Ferrari prepara el lanzamiento de su primer SUV, y eso es una certeza, aunque de las pocas que hay alrededor de la introducción de la legendaria marca en un segmento que no detiene su crecimiento, tanto que los referentes del lujo y la deportividad se están plegando a esa tendencia. Trascendió también en las últimas semanas que el familiar de Módena tomará formas de la cupé Roma, que fue lanzada a fines de 2019. Aún quedan dudas sobre la fecha en que será lanzado, si ocurrirá en 2021 o en 2022. Pero la única confirmación que existe hasta el momento es el nombre que habían elegido, que sin embargo tal vez deba ser modificado: era Purasangue, por la que la marca se encuentra en medio de una increíble batalla legal contra una ONG de atletismo que ya había registrado dicha denominación.
Aunque los planes ya no eran secretos, en Ferrari venían trabajando de manera sigilosa alrededor de este proyecto, tanto que no se ventilaron características y hasta ahora sólo se han visto maquetas digitales de diseñadores o medios especializados sobre una idea de cómo podría llegar a ser el SUV. Pero este inesperado litigio en la Justicia lo obligó a franquear la barrera del secretismo para instalarse en los tribunales de Bolonia, adonde en marzo podría empezar a definirse si este nuevo modelo se llamará como quiere la marca italiana.
Enfrenta a una pequeña organización sin fines de lucro dedicada al atletismo y, en ese contexto, al desarrollo de deportistas alejados de prácticas vinculadas con el dopaje. Por eso el nombre, Purasangue, que significa sangre pura y remite a la limpieza de un atleta y su crecimiento sólo a través del entrenamiento, sin tener que recurrir al soporte de drogas.
Sucede que a Ferrari también le asiste el sentido común en la defensa del nombre que había elegido para su SUV, porque pura sangre es una denominación de fantasía vinculada con los autos deportivos, pero en especial con el sello italiano, el Cavallino Rampante, por la enorme cantidad de caballos que configuran la potencia de sus motores, siempre salvajes.
La batalla principal se está librando en los tribunales de la ciudad de Bolonia, en el norte de Italia y distante unos 55 kilómetros de Modena, donde está la sede de Ferrari. La marca, por jurisdicción, realizó allí la denuncia y obliga a moverse a las autoridades de la ONG, que está inscripta en el Reino Unido aunque sus fundadores son un italiano y un holandés.
Precisamente en Bolonia se escucharán, el próximo jueves 5 de marzo, los argumentos de ambas partes en la defensa de sus posiciones. La fundación Purosangue, con actividades tanto en Europa como en Africa, alega haber inscripto la propiedad del nombre en 2011, cuando inició formalmente sus actividades, y se aferra a ello para sostenerse en la permanencia de su sello.
Ferrari, por su parte, elaboró su estrategia ofensiva en contra de la ONG asegurando en la demanda que Fundación Purosangue, una asociación sin fines de lucro, debe ceder su nombre debido a la falta de uso comercial en los últimos cinco años.
La representación legal de la ONG está a cargo de un abogado oficial, quien definió la batalla como una reedición de “David contra Goliat" y sostuvo que la marca Purosangue estuvo en uso constante, incluida una asociación para producir zapatillas y ropa de marca con Adidas, que es un patrocinador de la organización benéfica.
Desde la propia fundación sostienen desarrollar desde 2011 un "proyecto internacional de solidaridad" en pos de promover deportes limpios y sociales. También opera campamentos de entrenamiento en Kenia, Mozambique e Italia, y ejecuta planes para llevar a cabo controles de salud para los ancianos y enviar zapatillas para correr a África. La organización está registrada en Londres con la Comisión de Caridad del Reino Unido.
No parece ser casual que en las últimas semanas haya intensificado su actividad en las redes sociales, incluso con publicaciones que reeditan viejos videos, que se remontan los orígenes de la ONG, con actividades en distintos parajes africanos. Pareciera ser una estrategia tendiente a solidificar la constancia de su presencia antes de que Ferrari pensara en su SUV.
Purosangue tiene 160 seguidores en Facebook, 170 en Youtube y 2700 en Instagram. Ferrari, en tanto, cuenta con 16.300.000 followers en Facebook, 18 millones en Instagram y 720 mil suscriptores en YouTube. Un abismo entre ambos litigantes.
Uno de los fundadores de la ONG, el italiano Max Monteforte, dijo no tenerle “miedo” a la pelea judicial que deben encarar contra un gigante como Ferrari. “Soy un atleta, solía levantarme a las 4:30 A.M. para entrenarme, así que tengo una cierta mentalidad. No voy a tener miedo, incluso sabiendo que nos enfrentamos a una de las marcas más importantes del mundo”, desafió el entrenador en diálogo con el diario Financial Times, que ventiló el conflicto.
Además de la denuncia radicada en Bolonia, hay otra que se tramita en paralelo en la Justicia de los Estados Unidos, también promovida por Ferrari, a la que sin embargo la ONG Purosangue no ha respondido a los diferentes pedidos realizados por los magistrados.
¿Qué pasará con el SUV?
Originalmente, el lanzamiento de la Ferrari Purosangue estaba previsto para 2022, aunque no se descarta que se anticipe para el año próximo su aparición, dada la velocidad con la que otras marcas premium están disparando sus propios modelos al mercado.
Ferrari no dio a conocer detalles de estilo sobre su nueva creación, aunque se sabe que el diseño ya se aprobó internamente y estará vinculado con la cupé Roma. Por ello que es especula que será un SUV chico, en formato crossover, para mantener en el diseño la tradición de deportividad de la marca, que con un vehículo más cercano a un todoterreno se estaría alejando de manera ostensible de la historia ferrarista.
A pesar de tener un enfoque familiar, Ferrari va a enfocar el desarrollo del Purosangue a lograr el rendimiento más dinámico posible sobre la carretera. Tendrá cuatro plazas en configuración 2+2 y su motor estará situado en posición central-delantera.
La nueva plataforma sobre la que nació la Roma permite diversas distancias entre ejes y admite distintas motorizaciones, desde un V6 a un V8 o un V12, no sólo sobrealimentados sino incluso híbridos cuando sea necesario. La cifra de potencia máxima debería rondar los 700 caballos, mientras que lo que está asegurado es el sistema de tracción total.
El Porsche Cayenne, precursor en la incursión de marcas deportivas premium en la fabricación de modelos familiares, el Lamborghini Urus y el Bentley Bentayga son algunos de ejemplo seguidos por Ferrari para involucrarse en este proyecto.
Otras batallas judiciales de Ferrari
Ferrari ya se había visto envuelto a mediados de 2019 en un litigio a priori menor, al que sin embargo en Maranello le dieron trascendencia: obligó a un diseñador de modas alemán que eliminara de sus redes sociales la foto de una Ferrari 812 Superfast por entender que estaba infringiendo las normas de derechos de propiedad y, sobre todo, de buenas costumbres.
El hombre en cuestión es Philipp Plein, quien tiene 1,8 millones de seguidores en Instagram, y publica una serie habitual de imágenes que muestran su riqueza, lo que redunda en autos exóticos, modelos en bikini y jets privados.
Y al no querer verse involucrada en publicaciones de ese calibre, los abogados del Cavallino Rampante le enviaron a Plein una carta documento emplazándolo a que elimine una foto específica de su Ferrari 812 Superfast que publicó con un par de sus zapatillas personalizadas descansando en la ventanilla trasera del vehículo, de color verde.
“En estas imágenes, el nombre comercial de Ferrari se utiliza nuevamente para fines promocionales de su marca y productos, apropiándose ilegalmente de la buena voluntad adjunta a ellas. Sin embargo, su comportamiento es aún más dañino y grave en este caso”, alegó la marca italiana en el escrito.
La argumentación de Ferrari apuntó sobre todo a la naturaleza sexista de los posteos de Plein, en lo que mostró su Superfast 812 vinculado “con un estilo de vida totalmente inconsistente con la percepción de la marca Ferrari, en relación con los artistas que hacen insinuaciones sexuales y usan los coches de Ferrari como accesorios de una manera que es desagradable en sí misma”.
En la última década, Plein compró cuatro modelos de Ferrari y, al menos hasta principios de febrero de 2020, no eliminó la publicación solicitada por la marca italiana.
El fabricante de autos no es muy aficionado a que sus vehículos se muestren de una manera que no les gusta. Un caso particularmente famoso se dio en agosto de 2014, cuando el exitoso DJ DeadMau5 recibió una notificación porque su 458 Spider lucía una decoración de Nyan Cat.
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