En 2018, uno de cada tres compradores de un cero kilómetro en Noruega, lo eligió eléctrico. Los patentamientos de este tipo de vehículos llegaron a 46.092, un 40% más que en 2017. Siguiendo por este camino, en el país nórdico proyectan que en 2025 no venderán más autos a nafta o gasoil en los concecionarios.
El modelo más vendido el año pasado fue el Nissan Leaf, un 100% eléctrico que registró 12.461 ejemplares comercializados -las cifras provienen del Consejo de Información de Tráfico (OFV) de ese país-.
Se trata del mismo modelo que ya está confirmado para 2019 en la Argentina. Por el momento, a nivel local el único "full electric" que se consigue es el Renault Kangoo Z.E., un furgón que llega importado desde Francia.
Volviendo a Noruega, el buen desempeño de los eléctricos contrasta con el de los otros. Por ejemplo, la venta de modelos con motor diésel -a gasoil- bajó un 28%, mientras que los nafteros cayeron un 17%. Los híbridos no enchufables, por su parte, disminuyeron un 20%.
El país nórdico es un ejemplo en materia de incentivo a los eléctricos. Quien tiene uno paga menos impuestos, además de gozar de estacionamientos gratuitos en las ciudades y una extensa red de recarga de baterías
Otros modelos a los que les va bien en Noruega son los Volkswagen Golf y BMW i3. El primero posee su versión eGolf a la venta, que es completamente eléctrica, mientras que el i3 –que nació ecológico– es un pequeño urbano.
Como referencia, en España en 2018 se comercializaron 15.495 autos eléctricos, menos de la mitad que en suelo noruego. Además, aseguran que este último el año pasado logró generar prácticamente la totalidad de su electricidad mediante recursos limpios, tales como convertir la energía hidráulica en eléctrica.