido. Con esta generación, se sumaron dos importantes novedades: un Cabrio y el “Golf GTI Edition 35” con un propulsor de 235 CV.

En 2012 se presentó la séptima que comparte el mismo motor 2.0 TSI del modelo anterior, pero que se ofrecía en dos versiones diferentes: el base de 220 CV y el “GTI Performance” de 230 CV. Este último, equipado con un diferencial electrónico de desplazamiento limitado en el eje delantero y con frenos de mayor diámetro para los conductores más exigentes.

A principios de 2016, llegó el GTI Clubsport de 290 CV. Y unos meses más tarde, arribó el Clubsport S de 310 CV, el Golf GTI más potente y rápido de la historia, cuya presentación en el Festival de Wörthersee sirvió para conmemorar el 40 aniversario de este compacto deportivo.

Según la marca, el GTI VIII es el más digital de todos los tiempos. La nueva generación de software y hardware se puede apreciar tanto en el interior como en la misma conducción: en el interior, el conductor accede a un mundo digitalizado e interconectado de indicadores y mandos.

El nuevo Golf GTI cuenta con un motor turbo de inyección directa de 2.0 litros (TSI) de 245 CV que está acoplado a una caja de cambios manual de 6 marchas o la conocida automática DSG de 7 marchas. En ambos casos, la máxima limitada es de 250 km/h.

Su diseño tiene un más achatado y alargado. El coeficiente aerodinámico básico se redujo de 0,3 a 0,275. También se mantienen las características típicas del GTI con la línea roja en la parrilla del radiador que por primera vez está terminada con un embellecedor transversal LED.

La última novedad de la familia es el GTI Clubsport 45. Por fuera, luce un mayor grado de deportividad y exclusividad con unos paragolpes más agresivo, unas rejillas más amplias y un splitter delantero. Además, equipa unas llantas multirayos de 19 pulgadas junto a una suspensión rebajada en 10 milímetros.

Dentro del habitáculo, se destacan los asientos deportivos al igual que el volante tapizado en cuero perforado con el emblema de la versión 45° aniversario.

Debajo del capó, esconde la planta motriz turboalimentada que eroga unos 300 caballos de fuerza, unos 55 extras frente al GTI convencional que se comercializa en todo el mundo (aún no llegó a varios mercado de la región). Se complementa con la transmisión automática DSG de 7 relaciones con levas al volante y su tracción es trasera.

Creado en 1976 como una variante más extrema, este último modelo es el encargado de rendir un homenaje a un modelo que tenía estipulado vender 5000 unidades y hoy ya superó los 2,3 millones de ejemplares.

Pero, más allá de los números, el Golf GTI se transformó en un ícono de la marca porque representó para miles de conductores en todo el mundo la democratización de la deportividad.

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