Venezuela se prepara para las consecuencias del aparente intento de asesinato al presidente Nicolás Maduro

Por Rachelle Krygier y Anthony Faiola

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Momento en que oficiales de seguridad intentan proteger al presidente Nicolás Maduro del supuesto atentado en su contra (@XHespanol)
Momento en que oficiales de seguridad intentan proteger al presidente Nicolás Maduro del supuesto atentado en su contra (@XHespanol)

Caracas (Venezuela) – Para este domingo, Venezuela se ha preparado para más arrestos y posibles purgas militares un día después de que el gobierno afirmara que el presidente Nicolás Maduro había sobrevivido a un aparente intento de asesinato mediante la utilización de drones con explosivos mientras pronunciaba un discurso televisado en cadena nacional.

Maduro salió ileso del incidente en el que siete personas resultaron heridas, según informaron las autoridades. En el video del momento de las explosiones, se puede apreciar a cientos de tropas de Maduro aparentemente huyendo presas del pánico al escuchar los estallidos. Tres horas después de los hechos, el presidente dio un discurso en el que dijo que un "escudo de amor" había protegido su vida y acusó a la "extrema derecha" vinculada a Colombia y a los disidentes venezolanos que viven en Estados Unidos de ser los autores del presunto ataque.

Maduro llegó, incluso, a culpar al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos –nombrándolo por su nombre-, algo que llevó a la oficina del exjefe de gobierno a emitir una "negación enfática".

"La sugerencia de que el presidente colombiano es responsable de este supuesto ataque contra el presidente de Venezuela es absurda y carece de todo fundamento", señalaba el comunicado. "Ya es costumbre del líder venezolano culpar permanentemente a Colombia por cualquier situación".

Un alto funcionario del Departamento de Estado de Estados Unidos se negó a hacer comentarios sobre el incidente más allá de señalar que la administración estaba siguiendo los reportes de Caracas.

Siete personas resultaron heridas tras la denotación de los explosivos (@XHespanol)
Siete personas resultaron heridas tras la denotación de los explosivos (@XHespanol)

Maduro explicó que varios sospechosos ya habían sido detenidos. Pero el gobierno no reveló sus identidades ni dio a conocer más pruebas.

Un video del incidente, a las 5:40 de la tarde del sábado, mostraba a la primera dama, Cilia Flores, al lado de Maduro. Levantó la vista y se llevó la mano al corazón, aparentemente asustada por la explosión. Maduro interrumpió el discurso que estaba dirigiendo a su Guardia Nacional. Luego, una cámara captó las líneas de personal militar formado que estaban en el centro de Caracas. Segundos más tarde, los soldados, al igual que las personas que están de pie tras las vallas, corrieron hacia un lado. También se escuchó la voz de Maduro diciendo: "Vamos a la derecha".

The Associated Press informó el sábado que tres bomberos habían contradicho la versión del gobierno y aseguraron que la explosión provenía de un tanque de combustible en un edificio de apartamentos que quedaba cerca del lugar. Los expertos pidieron al gobierno que publicara nuevas secuencias de video y pruebas.

"A partir de las imágenes del escenario y la dispersión militar, parece que vieron alguna cosa", remarcó David Smilde, experto del grupo de Venezuela en la Oficina de Washington para América Latina. "Pero si el gobierno u otra persona no muestra imágenes de estos drones o de las explosiones, debería considerarse como altamente sospechoso. Filman todo lo que hacen desde múltiples ángulos. Por lo tanto, es difícil imaginar que no tendrían imágenes de esto si realmente sucedió".

Nicolás Maduro pronunció un discurso tres horas después d elos incidentes para confirmar que se trataba de un intento de atentado (Reuters)
Nicolás Maduro pronunció un discurso tres horas después d elos incidentes para confirmar que se trataba de un intento de atentado (Reuters)

Los líderes opositores de Venezuela dudan de la versión del ataque del gobierno y lo acusan de querer realizar persecuciones contra legiones de desertores del ejército al tiempo que distraen al público de una crisis económica en la que el hambre y la desnutrición crecen y las enfermedades se están extendiendo a medida que faltan hospital y medicinas básicas.

Siete periodistas que estaban cubriendo la noticia fueron detenidos por las fuerzas de seguridad e interrogados durante horas, según el Sindicato Nacional de Trabajadores de Medios de Venezuela. Todos fueron liberados, pero a algunos les confiscaron sus cámaras.

"Estábamos haciendo videos desde nuestro automóvil porque estaba lloviendo y luego tratamos de acercarnos a la avenida Bolívar para mostrar la situación. De repente personal de la Guardia Nacional y la Inteligencia Militar se nos acercaron", contó Neidy Fuentes, periodista del sitio de noticias VivoPlay. "Uno de ellos subió a nuestro automóvil y casi se me sentó encima. Agarró mi teléfono y me dijo que apagara la cámara. Fue intimidante", recordaba.

Las personas que viven cerca del lugar donde ocurrió el incidente manifestaron que escucharon dos explosiones.

"Queda por ver si realmente fue un ataque, un incidente fortuito o algunas de las otras versiones que circulan en los medios", escribió en un comunicado el Frente Amplio, una coalición de partidos y grupos de la sociedad civil. "Lo responsable sería esperar a que se realicen las investigaciones, pero es difícil creer lo que dicen los burócratas del régimen".

La popularidad del presidente de Venezuela ha caído a menos de un 30 por ciento debido, principalmente, a la grave situación económica (Reuters)
La popularidad del presidente de Venezuela ha caído a menos de un 30 por ciento debido, principalmente, a la grave situación económica (Reuters)

Juan Pablo Guanipa, ex gobernador del estado Zulia que fue cesado de su puesto, tuiteó el video del momento en que se interrumpió el discurso. Sobre eso, él dijo: "Estas imágenes nos dejan dos conclusiones. Que el régimen de Maduro sabe que tiene tanto rechazo de la sociedad civil y militar que lanza un ataque para ver cuánta solidaridad venezolana e internacional puede reunir y que las fuerzas armadas tienen miedo y no están dispuestas a defender su vida".

El incidente envió ondas de choque a través de Venezuela, un país que ya estaba en vilo. La nación sudamericana está sumida en una profunda crisis política y económica. Con una elevada inflación y la escasez que, cada día más, se agudiza, decenas de oficiales y soldados han sido arrestados por el gobierno en relación con supuestos complots golpistas.

En junio de 2017, un comandante de la policía de inteligencia voló en helicóptero sobre las instituciones del gobierno y lanzó granadas contra el edificio de la Corte Suprema del País. El comandante Oscar Pérez fue ejecutado en enero después de publicar dramáticos videos de su enfrentamiento con el personal militar.

Mientras tanto, cientos de soldados han abandonado sus puestos desde que Maduro, un ex conductor de autobuses y sucesor de Hugo Chávez (falleció en 2013), ganó las elecciones en mayo. Líderes de la oposición y docenas de países, entre ellos Estados Unidos, señalaron que esos comicios eran fraudulentos. Maduro ha intentado reunir a sus partidarios para defender la nación después de las sugerencias del presidente Trump de que una solución militar sigue sobre la mesa para obligar a Maduro a restablecer la democracia.

Los analistas sugirieron que era probable que Maduro usara el incidente para realizar nuevas purgas contra las tropas militares sospechosas de deslealtad.

"En un intento de simpatía y apoyo, utilizará el incidente para radicalizar la situación, probablemente para hacer purga entre los militares, fortalecer su Guardia Nacional y embellecer la narrativa sobre el hecho de ser atacados por Estados Unidos, Colombia y otros países", indicó Eric Farnsworth, vicepresidente de Americas Society and Council of The Americas, una organización de negocios y cultura.

Un grupo denominado "Soldados de Franela", que se describen a sí mismos como soldados disidentes, se responsabilizó de los ataques a través de una cuenta en Twitter que tiene 90.000 seguidores.

"La operación era hacer volar dos drones cargados con C4 (explosivo) y disparar contra el presidente. Pero los francotiradores de la Guardia de Honor derribaron los drones antes de alcanzar el objetivo. Demostramos que son vulnerables. No lo logramos hoy, pero es cuestión de tiempo", agregó el grupo sobre las 7 de la tarde.

La popularidad de Maduro ha caído a menos del 30 por ciento, principalmente porque los venezolanos no pueden satisfacer sus necesidades más básicas.

Cuando ocurrió la aparente explosión durante un evento conmemorativo del 81º aniversario de la Guardia Nacional de Venezuela, Maduro estaba haciendo la promea de llevar al país hacia una recuperación económica.

"Este fue un ataque para matarme. Las primeras investigaciones ya muestran que los responsables intelectuales y financieros de este ataque viven en Estados Unidos, en Florida. Espero que el gobierno de Donald Trump esté dispuesto a combatir a los grupos terroristas que quieren atacar a presidentes de naciones pacíficas".

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