Land Rover Classic vuelve a mantener viva la llama del legado expedicionario del Defender original con la producción de una edición limitada de 25 unidades del Defender Works V8 Trophy.
Para el desarrollo de este nuevo modelo, la marca inglesa se basó en las especificaciones del rediseñado Defender Works V8 que fabricó entre 2012 y 2016. Al igual que esos ejemplares, esta edición limitada dispone de un motor naftero V8 5.0 con 405 CV y 515 Nm de torque, una transmisión automática ZF de ocho velocidades y un paquete técnico con mejoras en la suspensión, la dirección y los frenos.
Las 25 unidades con carrocería 90 o 110 Station Wagon (tres o cinco puertas) exhibirán un acabado exclusivo en color amarillo Eastnor con llantas de acero de 16 pulgadas. El tono negro Narvik en contraste se aplicará a los pasos de las ruedas, el capó y la puerta trasera. Además, incorporará faros LED, una parrilla delantera “heritage”, la insignia exclusiva de Land Rover Trophy y los datos de participación en el evento de cada propietario.
Los Defender Works V8 Trophy se diseñaron para hacer frente a los retos de resistencia más exigentes y por ese motivo todas las unidades equiparán un kit adicional con defensa frontal, estructura antivuelco, soporte de techo, protección de los bajos, barra triangular, toma de aire elevada y neumáticos especiales de uso extremo.
Por su parte, el interior está totalmente revestido con tapizados de piel Windsor de color negro, cuenta con asientos Recaro y dispone de un reloj “Land Rover Trophy” exclusivamente diseñado por Elliot Brown. También incluye el propio sistema de infoentretenimiento de Land Rover Classic con navegación integrada y conectividad con dispositivos móviles.
Dentro de unos meses, si la pandemia lo permite, los nuevos propietarios de estas unidades estarán invitados a competir en una aventura de tres días en el castillo de Eastnor, el exclusivo espacio para el desarrollo, pruebas y formación todoterreno de Land Rover.
Dan Pink, director de Jaguar Land Rover Classic, declaró: “El Land Rover Defender siempre fue más que un auto. Es célebre por lograr superar cualquier obstáculo gracias a su capacidad en materia de ingeniería, e idoneidad para las expediciones terrestres y las competiciones todoterreno. El nuevo Land Rover Trophy volverá a ofrecer todo esto a otra generación de aventureros”.
“Las experiencias tienen un espacio relevante en Land Rover Classic, así que aprovechamos los comentarios recibidos para llegar a este concepto. Esperamos con mucha ilusión el evento en Eastnor donde se pueda continuar la leyenda del Land Rover Trophy durante muchos años. Cuando contemplemos la silueta de estos vehículos, reconocibles al instante como un Land Rover, ascendiendo por las colinas de Eastnor, será sin duda el momento más importante de esta aventura”.
En el primer encuentro con su Defender Works V8 Trophy, los clientes y sus copilotos realizarán las marcas inaugurales en el vehículo al añadirle sus nombres y la bandera de su país. Después, se enfrentarán a diversos retos inspirados en famosas competiciones y aventuras internacionales que abarcan más de siete décadas de producción de Land Rover.
Como parte de la aventura, se ofrecerán tutorías individuales de la mano de expertos para que los clientes tengan la oportunidad única de desarrollar habilidades y técnicas de conducción extrema en su propio vehículo antes de poner a prueba todo lo aprendido. Todos los participantes competirán por diferentes premios, incluido un gran galardón para la persona que encabece la clasificación general, que se anunciará dentro de unos meses.
Rostros familiares del legado aventurero de Land Rover protagonizan el vídeo de lanzamiento del Defender Works V8 Trophy, incluida la embajadora de Land Rover y piloto de carreras y acrobacias Jessica Hawkins, además de participantes del Camel Trophy como Bob Ives, ganador de la edición de 1989. Algunos de estos expertos también estarán disponibles en el evento Land Rover Trophy para compartir sus conocimientos y experiencias.
Las 25 unidades de las dos versiones del Defender Works V8 Trophy podrán encargarse directamente en Land Rover Classic con precios que comienzan a partir de las 195.000 libras esterlinas (más de 270.000 dólares).
Un poco de historia de los Defender V8
Los impulsores V8 en el Land Rover Defender y sus predecesores de producción en serie comenzaron con el Series III Stage 1 V8 de 1979. Ese impulsor de 3.5 litros superaba los 90 caballos de fuerza. El One Ten de 1983 y el Ninety de 1984 estaban equipados con esa misma unidad, pero en una versión de 114 CV que aumentó a 136 CV a partir de 1987.
Únicamente en los modelos 90 y 110 para Norteamérica del Defender, a partir de 1992 se incluyó una versión naftera 3.9 Rover V8 que alcanzaba los 184 CV, asociado a una transmisión automática de cuatro velocidades.
En 1998, el motor 4.0 V8 de 190 CV del Range Rover de segunda generación se instaló con una transmisión automática de cuatro velocidades en una edición limitada del Defender 90 por el 50º aniversario.
El último Defender Works V8 de 2018 incorporó un motor atmosférico de 5.0 litros que se convirtió en el primer Land Rover Defender con motor V8 que se lanzó en forma oficial desde 1998.
Una “aventura” que mostró al mundo las aptitudes del Defender
El Camel Trophy fue un rally patrocinado por las marcas de cigarrillos y la automotriz inglesa desde 1982. Equipos de dos personas representaban a varios países en una competición de aventura donde los todoterrenos tenían un protagonismo destacado. Se valoraba las dotes al volante, el ingenio para superar obstáculos e incluso valor en el vadeo de ríos y otras adversidades.
La idea de cada una de las ediciones era emular los desafíos afrontados por militares de todo el mundo durante la segunda guerra mundial y de algunos civiles en varias expediciones por las selvas de América o África.
Su ocaso llegó en el año 2000 cuando la balanza se empezó a dar vuelta. Desde un principio los organizadores pusieron énfasis en mostrar su preocupación por la naturaleza, pero con el paso del tiempo ese enfoque empezó a recibir numerosas críticas debido a la agresividad que resultaba esa actividad para el medio ambiente.
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