La mayoría de los estadounidenses cree que los autos autónomos serán bastante comunes en los próximos 15 años, aunque el 74 por ciento de las personas afirma que no espera tener uno. Dos tercios señalan que no les gustaría caminar o andar en bicicleta cerca de uno de ellos.
¿Confuso? Eso se debe en parte a que los resultados provienen de tres encuestas recientes sobre las actitudes de los estadounidenses hacia los automóviles autónomos.
En general subrayan los recelos entorno a los vehículos autónomos y el desafío que enfrentan los fabricantes de automóviles para comercializarlos, así como la necesidad de garantías de seguridad por parte de los reguladores federales.
La mayoría de los estadounidenses, el 70 por ciento, según una encuesta de HNTB que se dio a conocer recientemente, se han calmado ante la idea de que los autos sin conductor afectaran a su futuro, tanto si viajan en uno o no.
Los desarrollos que auguran el futuro de los autos autónomos han llegado por partido doble. En primer lugar, una destacada empresa de inversión tecnológica, SoftBank Vision Fund, prometió invertir USD 2.25 mil millones en la operación de vehículos autónomos de General Motors. Luego, Fiat Chrysler Automobiles anunció que proporcionaría "hasta 62.000" minivans híbridas Chrysler Pacifica a Waymo, la empresa pionera de autos autónomos.
Con varias docenas de empresas trabajando para desarrollar vehículos autónomos o ponerlos en carretera, la presencia de los autos es inevitable. Pero antes de que "se vuelvan comunes en 15 años", como dice la encuesta de HNTB, será necesario un cambio masivo de actitud.
"Algunas de las cosas que me sorprendieron en las tres encuestas fueron que la mayoría de la gente no está dispuesta a viajar en un vehículo automatizado", dijo Jim Barbaresso, que dirige la Práctica de Sistemas Inteligentes de Transporte en HNTB, una firma de soluciones de infraestructura.
En esa encuesta, el 55 por ciento de las personas dijo que no viajaría en un vehículo autónomo. Un estudio realizado hace unas semanas por AAA puso ese número en el 73 por ciento, y otro de Consumer Watchdog que salió tres días después tuvo casi el mismo resultado, un 74 por ciento.
Cuando salió el informe de AAA, Greg Brannon, director de ingeniería del grupo, reflexionó sobre lo que podría ser un punto clave: "Cualquier incidente que involucre un vehículo autónomo puede sacudir la confianza del consumidor, que es un componente crítico para la aceptación generalizada de vehículos autónomos".
Una simple lectura de los titulares recientes podría explicar esa teoría.
En marzo, Uber canceló su fase de prueba con vehículos autónomos después de que uno de sus autos matara a un peatón en Tempe (Arizona). Un vehículo de prueba de Waymo, con un humano al volante, se estrelló cuando otro conductor se cruzó en su camino, también en Arizona. Los vehículos de Tesla en modo ayuda también se han estrellado y eso ha generado confusión con los autos completamente autónomos. De hecho, se han leído titulares del estilo: "un conductor de Tesla muere en el primer accidente de un vehículo autónomo". Y cuando un camión retrocedió y golpeó a un autobús autónomo, un diario publicó: "Un autobús autónomo en Las Vegas tiene un accidente en la primera hora de servicio".
Después de varias implosiones de publicidad negativa, AAA descubrió que el número de millennials que manifestó que no estaba dispuesto a viajar en un automóvil sin conductor había aumentado del 49 por ciento a finales de 2017 al 64 por ciento el mes pasado, y que en general, casi tres cuartos de las personas a las que interrogaron dijeron que no conducirían uno.
Pero Barbaresso señala que en una era en la que el omnipresente iPhone tiene menos de una docena de años, la tecnología avanza. No se sorprendió cuando 7 de cada 10 personas afirmaron que esperaban que los autos sin conductor fueran comunes en los próximos 15 años.
"No me sorprendió porque la tecnología avanza bastante rápido", dijo. "Pueden pasar muchas cosas en 15 años. Existe la renuencia a viajar en un vehículo automatizado en este momento, pero dentro de 15 años, la disposición a viajar en tales vehículos aumentará drásticamente en ese período de tiempo".
El informe de HNTB agregó matices a los hallazgos sobre personas de entre 18 y 34 años, señalando que la mayoría de ellas piensa que los autos autónomos son más seguros que aquellos con conductores humanos y que su puesta en marcha convertiría las calles en lugares más seguros para peatones y ciclistas. La encuesta de HNTB fue contraria a AAA, y encontró que el 60 por ciento de los millennials afirmaron que están listos para subir a uno de esos vehículos.
"Las generaciones más jóvenes son conocedoras de la tecnología", comentó Barbaresso. "Los millennials, incluso muchos de los de la Generación X, parecen tener una mayor disposición a viajar en un auto automatizado en comparación con otras generaciones".
En 15 años, el más joven de los millennials tendrá 33 años y el de la Generación X tendrá 50. Si los automóviles autónomos son comúnmente aceptados para ese entonces, Barbaresso augura las compañías tendrán que utilizar estrategias de markeing que enfaticen la seguridad de estos vehículos.
"Creo que la educación pública también. Y las agencias gubernamentales deben intensificar las medidas para garantizar la seguridad", comentó. "Los vehículos automáticos son muy amables. Siguen las normas de tráfico. Los conductores humanos no son necesariamente de la misma manera".