Los rescatistas lo acunaron en un canal poco profundo, con los brazos alrededor de su cuerpo resbaladizo y tembloroso. No podía comer y luchaba por nadar y respirar. Se abrieron sombrillas rojas encima para bloquear el duro sol. Fue una carrera contrarreloj para salvar a la ballena piloto macho, que moría lentamente después de que fue descubierto el lunes en Tailandia cerca de la frontera con Malasia.
Un equipo de rescatistas desplegó boyas para evitar que el mamífero se cayera al agua y se ahogara mientras los veterinarios lo cuidaban. Vomitó cinco bolsas de plástico durante el intento de rescate.
La ballena murió el viernes después de una pelea de cinco días, dijo el Departamento de Recursos Marinos y Costeros del país, convirtiéndose en el más reciente incidente de alto perfil de la vida marina obligado a vivir en océanos plagados de basura humana. Una autopsia reveló que docenas de bolsas de plástico golpearon el estómago de la ballena, que pesaban 7 kilos en total, escribió la agencia en Facebook.
Las fotos publicadas en las redes sociales mostraban tantas bolsas de plástico negras largas que las autoridades se estaban quedando sin espacio para maniobrar en la sala de operaciones sin pararse en la basura. Un paquete de plástico blanco se ve junto con las entrañas que se extienden a través de una mesa del quirófano.
Los funcionarios tailandeses dijeron que creen que la ballena confundió el plástico flotante con la comida. Este tipo de ballenas come principalmente calamar, pero también cazan pulpos, sepias y peces pequeños cuando los calamares son difíciles de alcanzar, dijo la Sociedad Estadounidense de Cetáceos.
Thon Thamrongnawasawat, biólogo marino y profesor de la Universidad Kasetsart en Bangkok, dijo a Agence France-Presse que el plástico probablemente impidió que la ballena digiera los alimentos. "Si tienes 80 bolsas de plástico en el estómago, mueres", dijo y agregó que al menos 300 animales marinos, incluyendo calderones, tortugas marinas y delfines, mueren anualmente después de ingerir plástico en aguas tailandesas.
Según un estudio de 2014, más de 5 billones de piezas de basura se encuentran en los océanos del mundo. De eso, casi 270.000 toneladas de desechos plásticos grandes y pequeños están en la superficie.
Una investigación publicada el año pasado encontró que el 83 por ciento de las muestras de agua de más de una docena de naciones estaban contaminadas con fibras plásticas.
No estaba claro si la ballena piloto era una ballena piloto de aletas cortas o de aletas largas, aunque los pilotos de aletas cortas suelen atravesar las aguas más cálidas típicas del sudeste asiático. Los machos crecen hasta 6 metros y pesan hasta tres toneladas, con hembras que alcanzan los 5 metros y 1,5 toneladas, según la Sociedad Estadounidense de Cetáceos.
La basura en el océano ha afectado a otras especies de ballenas.
En abril, un cachalote de 10 metros, que pesaba casi 6.800 kilos, fue encontrado muerto en una playa española. Más de 27 kilos de basura obstruyeron su sistema digestivo.
Y en 2016, algunos de los más de 30 cachalotes varados en la playa de Europa fueron encontrados con restos de plástico en el estómago, informó National Geographic, incluida una gran red de pesca, una cubierta de motor y fragmentos de un cubo de plástico.
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