Mientras prepara su regreso al circuito tras un 2021 decepcionante, Rafael Nadal, el incombustible tenista español, reveló algunos de sus pensamientos más íntimos sobre el éxito, el fracaso y el deporte. Y no solo importa lo que dijo, sino dónde y a quién se lo dijo.
“Ser arrogante y tener mucha confianza pues ayudarte por un tiempo, pero en el largo plazo te quita la posibilidad de trabajar de la manera adecuada”, dijo Nadal durante una charla en su fabuloso yate, fondeado en el puerto de Montecarlo durante el Monaco Yacht Show, con el alemán Nico Rosberg, campeón mundial de la Fórmula 1 en 2016.
Durante la visita, Rosberg se asombra de la cantidad de televisores que Nadal tiene en el yate, y compara el diseño con el de su propio barco.
“Sí, esto también lo tenemos en el mío, sí, esto es igual”, dice Rosberg durante el recorrido, hasta que ingresa a una de las cuatro suites del yate y se queda impactado por la distribución de las camas. “Ah, no, esto yo lo tengo diferente... Y lo de acá se ve, de alguna manera, mejor”.
Nadal explica que todo fue diseñado junto a su esposa, Xisca, y admite que un día no le hizo caso al capitán, salió al mar en malas condiciones y dañó parte del barco.
Tras un informal partido de ping-pong en el que, para ganar un punto, Rosberg miente y le dice a Nadal que el príncipe Alberto de Mónaco está por ingresar al yate, ambos se sientan para una conversación que comienza con un acuerdo en tono de broma: “Ganar no es lo más importante, es lo único”.
“Cuando van pasando los años, las sensaciones son un poco diferentes en todos los aspectos”, le dijo Nadal a Rosberg cuando este le preguntó acerca del objetivo de recuperar su mejor nivel y ranking en 2022. “Tuve unos meses muy malos con mi pie izquierdo”.
“Conozco el proceso para volver, he estado ahí muchas veces y estoy muy entusiasmado con ese proceso. Tengo confianza en que padre jugar sin demasiado dolor, voy a tener mis posibilidades”.
¿Cómo lidias con las dudas?, le preguntó Rosberg.
“Las dudas te permiten trabajar de la manera adecuada. Si no tienes dudas en esta vida es porque eres demasiado arrogante. En esta vida, la mayoría de las cosas no están cien por ciento claras”.
“Ser arrogante y tener mucha confianza pues ayudarte por un tiempo, pero en el largo plazo te quita la posibilidad de trabajar de la manera adecuada”.
Es entonces que el alemán se atreve con una comparación siempre sensible para Nadal, ex número uno del mundo: “Si te fijas en (Novak) Djokovic, probablemente no esté en el lado de los sensibles”.
“Él es más una máquina en términos de mentalidad, pero estoy seguro de que también tiene sus dudas”, responde Nadal, que empata con Djokovic y el suizo Roger Federer en cantidad de títulos de Grand Slam conquistados: 20 cada uno.
“Pero no hay un solo modo de llegar al éxito o de cumplir tus sueños”, remata el español, que tras un 2021 con un serio problema de lesión en su pie izquierdo se está preparando para regresar en plena forma en 2022 y ya confirmó su presencia en el Abierto de Australia.
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