El reporte llegó antes del amanecer, haciendo que los miembros de la Policía de las Cataratas del Niágara se apresuraran hacia las atronadoras cataratas el martes temprano.
Según explicaron las autoridades en un comunicado compartido en Twitter, allí había un hombre "en crisis", y estaba cerca del borde de Horseshoe Falls, la más grande de las tres cataratas del Niágara, que se extiende a lo largo de la frontera de EEUU y Canada, y atrae a millones de visitantes al año.
A pesar de sus esfuerzos, cuando los agentes llegaron a esa parte de las cataratas sobre las 04:00 horas de la madrugada, aparentemente habían llegado tarde.
La policía del parque dijo que vieron al hombre trepar por encima del muro de contención, una barrera resistente hecha de bloques de piedra tallada, entremezclada con barandillas metálicas decorativas, y entrar a las aguas embravecidas del Río Niágara. En cuestión de segundos, fue arrastrado hacia la enorme cascada desapareciendo entre la impenetrable nube de niebla que se levanta desde la garganta.
Sin protección y enfrentando una dura caída de casi 60 metros a una piscina de agua cubierta por grandes rocas, la historia sugería que las posibilidades de supervivencia del hombre eran mínimas. Decenas han muerto dando el mismo salto, ya fuera por accidente, o en la mayoría de los casos, de forma intencionada. Según The Buffalo News, se estima que 25 personas se suicidan anualmente tirándose desde lo alto de las cataratas.
Pero cuando las autoridades recorrieron el martes por la mañana la parte baja del río Niágara en busca del individuo, se encontraron con algo inusual. El hombre estaba sentado en las rocas cerca del borde del río, y estaba vivo.
Lo encontraron sin heridas de gravedad, y lo trasladaron al hospital para que fuera atendido, dijo la policía. Su identidad no fue revelada y las autoridades declinaron proporcionar más información del caso a última hora del martes.
"Es un chico con mucha suerte. No mucha gente que haga eso y viva para contarlo", dijo Andy Essor, residente de Ontario, al medio local The Buffalo News. "Definitivamente lleva a Dios en su bolsillo".
Los hechos ocurrieron en el 59 aniversario de otra historia milagrosa de supervivencia en las Cataratas del Niágara. El nueve de julio de 1960, el niño de 7 años, Roger Woodward, fue rescatado después de pasar por Horshoe Falls sólo con un chaleco salvavidas, después de sufrir un accidente de navegación en la parte superior del río. En ese momento, el chico americano fue la primera persona en sobrevivir a la caída sin protección de un barril o algún tipo de embarcación.
"Yo estaba flotando en una nube", dijo Woodward a la agencia Associated Press (AP) en 2010, recordando el momento en que le ocurrió. "No tenía la sensación de subir o bajar. No tenía ninguna sensación en mi estómago como la que se tiene en una montaña rusa… ese momento cuando sientes el estómago en la garganta".
Woodward es sólo uno de las al menos 12 personas que sobrevivieron antes del incidente del martes, informó The News. De acuerdo con el sitio web de Parques del Niágara, durante las horas pico de turismo del día, más de 6 millones de pies cúbicos (170.000.000 de litros) recorren las cataratas cada minuto. Según su información, puede ser la cascada en movimiento más rápida del mundo.
En 1901, Annie Edson Taylor, una profesora de Bay City, en Michigan, se convirtió en la primera persona en caer de las cataratas en un barril y sobrevivir, como parte de un truco que pensó que le generaría algo de dinero rápido en efectivo, informó The Washington Post en 1981. Miles de personas se reunieron para ser testigos de su hazaña, que requería un contenedor hecho a medida que tenía un arnés en el interior, y estaba equipado con un peso de plomo y una almohada, según The Post.
Aunque Taylor salió victoriosa de la prueba, dijo que "no lo volvería hacer ni por un millón de dólares".
"Preferiría caminar hacia la boca de un cañón sabiendo que me haría pedazos que volver a hacer un viaje por las cataratas", le dijo después a los reporteros.
Pero las palabras de Taylor, y el hecho de que nunca fue rica, hicieron poco por persuadir a otros temerarios de intentar la misma hazaña. El diario The Toronto Star informó que tres de las primeras seis personas que se lanzaron en barriles murieron en el intento.
Con el paso de los años, un puñado de personas conquistaron la caída con artilugios que van desde barriles de acero hasta bolas gigantes de goma. A esos aventureros se unió un grupo más pequeño: aquellos que sobrevivieron después de lanzarse sin un artilugio de seguridad.
Kirk Jones, un hombre de Canton, Michigan, se convirtió en el primer adulto conocido en sobrevivir a una caída sin protección en Horseshoe Falls, en octubre de 2003. Después de saltar al río en lo que él más tarde describió como un intento de suicidio, Jones dio el primer paso mientras los testigos gritaban de terror, contó en 2004 Detroit Free Press.
Sentí como si un equipo de jugadores me golpearan con un bate de béisbol. Más tarde fue arrestado y le prohibieron de por vida regresar a las cataratas del Niágara, según Free Press. Jones murió en 2017 a los 53 años después de intentar volver a las cascadas de nuevo, esta vez dentro de un balón inflable con su mascota Misty, una boa constrictor.
Según los registros, dos hombres canadienses también intentaron suicidarse en las cataratas, uno en 2009 y otro en 2012, según CNN. El hombre que de 2012 sufrió heridas en la cabeza y los hombros, un pulmón colapsado y lesiones en el pecho y en las costillas, informó The Star.
El martes, Jim Diodati, alcalde de Niagara Falls, en Ontario, dijo a The News que el hombre que fue rescatado esa mañana pudo haberse salvado por los altos niveles de agua.
"Sé de primera mano que el lago está en los niveles más altos de todos los tiempos", dijo Diodati. "Cuando el lago Erie está más alto y fluye con más fuerza hacia el lago Ontario, hay una mayor oportunidad de evitar las enormes rocas bajo las cataratas de Horseshoe. La única forma en la que alguna vez tendrías la oportunidad de sobrevivir a una caída de ese tipo es sobrepasando las rocas de abajo".
El después añadió: "En este caso, para este caso individual, espero que vea que está bendecido".
En México el Sistema Nacional de Apoyo, Consejo Psicológico e Intervención en Crisis por Teléfono (SAPTEL) ofrece atención telefónica las 24 horas del día en el número: 0155 5259-8121. En los Estados Unidos se puede marcar el +1-888-628-9454.
En el Centro de Asistencia al Suicida de Buenos Aires atienden a cualquier persona en crisis en las líneas gratuitas 135 desde Buenos Aires y GBA o al +54-11 5275-1135 las 24 horas del día. Está también el Centro de Atención al Familiar del suicida (CAFS): Tel. (011) 4758-2554 (cafs_ar@yahoo.com.ar – www.familiardesuicida.com.ar).
En Estados Unidos, existe la Red Nacional de Prevención del Suicidio para pedir ayuda; puedes llamar al 1-888-628-9454 o al 1-800-273-8255, la línea del Servicio Nacional de Prevención del Suicidio, para hablar con alguien que te brindará apoyo gratuito y confidencial las 24 horas del día, los siete días de la semana. Los CDC también recomiendan sus propias políticas, programas y prácticas de prevención.