Mucha gente piensa que los autos eléctricos son una cuestión moderna dado que parecen ser la alternativa más viable para la movilidad en el futuro. La necesidad de bajar emisiones contaminantes obligó a que muchas marcas tengan en su gama modelos de este tipo (o híbridos). Los países más desarrollados adaptaron su infraestructura para poder masificarlos, e incluso surgió una categoría de automovilismo (Fórmula E) que hace que miles de apasionados por el deporte motor conozcan la tecnología eléctrica. Pero el orígen del auto eléctrico se remonta mucho tiempo atrás.
Si se toma al triciclo que Karl Benz patentó en 1886 como el primer automóvil de la historia (con un motor de combustión interna), estamos en condiciones decir que el auto eléctrico es anterior, de hecho hay registros que en la década de 1830 el escocés Robert Anderson inventó el primer vehículo eléctrico puro.
Incluso a finales del siglo XIX los autos eléctricos fueron bastante populares, pero el avance del motor de combustión interna ganó la pulseada, especialmente en un mundo donde las consecuencias ambientales no eran tenidas en cuenta.
Con una producción basada en modelos con motores nafteros y diésel, algunas compañías nunca dejaron de investigar el auto eléctrico como alternativa. Nissan desde la década de 1940 viene desarrollado diversos modelos de este tipo. En 1947 apareció el Tama que fue desarrollado por ingenieros de aviación militar. utilizaba baterías de plomo-ácido que generaban 3.3 kW de potencia, una velocidad máxima de 35 km/h y ofrecía 65 kilómetros de autonomía. Fue pionero en su tiempo y proporcionó una solución a la escasez de petróleo en Japón. Por tres años, hasta 1950, uno de sus papeles fue servir como taxi.
Durante la década del 70, Volkswagen trabajó en una versión eléctrica del T2 Transporter en conjunto con Bosch, Varta y RWE. El Elektro Transporter fue impulsado por un motor ubicado en la parte trasera del vehículo y entregó una potencia nominal continua de 16 kW (22 HP). Las baterías de plomo fueron instaladas en el piso y pesaban 850 kilos. Debido al refuerzo del chasis pesaba 2.2 toneladas. La marca construyó durante un período de varios años producción de aproximadamente 120 vehículos.
En 1976 surgió el Elektro Golf I pero el proyecto involucró solo unos pocos vehículos de prueba. Este modelo fue construido en respuesta a la crisis del petróleo que se había superado recientemente. Técnicamente es el primer e-Golf y tenia un motor eléctrico acoplado a una caja de cambios de cuatro relaciones. Disponía de un cargador que hizo posible cargar las baterías de plomo de 16.6 voltios a través de un enchufe normal de 220 voltios (el proceso tardaba unas 21 horas).
Por otra parte, Nissan presentó el March EV en la 25ª edición del Auto Show de Tokio de 1983. El mismo presentaba un innovador sistema de propulsión eléctrica, un motor de inducción y una transmisión electromagnética de dos marchas. Como resultado, la batería generaba una autonomía de 160 kilómetros a una velocidad constante de 40 km/h.
Al igual que estos modelos hay muchos más que surgieron como rarezas a lo largo de la historia. Varios de estos vehículos sentaron las bases para que en la actualidad empresas como Nissan hayan comercializado 380.000 unidades del Leaf a nivel mundial desde su introducción en 2010. También, es importante destacar la presencia de marcas que se dedican únicamente a la fabricación de eléctricos haya marcas que se dediquen a fabricar únicamente eléctricos como es el caso de tesla.